Un centenar de imputados por una trama de fraude fiscal en Vigo
Con el centro en una empresa familiar de Vigo, Carpinter¨ªa Las Cinco Jotas, hasta hace un par de a?os dedicada a la fabricaci¨®n de casas de madera, un juzgado de Vigo investiga un fraude fiscal millonario realizado sobre una base de facturas falsas, que en realidad no pagaban IVA. Las diligencias se abrieron en 2010 y contin¨²an con al menos ya un centenar de personas implicadas.
Aunque algunas fuentes cifran el fraude en 10 millones de euros, los instructores no han podido precisar a¨²n la cantidad defraudada. En la causa se han analizado miles de facturas y han declarado ya, entre imputados y testigos, casi 200 personas durante casi tres a?os de pesquisas, lo que da una idea de la complejidad de la investigaci¨®n.
"Por el momento no podemos precisar la cantidad de dinero defraudado a Hacienda pero, si no es el mayor asunto de este tipo en el ¨¢mbito auton¨®mico, es el m¨¢s importante que se ha instruido en Vigo", indicaron fuentes judiciales. "De hecho, prosiguen las citaciones a presuntos imputados y testigos y hay personas que han sido notificadas para declarar hasta el mes de mayo, por lo que a¨²n queda mucho por investigar", a?adieron.
Las investigaciones se centraron inicialmente en una docena de empresas, a ra¨ªz de la denuncia de un particular que se present¨® a finales de 2009, coincidiendo con el cambio de administradores en Las Cinco Jotas, que a la saz¨®n acumulaba m¨²ltiples demandas.La madeja de las facturas falsas fue creciendo hasta superar el medio centenar de sociedades implicadas, as¨ª como otras de trabajadores aut¨®nomos, todas las cuales est¨¢n en el punto de mira de la investigaci¨®n iniciada por la Agencia Tributaria, que sigue presentando denuncias en el juzgado. Casi todas las empresas est¨¢n vinculadas al sector de la construcci¨®n, tanto en la promoci¨®n como en las subcontratas de obras.
No obstante, el juzgado n¨²mero 6 que dirige las investigaciones ya sobresey¨® la imputaci¨®n de unas 60 personas, la mayor¨ªa aut¨®nomos, que en principio hab¨ªan sido acusados de complicidad en el fraude fiscal. La investigaci¨®n ha destapado irregularidades que se remontan al ejercicio fiscal de 2007, tras constatar una escandalosa emisi¨®n de facturas falsas desde Las Cinco Jotas a otras empresas con el prop¨®sito de reducir sus beneficios y deducir los impuestos de sociedades e IVA.
Las Cinco Jotas cambi¨® de administrador en 2009, a?o en el que se present¨® la denuncia y que coincide tambi¨¦n con la recalificaci¨®n en el plan general de Vigo del suelo que ocupaba en el monte de Cande¨¢n. La empresa hab¨ªa comenzado como un sencillo taller de carpinter¨ªa montado por Julio Costas Gonz¨¢lez en suelo r¨²stico de protecci¨®n forestal. En 1985 comenz¨® a producir casas de madera prefabricadas, con gran ¨¦xito, lo que la impuls¨® a ir ocupando suelo. Lleg¨® a tener 150 empleados, en su pr¨¢ctica totalidad de la parroquia de Cande¨¢n, cuyo vecindario se manifest¨® en Vigo para protestar porque el plan de urbanismo no legalizaba las instalaciones, con orden de demolici¨®n desde a?os antes.
Almac¨¦n
Finalmente, la Xunta acept¨® la recalificaci¨®n de los m¨¢s de 15.000 metros cuadrados de suelo r¨²stico que ocupa y que pasaron a nuclear un peque?o pol¨ªgono industrial. Poco despu¨¦s, la administraci¨®n de la empresa pasa de Jos¨¦ Manuel Costas, hijo del fundador, a Jos¨¦ Luis Mosquera Lemos, empresario del sector.
Para entonces, y desde dos a?os antes, Las Cinco Jotas ya acumulaba distintas demandas por impagos a la Seguridad Social, Hacienda, trabajadores y proveedores. A d¨ªa de hoy acumula m¨¢s de 60. Costas Est¨¦vez mantiene una participaci¨®n indeterminada en la sociedad, pero la empresa dej¨® de producir casas prefabricadas para convertirse b¨¢sicamente en almac¨¦n de maderas, con una decena de empleados que tambi¨¦n cortan piezas a medida.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.