Ollanta Humala, ?el nuevo azote de las compa?¨ªas espa?olas en Am¨¦rica Latina?

"El problema de Humala es que todav¨ªa no ha definido su programa electoral. De ¨¦l, s¨®lo conocemos grandes generalidades. Sabe que cuanto m¨¢s hable de temas concretos, peor va a ser para ¨¦l, pues tiene un halo de candidato anti sistema que funciona muy bien en Per¨². Dada su cercan¨ªa a Chavez, podemos interpretar que va a utilizar el estilo populista. Tambi¨¦n podemos suponer que, como Ch¨¢vez y Evo Morales, aprovechar¨¢ el tir¨®n electoral de su triunfo para modificar la Constituci¨®n y elaborar nuevas reglas del juego en el terreno econ¨®mico", explica el Carlos Malamud, investigador principal del ¨¢rea de Am¨¦rica Latina del Real Instituto Elcano.

Malamud no es del todo pesimista: "Dudo mucho que emprenda una pol¨ªtica abierta de nacionalizaciones porque, entre otras cosas, las encuestas no le dan mayor¨ªa absoluta y, sin ella, con el parlamento fraccionado, tendr¨¢ que pactar con otras fuerzas que no aceptar¨ªan medidas tan radicales. Eso s¨ª, es muy probable que juegue con temas como la congelaci¨®n de tarifas, algo que a Telef¨®nica le puede perjudicar mucho".

Este especialista en Am¨¦rica Latina cree que lo m¨¢s probable es que Ollanta Humala se quede en una pol¨ªtica de gestos y palabras agresivas, sin llegar a tocar la situaci¨®n de las empresas. Y da otra pista: "Aunque la imagen de las multinacionales espa?olas no es todo lo buena que debiera ser, hay una especie de seguro frente a la gran impopularidad de las chilenas. Humala podr¨ªa utilizar a las compa?¨ªas chilenas como chivo expiatorio, sobre todo en el ¨¢rea de servicios".

Ollanta Humala: "Te est¨¢n robando, te est¨¢n quitando tu futuro"

En ese transitar por argumentos de ida y vuelta que Humala utiliza para no salir del todo de la indefinici¨®n, este antiguo coronel, que en 2000 se sublev¨® contra el r¨¦gimen de Alberto Fujimori, ha aclarado que el nacionalismo que predica no implica ni la expropiaci¨®n ni la nacionalizaci¨®n de las multinacionales. "Cuando hablo de nacionalizaci¨®n, no hablo de nacionalizar empresas, sino recursos; hablo de revisar contratos". Ha adelantado que exigir¨¢ una rebaja de las tarifas a empresas como Telef¨®nica y modificar¨¢ los contratos a las que no pagan impuestos a la renta o regal¨ªas, como Repsol YPF. Pero tambi¨¦n usa argumentos m¨¢s radicales: "Te est¨¢n robando, te est¨¢n quitando tu futuro, si las empresas no quieren renegociar los contratos se buscar¨¢ otro postor".

Por eso, Jos¨¦ Luis Tapia Rocha, director general del Instituto de Libre Empresa peruano, es mucho m¨¢s negativo: "Las empresas espa?olas tendr¨¢n que ser firmes y repetir el argumento de que los contratos que han suscrito son leg¨ªtimos y constitucionales. La Constituci¨®n establece los contratos ley para evitar las expropiaciones arbitrarias del Estado, como las que emprendi¨® en nombre de la revoluci¨®n el general Velasco Alvarado en la dictadura de los 70. Eso s¨ª, en el caso de que Humala sea elegido y logre que el Congreso apruebe la convocatoria de un refer¨¦ndum para una Asamblea Constituyente... Entonces, las actuales empresas extranjeras deber¨¢n alistar sus maletas e irse de Per¨²".

Pero, ?por qu¨¦ tanta aversi¨®n al capital espa?ol en Latinoam¨¦rica? Basta teclear Repsol y Per¨² en el buscador Google para encontrar encendidos alegatos contra las inversiones espa?olas en el continente americano. Tapia explica los motivos de la negativa percepci¨®n popular en su pa¨ªs: "La aversi¨®n viene de las privatizaciones que se realizaron en los a?os 90. Sobre todo, en sectores sensibles como la energ¨ªa o las comunicaciones, donde las tarifas suben, pero los ingresos de la poblaci¨®n no. Son esas multinacionales y las que tienen contratos de estabilidad tributaria y jur¨ªdica con el Estado los que pueden salir peor parados: Repsol, Telef¨®nica, Edegel, Edelnor y Luz del sur".

Ni Repsol ni Telef¨®nica han querido hacer ning¨²n comentario a este peri¨®dico sobre el tema, aunque saben que la inestabilidad en Am¨¦rica Latina les afecta muy negativamente. En enero de 2002, tras la devaluaci¨®n del peso, las grandes empresas espa?olas con inversiones en Argentina llegaron a perder 14.940 millones de euros (2,5 billones de pesetas) de valor burs¨¢til en una semana. En los nueve meses que siguieron, Telef¨®nica Argentina perdi¨® m¨¢s de mil millones de d¨®lares.

Pero, como apunta Tapia, los riesgos de una radicalizaci¨®n de la pol¨ªtica en Per¨² no pasan s¨®lo por la reducci¨®n de beneficios y las ca¨ªdas de capitalizaci¨®n que, casi con toda probabilidad, se producir¨ªan... Una fuerte p¨¦rdida de valor burs¨¢til dejar¨ªa vulnerables a las multinaciones espa?olas frente al apetito comprador de los grandes conglomerados internacionales.