El Gobierno renuncia a aplicar uno de los pilares de la reforma laboral
El Ministerio de Trabajo abandona la idea de crear un fondo para financiar despidos ante la d¨¦bil situaci¨®n de la econom¨ªa
La financiaci¨®n del despido, una de las claves de la reforma laboral, se ha convertido ya en papel mojado. El Gobierno renuncia a regular el fondo de capitalizaci¨®n, un elemento medular en la norma aprobada hace ahora un a?o para saciar las ansias reformistas de los mercados, aunque sin excesiva convicci¨®n por parte de los agentes implicados. El motivo es que la cuadratura del c¨ªrculo comprometida en el texto legal se ha revelado imposible: articular una mochila de protecci¨®n para cada trabajador pero sin elevar las cotizaciones empresariales. "Ahora mismo no se dan las condiciones para crear ese fondo", admiten fuentes del Ejecutivo.
M¨¢s all¨¢ de los detalles, la revisi¨®n de la reforma laboral un a?o despu¨¦s de aprobarse confirma la debilidad de este proyecto, que naci¨® por imposici¨®n del Gobierno tras el desacuerdo entre patronal y sindicatos, y que a¨²n no ha arrojado resultados esperanzadores.
El paso atr¨¢s supone reconocer un fracaso en los cambios planteados
El llamado modelo austriaco fue una de las propuestas estrella del ministro
Un informe de seis expertos ha precipitado la renuncia
La alternativa ser¨¢ prolongar la financiaci¨®n que proviene del Fogasa
El abandono del llamado modelo austriaco, que sustituye la indemnizaci¨®n al abandonar la empresa por el cobro de una cantidad acumulada en un fondo espec¨ªfico, no es la ¨²nica enmienda que planea el Gobierno a la ley. Trabajo proyecta otras modificaciones para intentar in extremis animar la contrataci¨®n fija, el gran objetivo del proyecto laboral del Ejecutivo, que sin embargo se ha visto frustrado al caer la indefinida un 5% en el ¨²ltimo a?o mientras la temporal crece el 10%.
A la vista del desplome que ha sufrido el contrato estrella de la reforma, el estable con despido m¨¢s barato (33 d¨ªas por a?o trabajado, frente a los 45 ordinarios), el Ministerio de Trabajo quiere recuperar el incentivo que lo potenci¨® hasta diciembre del a?o pasado: la posibilidad de convertir cualquier temporal en un indefinido de 33 d¨ªas. Desde que desapareci¨® el se?uelo, esa f¨®rmula se ha desplomado.
Los responsables del ministerio comunicar¨¢n sus intenciones a los agentes sociales la pr¨®xima semana. M¨¢s all¨¢ de las cr¨ªticas que suscite la renuncia a una de las propuestas m¨¢s defendidas por el ministro, Valeriano G¨®mez, lo m¨¢s probable es que ni sindicatos ni empresarios lamenten la desaparici¨®n a corto plazo del modelo austriaco: los primeros tem¨ªan un nuevo abaratamiento del despido -o una descausalizaci¨®n-, mientras los segundos se barruntaban un aumento de las cotizaciones sociales para financiarlo.La alternativa elegida por Trabajo agradar¨¢ a los empresarios y, como m¨ªnimo, ser¨¢ tolerada por las centrales sindicales. Se trata de dar car¨¢cter permanente a la soluci¨®n transitoria que consagr¨® hace un a?o la reforma laboral, hasta que el fondo austriaco estuviera constituido: que el Fondo de Garant¨ªa Salarial (Fogasa), nutrido con aportaciones empresariales, financie una parte de los despidos procedentes para aliviar a las compa?¨ªas en dificultad.
S¨ª disgustar¨¢n a UGT y a Comisiones Obreras los cambios que Trabajo quiere incluir en este mecanismo temporal para convertirlo en estable. Hasta ahora, el Fogasa solo financiaba despidos procedentes por motivos econ¨®micos (es decir, los que fijan una indemnizaci¨®n de 20 d¨ªas por a?o, de los cuales el fondo p¨²blico financiaba ocho). En adelante, ese instrumento se har¨¢ cargo de todos los despidos econ¨®micos, tambi¨¦n improcedentes. Los sindicatos siempre han objetado que se financien procedimientos que deniegan la raz¨®n al patrono a trav¨¦s de fondos p¨²blicos (engrosados con aportaciones empresariales, pero p¨²blicos al fin y al cabo).
