Humala jura la presidencia de Per¨² con una bater¨ªa de medidas sociales

Ollanta Humala, comandante retirado del Ej¨¦rcito, asumi¨® la presidencia de Per¨² anunciando una bater¨ªa de programas de asistencia social orientados a combatir la pobreza y la desigualdad, la principal bandera de la campa?a que lo llev¨® a la presidencia tras una ajustada segunda vuelta contra Keiko Fujimori.

El flamante presidente de 49 a?os inici¨® luego un discurso de 50 minutos, interrumpido cada tanto por aplausos y abucheos. Su apuesta consiste en extender el alcance del Estado, sobre todo en las localidades m¨¢s pobres del pa¨ªs. "El Estado se niega a subir a los Andes, a internarse en la Amazonia. Necesitamos m¨¢s Estado", se?al¨®, y a?adi¨®: "La realidad nos exige un nuevo contrato social que haga posible la convivencia de los peruanos".

El mandatario irrit¨® al fujimorismo al usar la Constituci¨®n de 1979, ya derogada

Sin embargo, y aunque asegur¨® que no busca la confrontaci¨®n, sus primeras palabras dieron la impresi¨®n contraria. Al jurar por "el esp¨ªritu, los principios y los valores de la Constituci¨®n de 1979", derogada y reemplazada por el r¨¦gimen de Alberto Fujimori en 1993, el nuevo mandatario estableci¨® una confrontaci¨®n directa con la numerosa bancada fujimorista del Congreso, que no par¨® de protestar, incluso a gritos, a lo largo del resto de la ceremonia, a la que acudieron como invitados la gran mayor¨ªa de mandatarios sudamericanos.

Pese a que posteriormente no hizo ninguna menci¨®n a la posibilidad de una reforma constitucional, la referencia ha sido considerada por varios analistas como una provocaci¨®n que pretende situar al fujimorismo, segunda fuerza pol¨ªtica en el Parlamento, como su gran antagonista para los pr¨®ximos cinco a?os. Tras la ceremonia, algunos portavoces del fujimorismo llegaron a calificar de ileg¨ªtimo el juramento del nuevo presidente.

Lejos de un discurso ret¨®rico, Humala anunci¨® una serie de medidas concretas, aunque sin dar detalles de c¨®mo las pondr¨¢ en marcha. Insisti¨® en su intenci¨®n de darle al Estado un papel m¨¢s protag¨®nico como agente y promotor, a trav¨¦s de lo que defini¨® como "una econom¨ªa nacional de mercado abierta". Se?al¨® que se impulsar¨¢n las inversiones en infraestructura, especialmente en carreteras y proyectos ferroviarios, y promover¨¢ la creaci¨®n de una marina mercante y una l¨ªnea a¨¦rea nacionales. Tambi¨¦n asegur¨® que respetar¨¢ los contratos firmados por el Estado, pero renegociar¨¢ con las empresas mineras para que sus ganancias extraordinarias lleguen a todos los peruanos.

El mayor ¨¦nfasis estuvo puesto en los programas de asistencia social. Humala anunci¨® algunas medidas concretas, como el aumento del salario m¨ªnimo en dos etapas, hasta establecerlo en 750 soles mensuales (cerca de 200 euros) y reafirm¨® la aplicaci¨®n de los planes de asistencia social que formaron el n¨²cleo de su oferta electoral, como la pensi¨®n para los adultos mayores en situaci¨®n de pobreza (llamado Pensi¨®n 65), el programa de cunas infantiles (Cuna M¨¢s), alimentaci¨®n gratuita en los colegios estatales y un programa de becas para los estudiantes de bajos ingresos. Todos estos planes se aplicar¨¢n de manera progresiva en los 800 distritos m¨¢s pobres del pa¨ªs. "Todo cambio, para ser sostenible, debe ser gradual y racional", enfatiz¨®.

Para llevar a cabo sus anunciadas pol¨ªticas sociales, Humala anunci¨® la creaci¨®n de un nuevo Ministerio de Desarrollo e Inclusi¨®n Social, as¨ª como un Consejo Econ¨®mico y Social, integrado por representantes del empresariado, los trabajadores y la sociedad civil. Asegur¨® que Per¨² ha votado "por el crecimiento con inclusi¨®n" y se comprometi¨® a mantener el equilibrio fiscal que ha caracterizado al pa¨ªs en la pasada d¨¦cada y que le ha permitido crecer a un ritmo de hasta el 9% anual.

Respecto a la pol¨ªtica exterior, insisti¨® en que honrar¨¢ los acuerdos comerciales firmados "con pa¨ªses y bloques amigos", y que su apostar¨¢ por la integraci¨®n regional, con la Comunidad Andina de Naciones y Unasur como instrumentos principales. Por la tarde, los mandatarios sudamericanos (estuvieron todos, menos Hugo Ch¨¢vez y Fernando Lugo, por motivos salud) celebraron el primer encuentro con el nuevo presidente peruano.