Telef¨®nica da el primer paso para romper la alianza con PT
El operador espa?ol contrata a una firma de abogados para intentar disolver Brasilcel
Telef¨®nica ha dado el primer paso para intentar romper su alianza con Portugal Telecom (PT) sobre Vivo. La compa?¨ªa espa?ola ha contratado a la firma holandesa de abogados De Brauw Blackstone Westbroek para buscar la disouluci¨®n de Brasilcel, la sociedad al 50% con que ambos controlan la operadora brasile?a, seg¨²n ha informado a Bloomberg una persona cercana a la situaci¨®n que pidi¨® no ser identificada hasta que se haga un anuncio oficial. Telef¨®nica ha declinado hacer comentarios.
En la madrugada del viernes al s¨¢bado venci¨® el plazo que Telef¨®nica hab¨ªa dado a PT para aceptar su oferta de 7.150 millones por su mitad de Brasilcel. La espa?ola no acept¨® la petici¨®n de seguir negociando 12 d¨ªas m¨¢s. Telef¨®nica mantiene su inter¨¦s por Vivo y una vez cerrada, al menos provisionalmente, la v¨ªa del di¨¢logo, explora otras alternativas.
Tras el veto del Gobierno portugu¨¦s a la compra de Vivo por la espa?ola y el fracaso de las negociaciones posteriores, Telef¨®nica sopesa pedir el divorcio, esto es, instar la disoluci¨®n de Brasilcel, la sociedad conjunta al 50% a trav¨¦s de la que los dos socios poseen el 60% de la operadora brasile?a. El problema es que el acuerdo entre ambas s¨®lo prev¨¦ la ruptura de mutuo acuerdo, con lo que los abogados contratados por Telef¨®nica tendr¨¢n una dif¨ªcil tarea.
El actual pacto de socios de Telef¨®nica y PT fue firmado el 21 de septiembre de 2005 en ?msterdam, donde est¨¢ domiciliada Brasilcel. El pacto se firm¨® con una duraci¨®n de 25 a?os prorrogables t¨¢citamente primero por otros 25 y luego, de cinco en cinco. Durante ese plazo el acuerdo "est¨¢ en vigor, es v¨¢lido y vinculante", seg¨²n el texto del acuerdo, a menos que se d¨¦ una de las causas de terminaci¨®n del mismo. Pero, en principio, esas causas exigen el pacto de los dos socios.
La primera causa de divorcio es "el acuerdo mutuo por escrito entre las partes". La segunda tambi¨¦n es simple: que solo uno de los dos socios siga siendo accionista de Brasilcel, lo que hubiera ocurrido si PT hubiera aceptado la oferta de Telef¨®nica. La tercera causa es sencilla en apariencia, pero con implicaciones m¨¢s complejas: "El acuerdo terminar¨¢ autom¨¢ticamente una vez completada la liquidaci¨®n de la compa?¨ªa".
Eso remite a la parte del acuerdo en que se tratan las causas de liquidaci¨®n de la compa?¨ªa, que lleva al mismo callej¨®n sin salida. La liquidaci¨®n procede en caso de que se produzca un bloqueo o desacuerdo grave (con respecto a alguna decisi¨®n importante a adoptar por Brasilcel) que no pueda ser reconducido mediante negociaciones de buena fe. Pero, y ese pero es muy importante, el acuerdo solo prev¨¦ la liquidaci¨®n en caso de que al producirse esa "diferencia irreconciliable", uno de los socios proponga al otro la disoluci¨®n y liquidaci¨®n y el segundo la acepte, siempre por escrito.
Si un socio no acepta la liquidaci¨®n, lo que se prev¨¦ es que la diferencia que se haya suscitado se someta a la decisi¨®n de un grupo de tres "sabios", expertos en telefon¨ªa m¨®vil, nombrado uno por cada parte y el tercero por los dos ya nombrados. Pero el acuerdo da a entender que lo que han de hacer los sabios es elegir entre propuestas alternativas de los dos socios sobre el negocio y deja claro que este comit¨¦ "no tendr¨¢ la autoridad para decidir que la compa?¨ªa sea disuelta o liquidada".
Claro est¨¢ que, como las leyes, los contratos son interpretables. Si pese a esas cl¨¢usulas Telef¨®nica cree que puede instar la disoluci¨®n de Brasilcel sin acuerdo, entonces podr¨ªa instar un arbitraje. La espa?ola y la portuguesa se enfrentar¨ªan en ?msterdam a un arbitraje en ingl¨¦s sujeto a la ley holandesa, bajo las reglas de la francesa C¨¢mara de Comercio Internacional (CCI). Seg¨²n el pacto, cada parte nombrar¨ªa un ¨¢rbitro y el tercero ser¨ªa elegido por los dos primeros o, si no hay acuerdo, por la CCI. Telef¨®nica dio a entender a inversores que ese era su plan si se rechazaba su oferta por Vivo, a lo que PT replic¨® que no hab¨ªa base legal. El pleito podr¨ªa durar de uno a tres a?os.
?Y qu¨¦ suceder¨ªa en caso de liquidaci¨®n? Algunas de las cl¨¢usulas son confidenciales, pero la parte conocida del contrato indica que habr¨ªa un reparto de activos. El primer acuerdo firmado por Alierta y Bava establec¨ªa que, en caso de liquidaci¨®n, cada parte recibir¨ªa lo que hubiera aportado al matrimonio. No est¨¢ claro que eso siga estando en vigor, porque Vivo ha cambiado mucho (las viejas compa?¨ªas se han integrado en la nueva) y porque parte del actual acuerdo es secreto, pero de estarlo ser¨ªa preocupante para Telef¨®nica, ya que PT aport¨® el control de Telesp Celular, la m¨¢s valiosa de las compa?¨ªas con que se form¨® Vivo. Adem¨¢s, Telesp Celular es la que permitir¨ªa a Telef¨®nica lograr mayores sinergias con Telesp, la operadora fija que controla Telef¨®nica, ya que ambas operan en la misma zona de influencia, en el Estado de S?o Paulo .
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