Los presos de ETA suscriben un acuerdo que pide el fin de la banda
El colectivo de reclusos se suma al pacto de Gernika, que apuesta por la desaparici¨®n de la violencia - Los internos exigen una amnist¨ªa
Los presos de ETA han suscrito de forma mayoritaria el llamado Acuerdo de Gernika, en el que se aboga por las v¨ªas exclusivamente pol¨ªticas y por "un definitivo abandono de su actividad armada" a cambio de contrapartidas -como una amnist¨ªa total- consideradas inasumibles por el Gobierno. El llamado Colectivo de Presos y Presas Pol¨ªticos Vascos (EPPK), que engloba a los 732 reclusos de ETA, hizo p¨²blico ayer un comunicado en el que muestra su "compromiso firme de empujar para avanzar en el proceso democr¨¢tico, dentro del Acuerdo de Gernika y seg¨²n sus contenidos". Dicho acuerdo fue introducido en las c¨¢rceles por la izquierda abertzale que apuesta por las v¨ªas pac¨ªficas para su debate entre los presos y para intentar que los reclusos presionaran a ETA para que anunciara su final.
Un 10% de los presos rechaza el acuerdo que ahora apoya el EPPK
El EPPK subraya que el Acuerdo de Gernika ofrece "una soluci¨®n integral definitiva" al conflicto "pol¨ªtico y violento" que supone la existencia de ETA. Pero el comunicado destila el lenguaje combativo de siempre de la banda, con la reivindicaci¨®n de una amnist¨ªa, del derecho a decidir, la denuncia de la pol¨ªtica penitenciaria y con severas admoniciones al inmovilismo del Gobierno. De pedir el final de ETA no dice ni palabra, pese a lo cual, todas las fuentes antiterroristas consideran el comunicado "muy importante".
Los presos etarras no abjuran de "su lucha de siempre", "la lucha a favor de la soberan¨ªa de nuestro pueblo", dicen. Adem¨¢s, emplazan a los Gobiernos de Espa?a y Francia a tomar decisiones y a que apliquen "inmediatamente y sin contrapartidas de ning¨²n tipo los derechos que nos corresponden". Esos derechos de los que hablan est¨¢n contenidos en los puntos del Acuerdo de Gernika que afectan a los presos: la concesi¨®n de amplios beneficios penitenciarios como primer paso hacia una amnist¨ªa y como un pelda?o hacia un proceso de negociaci¨®n entre el Gobierno y ETA. Y eso es inasumible por el Estado, seg¨²n fuentes gubernamentales.
Gernika reclama que los presos puedan obtener los beneficios penitenciarios "legalmente establecidos". Ello supone que deben cumplir la legalidad, algo que hasta ahora ETA les ha vetado. Aquellos que han optado por soluciones individuales para obtener esos beneficios han sido expulsados de la banda. Y el EPPK, en su nota, se mantiene en la ortodoxia: "No aceptamos la pol¨ªtica de salidas y beneficios personales que nos ofrecen los sistemas carcelarios de Espa?a y Francia".
Pese a todo, el EPPK muestra su disposici¨®n a participar "hasta el final" en el proceso que se marca en los puntos del documento de Gernika, es decir, en la b¨²squeda de un escenario de paz y soluciones democr¨¢ticas mediante "el uso de medios exclusivamente democr¨¢ticos y pac¨ªficos para resolver las cuestiones pol¨ªticas".
Las fuentes gubernamentales consultadas ven esta declaraci¨®n de los presos como "un paso", aunque ven que el mundo que gira alrededor de ETA lo va a vender como "el paso", es decir, como un movimiento que pone la pelota en el lado del Gobierno para que adopte medidas como el traslado de los presos etarras al Pa¨ªs Vasco, la libertad de los presos pendientes de juicio...
La decisi¨®n de los presos ha llegado tras un largo proceso de debate, impulsado por la izquierda abertzale. Esta pretend¨ªa sumar fuerzas a sus tesis de utilizaci¨®n de v¨ªas exclusivamente pol¨ªticas para ganar el pulso que actualmente se mantiene en ese mundo entre los que optan por las v¨ªas exclusivamente pol¨ªticas -aunque de momento sin abominar de su historia- y los que pretenden la combinaci¨®n de bombas y votos. El EPPK lo suscribe, entre otros motivos, porque supone "el reconocimiento de la interlocuci¨®n de EPPK", ahora algo abandonado por ETA.
