Los ingresos tributarios se estancan hasta julio por la debilidad econ¨®mica

La recaudaci¨®n de impuestos es uno de los term¨®metros m¨¢s ajustados del tono de la actividad econ¨®mica. Y lo que confirman las cuentas p¨²blicas de julio es que, como ya hab¨ªa anticipado la contabilidad nacional, la recuperaci¨®n de la econom¨ªa espa?ola ha entrado en territorio hostil. Con los datos de ejecuci¨®n presupuestaria de julio, reci¨¦n publicados por el Ministerio de Econom¨ªa, los ingresos tributarios apenas crecen ya un 1% en los siete primeros meses del a?o. Aun as¨ª, el d¨¦ficit de la Administraci¨®n central sigue bajo control: el recorte del gasto p¨²blico permite incluso una ligera mejora hasta situarlo en el 2,1% del PIB.

En la nota difundida junto a los datos presupuestarios, Econom¨ªa admite que hay una "ralentizaci¨®n temporal" de los ingresos tributarios. Aduce que en 2011 las devoluciones se est¨¢n haciendo con mayor celeridad y que hay retenciones de capital (1.370 millones) por el vencimiento de deuda p¨²blica que se har¨¢n en agosto y que el a?o pasado se hicieron en julio. Pero incluso si se tienen en cuenta "los diferentes ritmos de devoluciones o calendarios de ingresos", como hace Econom¨ªa, el crecimiento de la recaudaci¨®n tributaria habr¨ªa sido del 2,8%. Y lo que estaba previsto en el Presupuesto de 2011 para el conjunto del a?o es un aumento del 6,2%.

Los recursos apenas crecen el 1% cuando la previsi¨®n para el a?o es el 6%

En el Gobierno "no hay preocupaci¨®n por los ingresos", asegur¨® Salgado

Lo m¨¢s significativo en las cuentas de julio es el frenazo de la recaudaci¨®n del IVA. Es, por otra parte, una desaceleraci¨®n anunciada. El IVA hab¨ªa acumulado incrementos anuales muy significativos gracias al aumento del tipo impositivo (del 16% al 18%) que decidi¨® el Gobierno en julio pasado. Pero ese efecto empezar¨¢ a diluirse en la comparaci¨®n anual a partir de ahora. Los datos de ejecuci¨®n presupuestaria recogen las ventas hasta junio: en el mismo mes de 2010, el tipo general del IVA era a¨²n del 16%, pero el anticipo de compras para evitar la inminente subida del impuesto ya supuso un impulso a la recaudaci¨®n. Ahora, entre enero y junio, los ingresos por IVA aumentan un 3,8% (7,1% si se descuenta que ha habido m¨¢s devoluciones), cuando hace un par de meses el incremento anual superaba con amplitud el 10%.

Al frenazo en el IVA se suma el mal comportamiento de los impuestos especiales, de modo que los tributos indirectos apenas suman un 2% m¨¢s que el a?o pasado. Lo m¨¢s llamativo es el retroceso en la recaudaci¨®n del impuesto sobre hidrocarburos (-6,3%), que refleja el par¨®n en la demanda de combustibles tras la escalada del precio de los carburantes (casi un 4% en lo que va de a?o).

Peor es a¨²n el resultado de la recaudaci¨®n de impuestos directos, que aportan un 0,2% menos que el a?o pasado. El IRPF, que se hab¨ªa recuperado tras la eliminaci¨®n de la devoluci¨®n anticipada por nacimiento y cierta mejora en los ingresos, pierde fuerza con un incremento anual del 5,2%, cuando en junio la comparaci¨®n arrojaba un aumento del 6,5%.

Pero lo m¨¢s sorprendente vuelve a ser el comportamiento del impuesto de sociedades, cuya recaudaci¨®n pega otro bajonazo: se ingres¨® un 24% menos que el a?o pasado, debido sobre todo a la disminuci¨®n de los ingresos declarados por los grupos consolidados, los que tienen m¨¢s opciones de usar al l¨ªmite el generoso r¨¦gimen de deducciones y amortizaciones de este impuesto.

El Gobierno aprob¨® el pasado viernes varias medidas para paliar la merma de ingresos en este impuesto, que contrasta con el comportamiento mucho m¨¢s favorable de los beneficios empresariales -las ganancias de las firmas del Ibex solo han ca¨ªdo un 6% en los seis primeros meses del a?o-. B¨¢sicamente consisten en un aumento del pago adelantado para las grandes empresas y en l¨ªmites para usar los resultados negativos de periodos anteriores para reducir la base imponible. La pretensi¨®n de Econom¨ªa es concentrar en este a?o unos 2.500 millones adicionales en la recaudaci¨®n del impuesto de sociedades que, con la normativa anterior, se habr¨ªan ingresado en ejercicios venideros.

Cuando la vicepresidenta econ¨®mica, Elena Salgado, anunci¨® esta medida, insisti¨® en que no se aprobaba por una supuesta desviaci¨®n en el objetivo de ingresos del Ejecutivo. "Desde el punto de vista del Gobierno no hay ninguna preocupaci¨®n por los ingresos, aunque tener un margen adicional proporciona seguridad y confianza", asegur¨® tras el Consejo de Ministros.

Hasta ahora, lo m¨¢s preocupante es la evoluci¨®n de las cuentas auton¨®micas, con varias comunidades que hab¨ªan agotado ya en el primer trimestre casi todo el d¨¦ficit previsto para este a?o (1,3% del PIB). Y el "margen adicional" al que hizo referencia Salgado se interpret¨® como un colch¨®n ante el m¨¢s que previsible incumplimiento de varias comunidades.

Aunque el desfallecimiento de los ingresos genera ahora alguna duda, el objetivo de d¨¦ficit marcado para la Administraci¨®n central (4,8%) sigue al alcance de la mano. Porque lo que s¨ª se ajusta a lo previsto es la evoluci¨®n del gasto, que es lo que ha permitido mantener bajo control el desequilibrio presupuestario. El recorte (23%) se aceler¨® en julio.