Dos de cada cinco parados viven en un hogar con todos sus miembros sin empleo
La tasa casi se ha duplicado desde 2007 por el fuerte aumento del desempleo entre los cabeza de familia.- El organismo aboga por acelerar las reformas para potenciar la creaci¨®n de empleo
La crisis y el fuerte auge del desempleo han modificado el perfil de los hogares espa?oles con un importante aumento de las familias en donde todos los miembros en edad de trabajar no tienen empleo. Seg¨²n c¨¢lculos del Banco de Espa?a, dos de cada cinco desocupados, lo que equivale a un 40% del total, residen en un hogar donde todos sus miembros est¨¢n parados. Este porcentaje era de los m¨¢s bajos de la zona del euro en 2007, con una tasa del 26%, pero tras subir con fuerza en los ¨²ltimos dos a?os est¨¢ ya dos puntos por encima del anterior m¨¢ximo, alcanzado en 1994 cuando Espa?a dejaba atr¨¢s la recesi¨®n econ¨®mica.
Tal y como se recoge en un cap¨ªtulo especial incluido en el ¨²ltimo bolet¨ªn econ¨®mico del organismo, publicado hoy, el fuerte repunte de la tasa de paro entre los cabeza de familia y la entrada en el mercado laboral de m¨¢s miembros de un mismo hogar para subsanar la falta de ingresos, sin conseguirlo, ha elevado al 10,2% el n¨²mero de familias que tienen a todos sus miembros en paro. Pese a su aumento, la tasa se mantiene por debajo de los m¨¢ximos alcanzados a principios de los noventa.
"La capacidad de protecci¨®n adicional contra el desempleo que pudieran constituir los v¨ªnculos familiares es ahora menor que en recesiones anteriores"
Seg¨²n recuerda la instituci¨®n, durante los dos ¨²ltimos a?os la tasa de paro espa?ola "se ha deteriorado con mucha m¨¢s profundidad que en otros pa¨ªses europeos, pasando del 7,9% registrado en el segundo trimestre de 2007 al 20,1% del segundo trimestre de 2010. Con estos niveles, la tasa dista a¨²n 4 puntos del m¨¢ximo registrado en la crisis de los a?os noventa. No obstante, en esta ocasi¨®n, el patr¨®n del desempleo es diferente, y su incidencia sobre los hogares, mayor".
Del 6% al 16% de paro
En la actualidad, la tasa de paro del principal perceptor de renta del hogar, que hab¨ªa alcanzado su nivel m¨ªnimo en los trimestres previos a la crisis con un 6%, ha subido al 16,1%, con lo que supera el anterior r¨¦cord registrado en la recesi¨®n de 1993, cuando lleg¨® al 13%. No obstante, el organismo matiza que el deterioro se ha visto algo atenuado porque, aunque ha disminuido el tama?o de los hogares, ha aumentado su n¨²mero de activos, es decir, de las personas con posibilidad de trabajar. Principalmente porque ha continuado la incorporaci¨®n al mercado laboral de las mujeres, un fen¨®meno iniciado hace dos d¨¦cadas, a?ade el art¨ªculo.
Pese a ello, la tasa de paro del c¨®nyuge, aunque se sit¨²a en niveles similares a los del cabeza de familia con un 16,8%, no se ha incrementado con tanta intensidad como en crisis anteriores. Sin embargo, si se suman ambos efectos, la entrada en el paro de los dos, s¨ª que se constata "una mayor incidencia de situaciones de desempleo simult¨¢neas entre miembros del hogar".
Esta descomposici¨®n, a?ade el texto firmado por Jos¨¦ Mar¨ªa Casado, Cristina Fern¨¢ndez y Juan F. Jimeno, de la Direcci¨®n General del Servicio de Estudios del Banco de Espa?a, "permite observar en qu¨¦ medida la estructura de hogares y la incidencia simult¨¢nea del desempleo entre todos sus activos contribuyen a agrupar a los parados en hogares sin ning¨²n empleado". Por todo esto, los firmantes concluyen que "la capacidad de protecci¨®n adicional contra el desempleo que pudieran constituir los v¨ªnculos familiares es ahora menor que en recesiones anteriores, lo que hace m¨¢s patente, si cabe, la urgencia de llevar a cabo las reformas necesarias para potenciar r¨¢pidamente la creaci¨®n de empleo".
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