El acuerdo ha sido suscrito por los presos de forma mayoritaria, aunque un 10% (entre 70 y 80 presos, supuestamente los m¨¢s duros) se han mostrado cr¨ªticos o directamente no lo han firmado.
El comunicado del EPPK era esperado para el domingo, pero la difusi¨®n de otro por parte de colectivo de Presos comprometidos con el irreversible proceso de paz -excluidos del EPPK- precipit¨® su difusi¨®n. Estos tambi¨¦n apoyaban el cumplimiento ¨ªntegro del acuerdo, incluyendo el que se abordase sin m¨¢s dilaciones "el reconocimiento y la reparaci¨®n de las v¨ªctimas y la reconciliaci¨®n social".
Las claves del Acuerdo de Gernika
- La declaraci¨®n de ETA de un alto el fuego permanente, unilateral y verificable por la comunidad internacional como expresi¨®n de voluntad para un definitivo abandono de su actividad armada.
- El cese de la pol¨ªtica penitenciaria que se sigue contra los presos/as pol¨ªticos vascos, planteada hasta ahora como parte de estrategias de confrontaci¨®n y la adopci¨®n de las siguientes medidas como primer paso del camino hacia la amnist¨ªa, que conduzca a la ausencia total de presos/as y exiliados/as como consecuencia del conflicto pol¨ªtico:
-Traslado de los presos/as a Euskal Herria finalizando la pr¨¢ctica de la dispersi¨®n.
-Liberaci¨®n de presos/as con graves enfermedades.
-Concesi¨®n de libertades provisionales a todos los presos y presas preventivos pendientes de juicio en prisi¨®n.
-Concesi¨®n de libertades condicionales a todos los presos penados que hayan cumplido los requisitos legales.
-Aplicaci¨®n sin restricciones ni arbitrariedades de todos los beneficios penitenciarios legalmente establecidos.
-Derogaci¨®n de la legislaci¨®n que impone 40 a?os de condena.
- La revisi¨®n de los procesos judiciales contra personas y estructuras organizativas derivados de su actividad pol¨ªtica.
- El levantamiento de las medidas restrictivas y/o prohibitivas en su actividad pol¨ªtica impuestas a militantes y organizaciones independentistas.
- Las organizaciones pol¨ªticas, sindicales y sociales demandamos a ETA y al Gobierno espa?ol la toma de decisiones e iniciativas que permitan configurar un escenario de no violencia con garant¨ªas de normalizaci¨®n pol¨ªtica progresiva.
- Asimismo, las partes firmantes consideramos que en el marco de un proceso de estas caracter¨ªsticas, donde se haya consolidado ese escenario de paz y normalizaci¨®n pol¨ªtica suficientes, ser¨¢ imprescindible activar espacios de di¨¢logo y negociaci¨®n pol¨ªtica para abordar en su integridad las causas y consecuencias del conflicto.
- El di¨¢logo y la negociaci¨®n pol¨ªtica en todos los ¨¢mbitos se regir¨¢n y sustentar¨¢n por compromisos establecidos en los llamados Principios Mitchell:
-Uso de los medios exclusivamente democr¨¢ticos y pac¨ªficos para resolver las cuestiones pol¨ªticas.
-Oposici¨®n a cualquier intento de utilizar la fuerza o amenazar con utilizarla para influir en el curso o en los resultados alcanzados en las negociaciones multipartitas.
-Compromiso de respetar los t¨¦rminos de cualquier acuerdo alcanzado en las negociaciones multipartitas, as¨ª como de recurrir solo a m¨¦todos exclusivamente democr¨¢ticos y pac¨ªficos para tratar de modificar cualquier aspecto de esos acuerdos.
- Necesidad de un reconocimiento, reconciliaci¨®n y reparaci¨®n de todas las v¨ªctimas, originadas por el conflicto pol¨ªtico y la realidad de las m¨²ltiples violencias.
- El proceso de negociaci¨®n para la obtenci¨®n de acuerdos pol¨ªticos ser¨¢ patrimonio exclusivo de los agentes pol¨ªticos, sindicales y sociales.
- Los contenidos del di¨¢logo pol¨ªtico buscar¨¢n un acuerdo incluyente entre todas las culturas pol¨ªticas del pa¨ªs, sobre el reconocimiento tanto de la realidad nacional vasca como del derecho a decidir, y el respeto a la voluntad popular democr¨¢tica sobre el modelo jur¨ªdico-institucional.
- Firmantes del acuerdo: La izquierda abertzale, EA, Aralar, AB, Alternatiba, LAB y 30 agentes pol¨ªticos, sindicales y sociales de toda Euskal Herria.
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