Hemingway 'regresa' a Cuba pese al embargo estadounidense
Decenas de expertos internacionales participan en un coloquio sobre el escritor en el 50? aniversario de su muerte - EE UU impide viajar a 14 investigadores
El hotel Ambos Mundos recibe estos d¨ªas a su hu¨¦sped m¨¢s ilustre. Ernest Hemingway, o mejor dicho, su esp¨ªritu y su legado, ha regresado al establecimiento de La Habana Vieja donde empez¨® a escribir en 1939 el borrador final de Por qui¨¦n doblan las campanas. Lo ha hecho gracias a las ponencias y ensayos de una treintena de acad¨¦micos e investigadores de su obra, casi una secta, llegados de todo el mundo para rendirle homenaje al cumplirse 50 a?os de su suicidio en Idaho (el 2 de julio de 1961). Cuatro d¨ªas de conferencias y debates que concluir¨¢n el 19 de junio con una visita a Finca Vig¨ªa, residencia habanera de Hemingway, y se da la circunstancia de que 14 profesores e investigadores norteamericanos no han recibido a tiempo el permiso del Departamento de Estado de EE UU para participar en el seminario.
A medio camino entre Floridita y La Bodeguita del Medio, los santuarios donde papa Hemingway sol¨ªa abrevar en La Habana, el hotel Ambos Mundos acoge a estudiosos y expertos tanto de su obra como de su vida. Entre ellos est¨¢n Jenny Phillips, nieta del editor de Hemingway, Maxwell Perkins, y su esposo Frank, quienes presiden la fundaci¨®n estadounidense Finca Vig¨ªa.
La instituci¨®n fue creada en 2001 con el prop¨®sito de colaborar en la conservaci¨®n del patrimonio del escritor en la isla -casa, yate, libros, fotos, cuadros, cartas, manuscritos in¨¦ditos...-, que se preserva en la quinta situada en el poblado de San Francisco de Paula, a 25 minutos de La Habana, donde el escritor pas¨® largas temporadas entre 1939 y 1960, y donde escribi¨® El viejo y el mar.
Tambi¨¦n se cumple este a?o el quincuag¨¦simo aniversario desde que la ¨²ltima esposa de Hemigway, Mary Welsh, don¨® Finca Vig¨ªa al Gobierno cubano para que se convirtiera en un museo donde se guardaran sus pertenencias. Seg¨²n Phillips, "a pesar de la situaci¨®n pol¨ªtica tan dif¨ªcil que existe" entre ambos pa¨ªses, la colaboraci¨®n entre el Museo Hemingway y la fundaci¨®n norteamericana se ha dado y han podido realizarse diversos proyectos conjuntos. "Pero todo lo que podamos hacer est¨¢ limitado de alguna forma por el embargo", indic¨®, tras lamentar que a varios acad¨¦micos estadounidenses no les haya sido posible llegar a tiempo para participar en el seminario.
Con ayuda del congresista dem¨®crata James McGovern, quien en la d¨¦cada pasada viaj¨® a la isla en varias ocasiones, la Fundaci¨®n Finca Vig¨ªa estableci¨® un acuerdo para restaurar y digitalizar los documentos de Hemingway que estaban en su residencia. En total, aproximadamente unas 3.000 cartas, manuscritos, adem¨¢s de documentos como el pasaporte con que el escritor trabaj¨® en Espa?a durante la Guerra Civil o el cuaderno de bit¨¢cora del yate Pilar.
En 2009 fueron entregadas a la biblioteca John F. Kennedy de Boston las copias digitalizadas de buena parte de estos documentos. Ahora, explic¨® Phillips, la fundaci¨®n quiere seguir colaborando en nuevos proyectos, como el estudio de la biblioteca que el Premio Nobel pose¨ªa en Finca Vig¨ªa, m¨¢s de 9.000 vol¨²menes y revistas, de los cuales un 20% contienen anotaciones manuscritas del escritor, seg¨²n los conservadores del museo.
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