No habr¨¢ dinero p¨²blico, en ning¨²n caso, para despidos disciplinarios improcedentes, la f¨®rmula m¨¢s frecuente cuando las empresas quieren prescindir del empleado ahorr¨¢ndose el tr¨¢mite judicial. En ese caso las compa?¨ªas tendr¨¢n que seguir haciendo frente a los costes, aseguran las mismas fuentes gubernamentales.
Esa ampliaci¨®n de competencias no supondr¨¢ un incremento de las cuotas sociales que ya abonan los empresarios al Fogasa. Con el 0,25% de la base de cotizaci¨®n que aportan las sociedades se financiar¨¢n de forma generalizada todos los despidos, salvo los disciplinarios.
La decisi¨®n de Trabajo de abandonar uno de sus proyectos estrella se ha visto precipitada por el informe de expertos emitido hace casi 15 d¨ªas. Los seis especialistas a los que el ministerio hab¨ªa encargado evaluar la viabilidad del modelo austriaco respondieron con rotundidad a esa petici¨®n. El grupo, representativo de posiciones muy diversas, desde las m¨¢s cercanas a los sindicatos hasta las procedentes de la propia CEOE, concluy¨® que implantar ahora un fondo espec¨ªfico para despidos requerir¨ªa recaudar 7.500 millones de euros anuales, equivalentes a tres puntos de cotizaciones empresariales. Reclamar esas cantidades en el actual contexto de aton¨ªa econ¨®mica se antoja dif¨ªcil.
Con esa base, los expertos cre¨ªan inviable la implantaci¨®n en Espa?a del modelo austriaco y ofrec¨ªan como alternativa prolongar la financiaci¨®n ahora existente, proveniente del Fogasa. Es justo la soluci¨®n que se ha adoptado. "Sin renunciar a que en el futuro pueda implantarse el modelo austriaco, si se dan las condiciones, ahora nos inclinamos por convertir en estable lo establecido como transitorio en la reforma laboral", aseguran las fuentes gubernamentales consultadas.
El Ejecutivo estudia dos v¨ªas para aprobar la soluci¨®n acordada. O un decreto ley que incluya las dos tachas a la reforma (la renuncia a aplicar el fondo de capitalizaci¨®n y la prolongaci¨®n del incentivo que permite convertir a un contrato de 33 d¨ªas cualquier f¨®rmula temporal) o sendas enmiendas a cualquier norma laboral o social que est¨¦ ahora en fase de tramitaci¨®n parlamentaria (la reforma de pol¨ªticas activas de empleo, la de pensiones o la de negociaci¨®n colectiva).
Las claves de un modelo fallido
- Austria puso en marcha en 2003 una f¨®rmula para financiar despidos a trav¨¦s de un fondo com¨²n que evita que las empresas hagan frente a cada salida de sus trabajadores.
- Cotizaci¨®n modesta. El fondo se nutre de un 1,53% del salario bruto anual de cada trabajador. Con la cuant¨ªa del sueldo medio en Espa?a (1.800 euros mensuales brutos, seg¨²n el INE), resultaba complejo detraer esa cantidad de la retribuci¨®n del trabajador sin elevar la presi¨®n sobre las cotizaciones empresariales.
- Dotaci¨®n permanente. El fondo de capitalizaci¨®n financia despidos sin que los empresarios lo noten en su cuenta de resultados. Se constituye como una mochila que acompa?a al trabajador en su vida laboral. Si no es despedido, puede trasladarlo, invertirlo en formaci¨®n o rescatarlo como un fondo de pensiones.
- Ventajas del modelo. Car¨¢cter predecible para el empresario y funci¨®n como plan de pensiones para el trabajador que nunca es despedido o para aquel que quiere cambiar de empresa pero teme perder su antig¨¹edad.
- Desventajas. El fondo obliga a pagar el despido a las empresas que recurren a esa v¨ªa y a las que no y descausaliza la decisi¨®n de prescindir del empleado (si la empresa abona el dinero, no tiene que justificar por qu¨¦ lo hace)
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