"Es el momento de cambiar el sistema"
Bill Drayton alimenta desde los 14 a?os una obsesi¨®n: transformar el mundo, mejorarlo. A esa edad cre¨® un peri¨®dico en el colegio y se dio cuenta de que incluso las peque?as ideas tienen impacto. Esta semana, con 68 a?os, ha recibido el Premio Pr¨ªncipe de Asturias de Cooperaci¨®n por una vida dedicada justamente a eso, a cambiar el mundo, a intentarlo. "Espero que el premio ayude a comunicar a la gente que puede tener un sue?o, crear un equipo, cambiar las cosas", explica con un d¨¦bil hilo de voz.
Formado en Harvard, Oxford y Yale, Drayton cumpli¨® en 1981 uno de sus sue?os, fundar Ashoka e inventar el t¨¦rmino emprendedor social. "Son personas innovadoras que crean algo por el bien com¨²n y no por el suyo propio". Ashoka los selecciona cada a?o, financia sus proyectos y ayuda a convertirlos en realidad. El espa?ol Andr¨¦s Mart¨ªnez es uno de ellos: interconect¨® decenas de cl¨ªnicas aisladas en Per¨², Colombia y Ecuador para permitir diagn¨®sticos m¨¦dicos a distancia. Anita Ahuja recicla toneladas de pl¨¢stico en Nueva Delhi (India), da empleo a cientos de desheredados y reduce la contaminaci¨®n ambiental. As¨ª hasta 3.000 emprendedores sociales en 70 pa¨ªses que, unidos a Ashoka, han mejorado la vida de millones de personas. "Todos podemos impulsar el cambio", resume Drayton.
"Con Internet peligra la privacidad por la que hemos luchado d¨¦cadas"
"Las ideas surgen al pasar del sistema de reglas y ¨®rdenes al de ¨¦tica y empat¨ªa"
"El emprendimiento social crea empleo 2,5 veces m¨¢s r¨¢pido que la OCDE"
"La mitad de los proyectos de Ashoka han logrado cambiar pol¨ªticas oficiales"
Pregunta. ?Es el emprendimiento parte de la soluci¨®n para volver al crecimiento econ¨®mico y al empleo?
Respuesta. Por supuesto, los emprendedores sociales est¨¢n creando empleo a una velocidad 2,5 veces mayor que las econom¨ªas de la OCDE. Emprender consiste en reconocer las grandes tendencias e innovar. Pero tambi¨¦n es necesario un sector p¨²blico inteligente, adelantado al cambio, y eso no est¨¢ ocurriendo. Es imposible gestionar el sistema financiero global con leyes de 1930 supervisadas por funcionarios. Tenemos que ayudar al sector p¨²blico a dejar de ser el ¨²ltimo en todo, y eso supone una gran oportunidad.
P. En Espa?a solo un 0,5% de la poblaci¨®n activa son emprendedores sociales. En EE UU o Reino Unido son apenas un 2%. ?Por qu¨¦ tan pocos?
R. No se trata de medir n¨²meros, sino impacto. En Brasil hab¨ªa 5.000 asociaciones ciudadanas en 1980, hoy son m¨¢s de un mill¨®n. Eso significa que hay gente transformando el sistema por completo, solucionando un problema medioambiental, mejorando la educaci¨®n... M¨¢s de la mitad de los emprendedores de Ashoka han logrado cambiar las pol¨ªticas gubernamentales de su pa¨ªs en cinco a?os. Eso es impacto.
P. Vivimos momentos de enorme insatisfacci¨®n social, con protestas por todo el mundo contra el sistema establecido. ?Se hunde el modelo econ¨®mico actual?
R. No solo es el capitalismo, el sistema que conocemos desde la revoluci¨®n agr¨ªcola se derrumba. Las compa?¨ªas se han organizado hist¨®ricamente en torno a funciones repetitivas y eso ya no vale. Es necesario promover el cambio, organizarse en equipos muy fluidos donde todos puedan contribuir, en lugar de crear jerarqu¨ªas, reglas y ¨®rdenes.
P. ?Cree que la avaricia y el individualismo est¨¢n en el centro de esta crisis?
R. Existe una extra?a idea de que el individualismo es algo separado de la sociedad, pero no lo es. Cualquier buen directivo sabe que la descentralizaci¨®n sin integraci¨®n es imposible. La anarqu¨ªa lleva a la tiran¨ªa. Es justo en ese punto intermedio donde surgen buenas ideas, cuando pasas de un sistema basado en reglas y ¨®rdenes a otro basado en empat¨ªa y ¨¦tica.
P. Es decir, que directivos y empresas necesitan un enfoque mucho m¨¢s social.
R. S¨ª, hist¨®ricamente las compa?¨ªas privadas han ido por una parte, y las iniciativas sociales, por otra; ambas cubriendo la misma necesidad, pero cada una por su lado. Ahora, ambos sectores son emprendedores y competitivos, es posible juntar ambas l¨ªneas y crear un sistema h¨ªbrido. Procter & Gamble ha demostrado que el negocio y lo social pueden funcionar juntos para transformar el sector sanitario, llevando agua potable a lugares en desarrollo por cinco c¨¦ntimos de d¨®lar al d¨ªa o creando microfarmacias con 350 medicamentos que cubren el 95% de las necesidades.
P. ?Cree que muchas de las iniciativas de responsabilidad social corporativa (RSC) son puro maquillaje?
R. Los departamentos de RSC no est¨¢n dirigidos por emprendedores, es parte del problema. No entienden qu¨¦ podr¨ªa causar un gran impacto en la sociedad.
P. ?En qu¨¦ actividades concretas existe mayor oportunidad para emprendimientos sociales?
R. En Ashoka nunca definimos sectores, empezamos de forma abierta. Los emprendedores sociales han de tener una buena idea capaz de cambiar el statu quo en un campo determinado y a nivel mundial. El mayor grupo est¨¢ relacionado con ni?os, gente joven y educaci¨®n, pero tambi¨¦n hay muchos proyectos en econom¨ªa ciudadana, salud y medio ambiente.
P. Ahora se habla m¨¢s de emprendimiento quiz¨¢ gracias a Internet y a lugares como Silicon Valley, pero los valores de estas empresas suelen ser vender al mejor postor y amasar dinero r¨¢pidamente. ?Qu¨¦ le parece esta mentalidad?
R. No critico a quienes crean empresas centradas solo en el negocio, pero est¨¢n atrapados en un sistema en el que lo primero son los accionistas. Hoy estamos amenazados en t¨¦rminos de privacidad. El modelo imperante en Internet es dar algo al consumidor, obtener su informaci¨®n, venderla y hacer beneficio. Hemos luchado durante d¨¦cadas para conseguir privacidad y ahora est¨¢ en peligro. ?Qui¨¦n est¨¢ levant¨¢ndose para defenderla? Este es justo uno de los casos en los que necesitamos a un emprendedor social cuyo objetivo sea el bien com¨²n.
P. ?Qu¨¦ le recomendar¨ªa a alguien en Espa?a que quiera dedicarse al emprendimiento social?
R. Lo primero, convencerse de que puede hacerlo. Muchos le dir¨¢n lo contrario, y lo mejor es ignorarlos con educaci¨®n. Lo segundo, tener ideas que cambien el mundo. S¨¦ que los dos ¨²ltimos a?os han sido una pesadilla para Espa?a, pero las mejores empresas surgen en momentos de crisis. Es el momento de cambiar el sistema; si transformas las reglas, las reglas no podr¨¢n detenerte.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.