El valor de la igualdad

Ante la pol¨¦mica suscitada por la anulaci¨®n de la reuni¨®n del Jurado del Premio Nacional de Cinematograf¨ªa quisiera expresar, como cineasta e integrante de este jurado en representaci¨®n de CIMA (Asociaci¨®n de Mujeres Cineastas y de los Medios Audiovisuales), mi opini¨®n sobre lo ocurrido.

En primer lugar, debo expresar mi total acuerdo con la decisi¨®n del Director General del Instituto de Cinematograf¨ªa y las Artes Audiovisuales (ICAA) que, en cumplimiento de la ley, decide anular la reuni¨®n y volver a convocar con un jurado que tenga una representaci¨®n equilibrada de los dos sexos.

Lo ¨²nico que se le puede achacar al ministerio es su lentitud en darse cuenta de la situaci¨®n: los integrantes del jurado ¨¦ramos nueve hombres y tres mujeres.

?Por qu¨¦ se llega a esta situaci¨®n? Veamos: el ministerio convoca a seis asociaciones del sector y a la Academia de Cine. Son estos organismos los que deben nombrar a una o un representante. El ministerio solo nombra directamente a tres profesionales de prestigio -que en este caso eran dos mujeres y un hombre-. Resultado: cuatro de las asociaciones y la Academia env¨ªan a un hombre para que los represente. Solo CIMA -l¨®gicamente- env¨ªa a una mujer. A estos cuatro hombres hay que sumar el director general de Cine y el subdirector, tambi¨¦n hombres: nueve a tres.

Debo se?alar que, aunque hace una semana que se conocen todos lo nombres, nadie protest¨®. ?Por qu¨¦? Porque estamos tan acostumbrados a la infrarrepresentaci¨®n de las mujeres que no nos escandaliza, lo aceptamos como algo "natural". Y sin embargo...

?C¨®mo va a ser natural que, de los siete organismos convocados, solo CIMA env¨ªe a una mujer? En la profesi¨®n del cine hay muy pocas mujeres en los puestos directivos (directoras, guionistas y productoras) pero, afortunadamente, hay much¨ªsimas mujeres en todas las dem¨¢s situaciones profesionales. Es m¨¢s, hay bastantes mujeres en las juntas directivas de todas las organizaciones convocadas y, desde luego, en la Academia que, adem¨¢s, tiene dos mujeres en las vicepresidencias.

Si embargo, cuando se trata de elegir a quien nos represente ante las instituciones en una tarea tan importante como decidir el Premio Nacional se sigue enviando a un hombre. ?Por qu¨¦ ser¨¢? Y, sobre todo, ?no influir¨¢ este factor en el hecho de que se premie una y otra vez a los varones, olvidando la imprescindible obra de las mujeres de la cultura?

Afortunadamente, para cambiar las malas costumbres que a¨²n perviven, existe en Espa?a una legislaci¨®n que considera imprescindible que las mujeres tengamos voz y voto en las instituciones. Porque somos parte activa y fundamental de esta sociedad y de sus actividades profesionales.

Lo escandaloso no es que se anule una reuni¨®n del jurado del Premio Nacional de Cinematograf¨ªa, lo escandaloso habr¨ªa sido que, como antes ocurr¨ªa, apenas hubiese voces y votos femeninos. Un jurado compuesto en una mayor¨ªa aplastante por personas del sexo masculino es menos plural, menos diverso y menos democr¨¢tico. ?O todav¨ªa hay alguien que lo duda?

In¨¦s Par¨ªs es presidenta de la Asociaci¨®n de Mujeres Cineastas y de los Medios Audiovisuales (CIMA).