Microsoft acepta restricciones de cinco a?os en el desarrollo y venta de programas
El pacto tambi¨¦n obliga a la compa?¨ªa a facilitar el funcionamiento de otros programas en Windows
El acuerdo alcanzado ayer entre Microsoft y el Gobierno de EE UU para poner fin al caso antimonopolio impone, por un periodo de cinco a?os, restricciones y regulaciones en la forma en que la compa?¨ªa desarrolla y autoriza el uso de su software (programas inform¨¢ticos), en la forma de trabajar con los vendedores independientes de software y en la forma de comunicar los procedimientos internos de su software a socios y competidores, es decir, la informaci¨®n que necesitan para desarrollar productos para Windows.
El acuerdo permitir¨¢ a los fabricantes de ordenadores trabajar con otros fabricantes de programas y situar sus productos en el sistema Windows de Microsoft. Esto intenta resolver el asunto de la integraci¨®n forzosa entre el sistema Windows, que utilizan el 95% de los ordenadores del mundo, y los programas de Microsoft, como Word, Explorer o Excel.
Adem¨¢s, proh¨ªbe a la compa?¨ªa de Bill Gates sancionar a quien fabrique o use productos de la competencia, seg¨²n ha informado el Departamento de Justicia de EE UU.
Por otra parte, establece t¨¦rminos uniformes para la concesi¨®n de licencias de uso de los productos de Microsoft. Durante cinco a?os, Microsoft deber¨¢ conceder licencias de uso de sus sistema operativo a los fabricantes de computadoras en los mismos t¨¦rminos, algo que no ocurr¨ªa en el pasado, ya que la compa?¨ªa ofrec¨ªa descuentos a los fabricantes que configurasen sus m¨¢quinas de forma que apareciese el sistema Windows por defecto. En este apartado se centra el caso que desencaden¨® la batalla legal, el del navegador de Internet de Netscape, el Navigator, cuyo icono de enlace no aparec¨ªa en el escritorio de Windows, en beneficio del Explorer de Microsoft.
Asimismo, obliga al gigante de la inform¨¢tica a proveer a los fabricantes las interfaces necesarias para interoperar con Windows y a ofrecer a los fabricantes de aparatos las mismas condiciones en las licencias para usar sus programas.
El acuerdo propuesto ampl¨ªa los productos intermedios, o programas de aplicaciones, de manera que se cubran todas las tecnolog¨ªas que puedan ser competidoras del monopolio de Microsoft en los sistemas operativos.
Acuerdo justo y razonable
"El acuerdo es justo y razonable y, lo que es m¨¢s importante, va en inter¨¦s de los consumidores y de la econom¨ªa", ha dicho el presidente de la compa?¨ªa, Bill Gates. "Aunque el acuerdo impone restricciones muy duras para nuestros negocios, creemos que resolver el caso es lo mejor que podemos hacer para nuestros clientes, para el industria tecnol¨®gica y para la econom¨ªa".
"Estamos comprometidos a hacer de este acuerdo un ¨¦xito, y a seguir proporcionando importantes innovaciones para ayudar a revitalizar la econom¨ªa y a mejorar la vida de la gente", ha dicho Gates. "Hay muchos desaf¨ªos y oportunidades para nuestro negocio, para nuestra naci¨®n y para la econom¨ªa global, y este acuerdo permitir¨¢ a Microsoft mirar hacia el futuro".
El acuerdo ha sido el resultado de intensas discusiones en las ¨²ltimas semanas, lo que incluye la asistencia de Eric Green, mediador nombrado por el juez.
Aunque el Departamento de Justicia y Microsoft han llegado a un acuerdo, los 18 estados que son parte en el caso a¨²n no han tomado una decisi¨®n sobre si participar¨¢n en el acuerdo alcanzado ayer. Hoy, la juez Colleen Collar-Kotelly les ha dado de plazo hasta el martes para pronunciarse sobre el acuerdo. Si lo rechazan, el proceso seguir¨¢ su curso sin la participaci¨®n del principal demandante, el Gobierno federal.
"Estamos encantados de que las preocupaciones del Gobierno Federal se hayan disipado con la ayuda del mediador, al tiempo que se asegura que Microsoft puede seguir innovando y traspasando las fronteras de la tecnolog¨ªa", ha declarado el Jefe Ejecutivo de la compa?¨ªa, Steve Balmer. "Esperamos que los estados se unan al acuerdo una vez que conozcan los t¨¦rminos del mismo".
Tres a?os en los tribunales
El pasado viernes, el Departamento de Justicia llegaba a un acuerdo con Microsoft para cerrar un asunto que lleva tres a?os coleando en los tribunales y en el que, b¨¢sicamente, la compa?¨ªa de software acepta una serie de restricciones que deber¨ªan acabar con sus "actividades contra ley", en palabras del Departamento.
Microsoft debe ofrecer a las compa?¨ªas rivales la informaci¨®n que necesitan para desarrollar productos para Windows, el sistema operativo de Microsoft que est¨¢ presente en el 95% de los PC, permitiendo as¨ª a estas empresas, en teor¨ªa, competir con la propia Microsoft en igualdad de condiciones. Adem¨¢s, Microsoft acepta que tres expertos independientes vigilen, durante cinco a?os, que la compa?¨ªa de Gates cumple con lo prometido, y se compromete, incluso, a darles acceso al c¨®digo fuente de Windows, el secreto mejor guardado de Microsoft.
A¨²n quedan algunos flecos. Los 18 Estados que se mantienen en la demanda han pedido m¨¢s tiempo a la juez Coleen Kollar-Kotelly para decidir si se unen o no al acuerdo (tienen hasta el martes para decidirse). Adem¨¢s, algunos competidores han amenazado con emprender su propio proceso, ya que les parece sospechoso que el Gobierno se haya retirado del caso a pesar de haber conseguido una acusaci¨®n de culpabilidad, y en un momento en que el dominio de Microsoft en los PC puede resultar muy ¨²til en la lucha cibern¨¦tica contra el terrorismo de Bush.
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