Historias secretas

En el cine, como en cualquier otro oficio, hay gentes que realizan una labor desconocida para el gran p¨²blico aunque sean, por otra parte, muy conocidos entre su gremio. Es el caso de los nuevos cinco profesionales que la Academia de cine espa?ol ha querido rescatar de su "invisibilidad" proyectando sobre ellos los focos de la atenci¨®n. Yuyi Beringola, secretaria de rodaje; Rafael Martos, jefe de el¨¦ctricos; Tere Montoya, supervisora de material; Ramiro Sabell, ayudante de c¨¢mara, y Marina Rodr¨ªguez, sastra. Todos ellos (y ellas) con tanta veteran¨ªa en sus oficios como para poder escribir por s¨ª solos una sabrosa historia secreta, y seguramente interesante, del cine espa?ol.

Muchas ocasiones habr¨¢ habido en que un director dubitativo, una actriz desmemoriada o un fot¨®grafo con mal d¨ªa tuvieron que refugiarse en la sabidur¨ªa de alguno de ellos para resolver dudas o conflictos, y que el rodaje siguiera adelante. Frecuentemente, con una simple ojeada, ellos saben detectar en un director novel si tiene o no talento, si el productor de turno es un sinverg¨¹enza o alguien serio, o si cualquier otro miembro relevante del equipo sabe lo que tiene entre manos.

Sus memorias, sus recuerdos, podr¨ªan ampliar los conocimientos que tenemos de la historia del cine espa?ol pero, en vez de eso, se mantienen en el anonimato o en el lado invisible de lo que realmente sucede, sin que nadie registre sus testimonios; de hecho, se ha ido dejando que muchos de esos testimonios fueran borr¨¢ndose de la memoria para siempre, sin que una c¨¢mara o un grabador los conservara.

Invisibles

Las filmotecas, la Academia, por no hablar del mism¨ªsimo Ministerio de Cultura, al menos no dan noticias de que algo as¨ª se est¨¦ haciendo. ?Qui¨¦n, cu¨¢ndo, c¨®mo se podr¨¢ subsanar la ya desdichada desaparici¨®n de int¨¦rpretes, directores, guionistas o de t¨¦cnicos "invisibles" como los ahora premiados, cuya memoria se ha esfumado por negligencias burocr¨¢ticas o por falta de medios?

Quiz¨¢s no sea este el asunto m¨¢s urgente en esta actual Espa?a de urgencias, pero los merecidos premios a los "cinco invisibles" sobre los que ahora pone el foco la Academia dan ocasi¨®n para recordar a tantos otros que se nos fueron sin premios y, sobre todo, sin dejar constancia de sus experiencias. Bienvenido ser¨ªa que los nuevos tiempos pol¨ªticos que nos vienen fueran m¨¢s sensibles... pero poca traza tiene.