Casada con el enigma

Es la esposa del presidente electo desde hace 15 a?os. Pero hasta el pasado 20-N, Elvira Fern¨¢ndez Balboa, Viri, de 46 a?os, no era muy conocida. Y ha sido un fugaz beso en los labios en el balc¨®n de G¨¦nova, la sede del PP en Madrid, lo que la ha revelado. Una imagen que guarda un mensaje subliminal. Rajoy se convirti¨® en el sexto presidente de la democracia al tercer intento. Y si consigui¨® superar dos derrotas y resistir las presiones del partido es en buena medida debido a su apoyo. Ese beso fue, quiz¨¢, su modo de agradec¨¦rselo en p¨²blico. De igual manera, ella le abraz¨® hace cuatro a?os en ese mismo escenario, en un gesto intencionado para mostrarle su apoyo en la derrota. "Para Mariano es fundamental, es una se?ora como la copa de un pino, con un criterio inmenso", se?ala una persona cercana a la pareja. "Est¨¢n muy compenetrados. Viri es realista y muy intuitiva y por eso es su mejor consejera", a?ade una antigua colaboradora de ¨¦l.

"Desde abajo, fue escalando puestos. nadie sab¨ªa qui¨¦n era", dice un excolega

Ella vela por la estabilidad de los dos hijos, Juan, de seis a?os, y Mariano, de 12. Pero tambi¨¦n cuida la relaci¨®n con su suegro, octogenario -ambos se quieren much¨ªsimo-, y con su cu?ada, que vive en el chal¨¦ junto al que ocupan los Rajoy en Aravaca (Madrid). Sin olvidar los fuertes lazos que mantiene con su madre y sus hermanos Ana y Manuel, que viven en Galicia, adonde viaja con frecuencia. Su padre, al que estaba muy unida, falleci¨® hace nueve a?os.

Su lugar de origen, Pontevedra, es el nexo que uni¨® a la pareja. All¨ª naci¨® ella el 27 de abril de 1965. ?l, 10 a?os mayor, naci¨® en Santiago, pero se asent¨® en Pontevedra en la adolescencia. Ambos pertenec¨ªan a familias acomodadas. Elvira era hija de un constructor que hab¨ªa emigrado a Venezuela -m¨¢s por rebeld¨ªa juvenil que por necesidad econ¨®mica- y que regres¨® para embarcarse, asociado con sus cu?ados, en una aventura empresarial dedicada a la construcci¨®n y el saneamiento. No le fue mal y eso permiti¨® que ella asistiera al colegio de madres Doroteas, al instituto Valle-Incl¨¢n y a la Universidad de Santiago, donde se licenci¨® en Ciencias Econ¨®micas y Empresariales. Acabar¨ªa la carrera en Madrid, a distancia, compaginando las ¨²ltimas asignaturas con el trabajo.

Antes conoci¨® a Mariano. Un viejo amigo, el productor Jos¨¦ Manuel Lorenzo, recuerda qu¨¦ ocurri¨® en un local de copas que ambos frecuentaban y que ya no existe: La Luna, cerca de Sanxenxo. El propio Rajoy detalla en su autobiograf¨ªa, En confianza, que los present¨® su hermano Luis, notario, pero relata el momento desapasionadamente: "Sent¨ª que aquella mujer, tan guapa y con una personalidad muy marcada, a la vez que discreta e inteligente, no me iba a dejar indiferente de por vida".

Comenzaron a salir y ella lo sigui¨® a Madrid. Con la ayuda de Lorenzo, entonces director general de Antena 3, se coloc¨® en el departamento financiero de la cadena privada. "Entr¨® desde abajo y fue escalando puestos", recuerda ¨¦l. "Sin que nadie supiera nunca qui¨¦n era".

Sus compa?eros se quedaron mudos cuando la vieron en su primera aparici¨®n p¨²blica: su boda en la capilla de las Conchas en la isla de La Toja (Pontevedra). Fue en 1996, cuando Rajoy, ya entrado en la cuarentena, formaba parte del primer Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.

Cuando Telef¨®nica compr¨® Antena 3, Fern¨¢ndez se incorpor¨® primero a la filial Admira y luego a Telef¨®nica Contenidos, donde tiene su empleo actual. En estos a?os se ha especializado en la gesti¨®n de contenidos audiovisuales, adquiriendo cat¨¢logos y poni¨¦ndolos en valor. Tanto de productos cinematogr¨¢ficos, para la televisi¨®n online de la compa?¨ªa, Imagenio, como musicales para el servicio On the Spot, que ofrece sonido ambiente para grandes comercios o v¨ªdeos interactivos en escaparates. Es un puesto t¨¦cnico, sin labores ejecutivas.

Porque Elvira Fern¨¢ndez no ha querido hacer carrera en la empresa. En la campa?a de 2008 solicit¨® una excedencia para acompa?ar a su marido y lo mismo ha hecho en esta ¨²ltima. En Telef¨®nica dan por hecho que tras las elecciones no volver¨¢ a incorporarse y desde el PP confirman que ya ha solicitado no reincorporarse de momento a su puesto. De lo que no han dado pistas es de si finalmente la familia se mudar¨¢ a La Moncloa. Rajoy avis¨® en la campa?a de que no disfrutaba con la idea. Elvira huye de la exposici¨®n p¨²blica. Hasta el punto de que ha declinado en dos ocasiones ser entrevistada por este peri¨®dico. Antes y despu¨¦s de las elecciones. Sus allegados la definen como "pura discreci¨®n", sobria en las formas -no gusta de usar joyas ni aderezos-, exquisita en el trato y con un humor "muy gallego".

No le gusta ser protagonista, pero es consciente de lo que se le avecina, dicen. La misma noche electoral, en medio de la euforia desatada en el balc¨®n de G¨¦nova, ella era la ¨²nica cuyo gesto no era alegre. Parec¨ªa desbordada por los acontecimientos. O quiz¨¢ era la ¨²nica consciente entonces de que la tarea no ser¨¢ f¨¢cil. A ella, y a su familia, ya le ha cambiado la vida.