Fern¨¢ndez Ord¨®?ez: "La CAM es lo peor de lo peor"

Miguel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez fue ayer m¨¢s all¨¢ de lo que se espera de un gobernador del Banco de Espa?a cuando defini¨® a la Caja Mediterr¨¢neo (CAM) como "lo peor de lo peor". "Cuanto peor es una caja, vale menos, y la CAM es lo peor de lo peor", espet¨® para explicar que era posible que se perdiera la inyecci¨®n p¨²blica de 2.800 millones.

La dureza de estas palabras preocuparon en el mercado y en las oficinas de la propia entidad. Ord¨®?ez dijo que en estos casos no hab¨ªa que dejarse llevar "por las tripas", pero fue muy tajante, sobre todo teniendo en cuenta que la CAM est¨¢ en proceso de subasta y estas declaraciones no animan a posibles compradores. Quiz¨¢ por eso, a rengl¨®n seguido a?adi¨® que el Banco de Espa?a "est¨¢ administrando la entidad, por lo que los depositantes pueden estar tranquilos".

El PP pide que el gobernador asuma responsabilidades por la CAM

Se demuestra el fiasco de las fusiones regionales de origen pol¨ªtico

"Si me pregunta como persona, me parece escandaloso, pero el Banco de Espa?a lo que tiene que hacer es ajustarse a derecho en el tratamiento de todos estos temas", dijo. Es fundamental estabilizar la caja, echar a los administradores y estudiar si procede abrir expediente, con un "cuidado exquisito", incidi¨®. Dijo comprender que la gente se escandaliza con la gesti¨®n de la caja intervenida. Los administradores del Banco de Espa?a despidieron esta semana a la directora general, Mar¨ªa Dolores Amor¨®s, tras conocer que cobraba una retribuci¨®n anual de 593.040 euros, adem¨¢s de una renta anual vitalicia de 369.497 euros por ejercicio. El FROB tambi¨¦n ha desvelado que toda la c¨²pula directiva cobr¨® 15,5 millones de indemnizaci¨®n tras abandonar sus puestos.

La que fuera la cuarta mayor caja de Espa?a, con 74.000 millones en activos, ha sido un quebradero de cabeza para el supervisor. Le advirti¨® en innumerables ocasiones de los problemas que afrontaban si no mejoraba su gesti¨®n, pero no lo hizo y el supervisor esper¨® una fusi¨®n que nunca lleg¨®. Estuvo a punto de ser absorbida por Cajastur, pero la entidad asturiana se ech¨® atr¨¢s y la CAM se convirti¨® en un bumer¨¢n que se volvi¨® contra el supervisor.

"El primero que tiene que asumir responsabilidades por la crisis de la CAM es el gobernador del Banco de Espa?a. Si ha tardado tanto en enterarse... Deber¨ªa ser m¨¢s prudente y dejarse de politizaciones", afirm¨® ayer Crist¨®bal Montoro, coordinador de Pol¨ªtica Econ¨®mica del PP, informa Carlos E. Cu¨¦.

Fuentes del sector financiero coinciden en que el supervisor deb¨ªa haber actuado -no solo advertido- con antelaci¨®n para evitar que la gangrena inmobiliaria de la caja se convirtiera en un problema de una dimensi¨®n tan grande. Algunos apuntan que la tutela y protecci¨®n que ejerc¨ªa la Generalitat valenciana sobre la CAM retrajo al supervisor, que evit¨® as¨ª un enfrentamiento abierto con el PP.

Desde el Banco de Espa?a se aclara que su misi¨®n no es gestionar entidades y no se pueden meter en la administraci¨®n diaria de una caja de ahorros porque la ley no se lo permite. Tambi¨¦n comentan que anticiparse y echar a los gestores puede resultar muy caro para el erario p¨²blico por la fuga de dep¨®sitos y el p¨¢nico que produce la intervenci¨®n.

Tras la nacionalizaci¨®n de CatalunyaCaixa, Novacaixagalicia y Unnim, volvi¨® la pol¨¦mica sobre por qu¨¦ el Banco de Espa?a autoriz¨® estas fusiones regionales, guiadas por m¨¢s por la pol¨ªtica que por el sentido financiero, como ahora se ha demostrado. El resultado de esta torpeza ha sido que esas cajas han perdido pr¨¢cticamente todo su patrimonio. Incluso Valencia ha perdido la sede de las dos grandes cajas.

El secretario de Comfia CC OO, Jos¨¦ Mar¨ªa Mart¨ªnez, dijo ayer: "Este es un proceso fallido porque est¨¢ guiado por la pol¨ªtica. Estas tres fusiones no se deber¨ªan haber producido nunca. Han dado lugar a grupos que no son viables por s¨ª mismos". La acusaci¨®n de algunos ejecutivos es que el supervisor no quiso interferir contra la Generalitat de Catalunya, gobernada entonces por el PSC, ni contra la valenciana, del PP. "Ord¨®?ez y su equipo sab¨ªan que esas tres cajas suponen una concentraci¨®n de problemas; la suma de cajas malas, que nunca dan una buena", afirma un ejecutivo.