El fiasco de la aerol¨ªnea catalana
Los empresarios se apearon de Spanair y la Generalitat carg¨® con ella para influir en El Prat - Los sindicatos exigen responsabilidades por los 4.000 empleados afectados
El sue?o de Catalu?a de tener una aerol¨ªnea de bandera se convirti¨® el viernes en una pesadilla. Spanair, lo que deb¨ªa haber sido la gran iniciativa de la sociedad civil catalana y la herramienta de la Generalitat para influir en la gesti¨®n del aeropuerto de Barcelona-El Prat, en manos de Aena, acab¨® siendo un pozo sin fondo que devoraba dinero p¨²blico. Y ayer el proyecto cay¨® por su propio peso dejando colgados a 22.770 pasajeros el primer fin de semana tras su ruina y a 2.000 empleados directos (y 2.000 indirectos) en la calle. La inc¨®gnita ahora es c¨®mo Catalu?a recuperar¨¢ los cerca de 150 millones p¨²blicos que se comi¨® Spanair y qui¨¦n cargar¨¢ con la responsabilidad de una quiebra s¨²bita, las posibles multas y una gesti¨®n m¨¢s que dudosa.
El Gobierno catal¨¢n ya exigi¨® en 2009 a la directiva que buscara un socio
La venta de Spanair por parte de la escandinava SAS fue vista por la ¨¦lite empresarial catalana como una oportunidad para que Catalu?a tuviera una aerol¨ªnea que convirtiera El Prat en un hub internacional. Todos aplaudieron la iniciativa y no pocos empresarios dec¨ªan estar estudiando su entrada en el accionariado. Pero a la hora de la verdad, la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona, a trav¨¦s de tres sociedades mixtas, acabaron pujando casi en solitario por Spanair. Invirtieron 37 millones, frente a los 20 millones de los empresarios. Adem¨¢s, se tuvieron que pedir prestados otros 50 millones.
La supervivencia de la aerol¨ªnea, que en 2010 perdi¨® 115 millones, finalmente acab¨® dependiendo de las administraciones, que salvaron la compa?¨ªa con aportaciones que justificaban en ese sue?o del hub catal¨¢n. Desde 2009, ambas instituciones bombearon 150 millones, que deber¨¢n reclamar en un concurso de acreedores en el que ambos gobiernos podr¨ªan estar por partida doble: como accionistas y acreedores. "Era la v¨ªa posibilista para que El Prat despegara, pero desde 2009 ya advertimos a la c¨²pula de Spanair de que la Generalitat no pod¨ªa aportar m¨¢s dinero, y deb¨ªan buscar un socio aunque perdiera la mayor¨ªa", dice un exconsejero catal¨¢n. Pese a meter dinero a mansalva, el Ejecutivo catal¨¢n dej¨® la gesti¨®n de la compa?¨ªa en manos de los empresarios, que eligieron presidente a Ferran Soriano.
A Soriano, exvicepresidente del FC Barcelona, los empresarios consultados cercanos a Spanair le reconocen su labor de mercadotecnia, pero ponen en duda sus dotes de directivo. "Soriano no era un ejecutivo. Un ejecutivo salva el barco. ?l ni lo dirige", afirma uno de esos empresarios. Soriano pronto tuvo un sonado enfrentamiento con el Consejo de Administraci¨®n de Spanair, que fren¨® sus ansias por competir para la presidencia del Bar?a.
Spanair fue incapaz de despegar. Solo llegar al poder, a finales de 2010, CiU tuvo que inyectar 10,5 millones mediante un cr¨¦dito de urgencia. Pero en plena ¨¦poca de recortes, la Generalitat perdi¨® la paciencia. Tras el fracaso de las negociaciones con Lufthansa, Avianca, Turkisch y Singapur Airlines, Spanair lo intent¨® con Qatar Airways. Tampoco fragu¨®, lo cual hizo que el Gobierno catal¨¢n asumiera que la firma no conseguir¨ªa otro socio a corto plazo. El martes se filtr¨® que Soriano preparaba su marcha al Manchester City, lo que empresarios y Administraci¨®n interpretaron como una medida de presi¨®n del presidente, para forzar m¨¢s fondos p¨²blicos. El viernes Soriano volvi¨® a pedirlos a Artur Mas. Pero la Generalitat no volvi¨® a ceder.
Mientras, los trabajadores siguen en vilo. "Estamos sin noticias de Spanair". Los representantes sindicales de los m¨¢s de 2.000 empleados de Spanair atrapados aseguraron ayer no tener noticias de la compa?¨ªa sobre el futuro de los empleos, y dejaron dos cosas bien claras: primero, instaron a la aerol¨ªnea a que acelere la solicitud del concurso de acreedores para pasar al paro de forma provisional y no quedar en el limbo de no trabajar sin haber sido despedidos; segundo, exigieron a la Generalitat que asuma parte de la responsabilidad sobre el futuro de los trabajadores como accionista mayoritario e inversor.
"La Generalitat no puede salir de rositas, ha estado jugando con p¨®lvora sin un plan de viabilidad", manifest¨® el secretario de organizaci¨®n del sector a¨¦reo de CC OO, Jorge Carrillo. USOC, primer sindicato en la empresa, reclam¨® "actuaciones urgentes por parte de las administraciones para minimizar los efectos laborales" y a la Generalitat "que asuma su responsabilidad". Desde UGT, el responsable del sector a¨¦reo en Catalu?a, Javier Extremera, se sum¨® al ruego de que "la Generalitat diga el qu¨¦".
Newco, la empresa que realiza los servicios de tierra para Spanair y que ya est¨¢ en concurso de acreedores, anunciar¨¢ un ERE. A los 2.000 empleados de Spanair (1.100 en Barcelona, 600 en Madrid y el resto en otros aeropuertos) y los 1.300 de Newco (algunos se salvar¨¢n porque trabajan para otras aerol¨ªneas) hay que sumar otros 700 de firmas de limpieza o mantenimiento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.