Par¨ªs presenta el presupuesto "m¨¢s riguroso desde 1945"

Las advertencias de Moody's sobre la triple A, la crisis de la deuda y el acuerdo sellado con Alemania parecen haber convertido finalmente a Nicolas Sarkozy a la religi¨®n de la austeridad y al cumplimiento estricto del Pacto de Estabilidad. Tras aplazar la decisi¨®n por la cumbre del G-20, Par¨ªs presentar¨¢ hoy un nuevo plan de ajuste para 2012, llamado a garantizar un d¨¦ficit del 4,5%. El Gobierno necesita 8.000 millones m¨¢s para compensar la ca¨ªda de la previsi¨®n de crecimiento, que ha sido reducida desde el 1,75% al 1%. Las primeras filtraciones afirman que habr¨¢ subidas de impuestos (IVA y sociedades) y fuertes recortes del gasto.

El primer ministro, Fran?ois Fillon, se reuni¨® ayer con Sarkozy en el El¨ªseo para ultimar los detalles del nuevo plan, tras afirmar el s¨¢bado que los presupuestos de 2012 "ser¨¢n unos de los m¨¢s rigurosos desde 1945". "La hora de la verdad ha sonado", enfatiz¨® Fillon. "Ya no sirve de nada tom¨¢rsela con las agencias de calificaci¨®n, los banqueros, los especuladores o no s¨¦ qu¨¦ otro chivo expiatorio, ya no es ¨²til hacer creer que tenemos tesoros escondidos para financiar nuestro gasto p¨²blico. No hay m¨¢s receta para reducir la deuda que reducir el gasto".

La deuda p¨²blica francesa ha aumentado en casi medio bill¨®n de euros desde 2007 -a?o en que empez¨® el mandato de Sarkozy- hasta ahora, y hoy supera los 1,6 billones de euros. El dinero prestado ha pasado de suponer el 64,8% del PIB al 86,2%, y el Estado pagar¨¢ este a?o 49.000 millones en intereses. Mientras tanto, el d¨¦ficit camina por cifras cercanas al 6%.

Ahora, los conservadores estudian aumentar el impuesto de sociedades a las empresas que facturan m¨¢s de 500 millones de euros; subir el IVA del 5,5% al 7% para algunos sectores (restauraci¨®n, alquileres, hoteles), y convocar una jornada de solidaridad convirtiendo un d¨ªa festivo en laborable, gesto que supondr¨ªa 2.000 millones para las arcas del Estado. El plan inquieta mucho a la oposici¨®n socialista, que conf¨ªa en tomar el poder tras las presidenciales de mayo haciendo valer la ventaja que los sondeos.

Tambi¨¦n Alemania seguir¨¢ con especial atenci¨®n la maniobra financiera, ya que seg¨²n el pacto sellado entre Sarkozy y Angela Merkel, los aliados van a "coordinar y armonizar" sus cuentas, eufemismo que no esconde la evidente subordinaci¨®n francesa. Una encuesta conocida el s¨¢bado revela adem¨¢s la creciente impopularidad de los recortes motivados por la deuda. El 89% de los franceses considera que la ayuda prestada a los pa¨ªses en dificultades como Grecia jam¨¢s ser¨¢ cobrada.