Tras los pasos de Hemingway
A 50 a?os de la muerte del escritor, su presencia vuelve a brillar en Espa?a, el pa¨ªs del que se enamor¨® desde su primera visita en 1923
John Hemingway, nieto del Premio Nobel de Literatura, y Valerie Hemingway, secretaria personal y posteriormente nuera del genial escritor, reviven estos d¨ªas las andanzas del autor de El viejo y el Mar en "el ¨²ltimo gran pa¨ªs". Hemingway qued¨® prendado del ambiente festivo de Espa?a; de los encierros, las corridas, el vino, la comida, el calor de la gente, la alegr¨ªa, el bullicio y la m¨²sica. Medio siglo despu¨¦s, John y Valerie van a seguir durante cuatro d¨ªas en La Rioja los pasos de su c¨¦lebre antepasado visitando bodegas, disfrutando de la gastronom¨ªa y asistiendo a los toros en el coso de Logro?o, donde el escritor fue testigo en septiembre de 1956 del triunfo de su adorado diestro Antonio Ord¨®?ez. En aquella ocasi¨®n, el escritor y el torero aprovecharon el tiempo libre para disfrutar de una pasi¨®n com¨²n: el vino de Rioja. Y lo hicieron en los calados centenarios de Bodegas Paternina, en las localidades riojanas de Haro y Ollauri.
La visita fue documentada en unas instant¨¢neas que nos muestran a un Hemingway reconciliado con la vida. Ser¨ªa una de las ¨²ltimas estancias del escritor en nuestro pa¨ªs y su primera parada fue Logro?o, donde el diestro participaba en una feria celebrada con motivo de las Fiestas de San Mateo.Durante aquellos d¨ªas, Hemingway y Ord¨®?ez compartieron en La Rioja unos d¨ªas inolvidables de vino, toros y fiesta.
Para conmemorar aquellos momentos, Bodegas Paternina ha organizado la exposici¨®n Tinta, Sangre y Vino, donde se muestran im¨¢genes in¨¦ditas que nos acercan al Hemingway bebedor, vividor, aficionado a los toros y apasionado por Espa?a que se codeaba con Lauren Bacall, P¨ªo Baroja o Fidel Castro; un creador genial atra¨ªdo por las emociones fuertes, las situaciones l¨ªmite y la muerte cuya biograf¨ªa se convirti¨® en la inspiraci¨®n de su obra. El escritor se labr¨® una leyenda ¨¦pica que le convirti¨® en una de las celebridades m¨¢s retratadas de su tiempo.
Valerie y John inauguraron ayer esta muestra que se puede visitar en la bodega Conde de los Andes, en Ollauri, conocida como la Capilla Sixtina del vino de Rioja por los tesoros que esconden sus calados del siglo XVI. Una de las im¨¢genes m¨¢s llamativas de la exposici¨®n recoge el momento en el que Hemingway y Ord¨®?ez brindan por la vida tras las rejas de la puerta de uno de estos calados. En su visita a la bodega ayer, John y Valerie revivieron aquella instant¨¢nea posando de una forma muy similar. John -que ten¨ªa once meses cuando el escritor se dispar¨® un tiro de escopeta en la cabeza- defini¨® a su abuelo como "profundamente espa?ol. Se sent¨ªa espa?ol y ten¨ªa una dependencia f¨ªsica de este pa¨ªs que sufr¨ªa cuando estaba fuera".
Valerie record¨® c¨®mo conoci¨® al escritor en Madrid durante las fiestas de San Isidro de 1959. Ella le hizo una entrevista y termin¨® formando parte de la cuadrilla con la que Hemingway se mov¨ªa por Espa?a. Fue su secretaria hasta su fallecimiento. A?os despu¨¦s, Valerie se cas¨® con un hijo del escritor, Gregory, padre de John. La nuera del Premio Nobel asegur¨® que "el vino de Rioja, y en concreto el de Paternina, era el que m¨¢s le gustaba del mundo".
El nieto y la nuera del norteamericano llegaron el pasado mi¨¦rcoles a Espa?a y hasta el pr¨®ximo domingo beber¨¢n los vinos que degust¨® el escritor, visitar¨¢n los mismos pueblos, degustar¨¢n la misma gastronom¨ªa y asistir¨¢n a una corrida en Logro?o, que desde el s¨¢bado celebra las Fiestas de la Vendimia. Sobre los toros, el nieto del escritor se confiesa igual de aficionado que su abuelo: "Son una forma de arte donde la muerte est¨¢ presente".
Hemingway aliment¨® su pasi¨®n por Espa?a durante toda su vida. El escritor regres¨® a este pa¨ªs de forma casi interrumpida hasta 1931. Despu¨¦s volver¨ªa en cuatro ocasiones durante el transcurso de la Guerra Civil, cuando recuper¨® su oficio de corresponsal b¨¦lico. Aunque el escritor siempre rehus¨® el compromiso pol¨ªtico y ten¨ªa amigos en los dos bandos de la contienda espa?ola, apoy¨® decididamente a la Rep¨²blica convencido de que el triunfo del fascismo en Espa?a prender¨ªa la mecha en toda Europa. Hemingway no volver¨ªa a Espa?a hasta 1953, cuando retom¨® su pasi¨®n taurina. Despu¨¦s, regresar¨ªa en 1954, 1956, 1959 y 1960, consagrado ya al toreo de Antonio Ord¨®?ez y a la preparaci¨®n de Un verano peligroso (1960).
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