Guimar?es se busca la vida (y el futuro)
La ciudad portuguesa se vuelca en la Capitalidad Cultural para salir de la crisis - Las viejas f¨¢bricas textiles, ahora cerradas, se convierten en salas multiusos
La crisis, varias crisis simult¨¢neas, cercan a Guimar?es, bella ciudad portuguesa de unos 50.000 habitantes, cabeza de la comarca del Valle del Ave. En los a?os ochenta y noventa, las inmensas factor¨ªas textiles que jalonaban todo este valle se fueron abandonando por la pujante competencia china. Desde entonces languidecen como viejos dinosaurios in¨²tiles. El mismo casco antiguo de Guimar?es, preciosamente conservado bajo la sombra del viejo castillo, est¨¢ rodeado de factor¨ªas vac¨ªas con chimeneas de ladrillo muertas. Pero los habitantes de esta ciudad han decidido devolverles la vida llen¨¢ndolas de cuadros y de conciertos y de obras de teatro para, de paso, tratar ellos mismos de sobrevivir. La Capitalidad Europea de la Cultura, estrenada el s¨¢bado por esta localidad situada a 150 kil¨®metros de Vigo mediante un espect¨¢culo de La Fura dels Baus contemplado por la ciudad entera en la calle, prev¨¦ la recuperaci¨®n de muchas de estas f¨¢bricas como escenarios culturales, plat¨®s de pel¨ªculas o residencias de artistas becados. Reinventarse o morir.
Entre sus planes est¨¢ atraer rodajes que antes se hac¨ªan en Europa del Este
La f¨¢brica de Ramada, una vieja industria de curtidos, cerrada hace muchos a?os, albergar¨¢ en septiembre un instituto de dise?o, pero antes servir¨¢ como sala de ensayos de la orquesta de la organizaci¨®n. La factor¨ªa ASA, especializada en su tiempo en colchas y toallas, enclavada fuera de Guimar?es, en la localidad de Vizela e Santo Tirso, dej¨® definitivamente de funcionar en 2006. Ahora, mediante un inversor privado, se transformar¨¢ en una especie de centro comercial de tiendas baratas. Pero antes, sus 24.000 metros cuadrados servir¨¢n para albergar las principales exposiciones de pintura.
Y en la fantasmal f¨¢brica textil del Conde de Vizela, donde en el siglo XIX trabajaban m¨¢s de 4.000 empleados y que contaba hasta con moneda propia, V¨ªctor Erice y otros cineastas como Jean-Luc Godard o Aki Kaurism?ki (el finland¨¦s vive cerca de Guimar?es) rodar¨¢n una pel¨ªcula colectiva. La ciudad no est¨¢ dispuesta a que el cine pase por aqu¨ª con la excusa de 2012 y despu¨¦s se vaya, as¨ª que ha adquirido un equipo de producci¨®n de pel¨ªculas a fin de convertirse en una ciudad-destino para los cineastas: "Ya tenemos apalabradas producciones para 2013 que iban a irse a Europa del Este. Erice mismo dice que le gustar¨ªa venir aqu¨ª a rodar", asegura el responsable del sector audiovisual de Guimar?es 2012, Rodrigo Areias.
Areias explica esto en otra vieja f¨¢brica de Guimar?es, reconvertida -gracias al impulso de un grupo de j¨®venes arquitectos de la ciudad- en el Centro para Asuntos de Arte y Arquitectura. A¨²n huele a nuevo, hay muchos espacios vac¨ªos, la biblioteca presenta los libros arrumbados y envueltos en pl¨¢sticos y hace un fr¨ªo que pela. Pero cada habitaci¨®n tiene adjudicada una misi¨®n, desde residencias para artistas extranjeros invitados a un laboratorio audiovisual especializado en robots animados y juguetitos m¨®viles que har¨ªa las delicias de cualquier chiflado de la inform¨¢tica aplicada o de cualquier chiflado a secas.
"Aqu¨ª viene la gente de la ciudad por la noche", explica Areias con una sonrisa. Tal vez este es el secreto: la ciudad, la gente de esta ciudad, que en 2001 fue elegida Patrimonio Cultural de la Humanidad, vive lo de la capitalidad cultural m¨¢s como una oportunidad que como una fiesta. Para muchos es una suerte de tren que a lo mejor no viene m¨¢s. Los que lo organizan lo tienen claro: "No queremos que venga la Filarm¨®nica de Berl¨ªn, que adem¨¢s es muy cara, toque, lo haga muy bien y luego se vaya y adi¨®s", explica uno de los portavoces de la candidatura. "Queremos hacer algo que perdure, que sirva para reubicar a la ciudad, y con la gente de aqu¨ª", a?ade. De ah¨ª uno de los lemas: "Yo formo parte". Hay chapitas colgadas con la frase de las solapas y de las chaquetas de casi todos los vecinos de Guimar?es.
El presupuesto es magro (110 millones de euros), consecuencia de un a?o en el que Portugal se juega -literalmente- su suerte como Estado solvente, amenazado por la bancarrota y supervisado por la troika. Por eso ha sido necesario echarle imaginaci¨®n. Un ejemplo: vendr¨¢ la innovadora banda Buraka son Sistema, uno de los ejemplos de la modernidad portuguesa, que dar¨¢ un concierto el 28 de enero en el Pabell¨®n Multiusos. Tambi¨¦n hay previsto ese d¨ªa un programa titulado Mi casa es tu casa, en el que los vecinos de la ciudad prestan su piso o su habitaci¨®n o su pasillo para que otros grupos den all¨ª recitales. Ya hay 40 casas dispuestas a abrir sus puertas.
Los orgullosos vecinos de Guim?raes, pues, responden. No en vano, seg¨²n los historiadores, Portugal naci¨® aqu¨ª, como su primer rey, Alfonso Enr¨ªquez, que habit¨® el famoso castillo que, con el tiempo, ha ido adquiriendo aspecto de vieja f¨¢brica abandonada. No es casual que el programa oficial arrancara el domingo con un documental sobre m¨²sica portuguesa titulado, sintom¨¢ticamente, Vamos a tocar todos juntos para o¨ªrnos mejor.
Maribor, la otra
El s¨¢bado 14 fue el inicio de los actos de Maribor, la ciudad eslovena que comparte con Guimar?es la Capitalidad Cultural de Europea. Maribor apuesta por el optimismo en tiempo de crisis y, junto a una oferta cl¨¢sica de espect¨¢culos de ¨®pera, ballet y teatro, la organizaci¨®n ha dotado de Internet gratis a los principales edificios de la ciudad (p¨²blicos y tur¨ªsticos) y creado puntos en la calle de wi-fi accesible para cualquier ciudadano. El programa comprende m¨¢s de 1.000 actos y proyectos a lo largo del a?o. Y una curiosidad: el acuerdo con otras ciudades de la regi¨®n para que su programa se reparta por la zona.
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