Dexia acepta dividir en tres la entidad tras el acuerdo pol¨ªtico
Los Gobiernos de Francia, B¨¦lgica y Luxemburgo respaldan a la entidad con unos 90.000 millones en garant¨ªas.- La filial belga ser¨¢ nacionalizada con 4.000 millones de euros
Los Gobiernos de Francia, B¨¦lgica y Luxemburgo acordaron el desmantelamiento de Dexia como ¨²nica soluci¨®n para asegurar la supervivencia de las tres entidades resultantes. La operaci¨®n supondr¨¢ un coste de unos 90.000 millones de euros en dinero p¨²blico (en forma de recapitalizaciones y garant¨ªas), y supondr¨ªa dividir el banco en tres entidades con la creaci¨®n de un banco malo para asumir los activos da?ados. El consejo de administraci¨®n de Dexia ha aceptado "bajo las actuales circunstancias" la propuesta de rescate pactada por los tres gobiernos. "El consejo de administraci¨®n ha analizado la oferta y ha consultado con expertos independientes respecto al inter¨¦s social para el grupo y sus filiales y ha aprobado la compra de Dexia Bank Belgium por el Estado belga", ha anunciado la entidad.
La intervenci¨®n p¨²blica en Dexia, con nuevas ayudas, tiene un doble significado econ¨®mico. Por una parte, incrementa las presiones sobre la necesidad de recapitalizar los bancos europeos; y, por otra, supone una presi¨®n espec¨ªfica sobre B¨¦lgica, que puede ver rebajada la calificaci¨®n de su deuda, como ya advirti¨® el pasado viernes la agencia Moody's.
La soluci¨®n pol¨ªtica se alcanz¨® tras un acuerdo entre el primer ministro belga en funciones, Yves Leterme, su hom¨®logo franc¨¦s, Fran?ois Fillon, y representantes del Gobierno de Luxemburgo. Tras la reuni¨®n, el Gobierno belga emiti¨® un comunicado en el que afirma que "la soluci¨®n sugerida, resultado de intensas consultas con todas las partes involucradas, se someter¨¢ al Consejo de Administraci¨®n para su aprobaci¨®n".
El esquema de la operaci¨®n pasa por nacionalizar Dexia Banque Belgique (DBB), la entidad belga del grupo financiero; crear en Francia una nueva compa?¨ªa para atender la financiaci¨®n de las entidades locales, que son sus principales clientes; y vender Banque Internationale ¨¤ Luxembourg a una sociedad de Catar por unos 900 millones de euros.
La confirmaci¨®n de la nacionalizaci¨®n de la filial belga vino de boca del mismo primer ministro, que convoc¨® una rueda de prensa a las tres de la madrugada para confirmar que su Gobierno va a controlar el 100% de DBB. El Estado belga ha ofrecido 4.000 millones de euros para hacerse con su control, un precio considerado razonable por el Gobierno federal. "Nos sentimos contentos por poder liberar a Dexia Banca B¨¦lgica de todos los cargos y de todo riesgo", afirm¨® Leterme en la rueda de prensa.
"Los clientes y los ahorradores pueden estar seguros al 200 % de que su dinero est¨¢ seguro", ha asegurado Leterme, quien tambi¨¦n ha concretado que con este acuerdo tambi¨¦n "el personal de Dexia est¨¢ a salvo".
Horas antes, Leterme ya hab¨ªa dado a entender que el Estado belga estar¨ªa dispuesto a desembolsar entre 3.500 y 8.000 millones de euros para tomar el control de DBB, seg¨²n manifest¨® a la televisi¨®n De Zevende Dag. La edici¨®n digital del peri¨®dico Le Soir apuntaba que la cifra final rondar¨¢ los 4.000 millones de euros, como finalmente ha sido.
El ministro de Finanzas, Didier Reynders, dijo que la soluci¨®n pactada busca proteger a "los ahorradores, accionistas y empleados". Dexia cuenta con activos de unos 518.000 millones de euros y 35.185 empleados, la mayor parte en B¨¦lgica (13.285), Turqu¨ªa (9.348), Luxemburgo (3.763) y Francia (2.314).
Antes del anuncio de nacionalizaci¨®n, Reynders no descartaba que el Estado pudiera llegar a tener el 100% de la propiedad. "Si nosotros estuvi¨¦ramos en un 100%, lo que no excluyo, no tendr¨ªamos voluntad de permanecer indefinidamente". "El papel del Estado", dijo, "es invertir ahora para proteger la actividad" y su continuidad. "No descarto que en tres a?os o quiz¨¢ m¨¢s nosotros podamos ser todav¨ªa propietarios", a?adi¨®. Para el responsable de las finanzas belgas ser¨¢ necesaria la presencia estatal hasta que las cosas se resuelvan. "El Estado apoyar¨¢ el banco en tanto que tenga necesidad", a?adi¨®.
En relaci¨®n con el banco malo que se har¨¢ cargo de los activos da?ados, se repartir¨¢ la carga entre B¨¦lgica, Francia y Luxemburgo. El apoyo en este caso ser¨¢ a trav¨¦s de pr¨¦stamos a largo plazo. En la rueda de prensa de madrugada, Leterme ha confirmado que el banco residual tendr¨¢ activos por 90.000 millones de euros, que ser¨¢n garantizados por los Estados belga (60,5 %), franc¨¦s (36,5 %) y luxemburgu¨¦s (3 %). De este modo, a B¨¦lgica le corresponder¨¢ garantizar unos 54.000 millones de euros, en torno al 15 % del PIB, a Francia 32.850 millones y a Luxemburgo 3.150 millones. El valor contable del 'banco malo' asciende a 180.000 millones de euros, seg¨²n B¨¦lgica.
El Consejo de Administraci¨®n deber¨¢ encontrar una soluci¨®n antes de que los mercados abran este lunes. La cotizaci¨®n de Dexia fue suspendida el pasado jueves a petici¨®n de la Autoridad de Servicios y Mercados Financieros tras conocerse las intenciones de compra del fondo de Catar. En el momento de la suspensi¨®n, los t¨ªtulos de Dexia perd¨ªan un 17%, que se suma a la ca¨ªda del 22% de la jornada anterior. El ¨²ltimo cierre de Dexia fue de 0,845 euros por acci¨®n. Fuentes financieras indicaron que la retirada de dep¨®sitos ya asciende a 1.000 millones.
El Gobierno belga, que convoc¨® una reuni¨®n tras el Consejo de Administraci¨®n del banco, est¨¢ especialmente preocupado por las advertencias de Moody's, que se?al¨® la posibilidad de rebajar su calificaci¨®n, ahora la segunda mejor nota (Aa1). La agencia citaba entre otras razones las incertidumbres por las necesidades de apoyar a Dexia.
El alumno brillante dos veces rescatado
En menos de tres a?os, B¨¦lgica habr¨¢ perdido dos de sus principales instituciones financieras. Primero fue Fortis, que cay¨® tras la desgraciada privatizaci¨®n de la prestigiosa Caja General de Pensiones, que tras una enloquecida expansi¨®n tuvo que ser rescatado por el Estado para acabar en manos de BNP Paribas.
Ahora los contribuyentes deber¨¢n rescatar por segunda vez a Dexia, sin saber cu¨¢l ser¨¢ el futuro que espera a la entidad. En 2008, fue el quinto banco europeo que recibi¨® m¨¢s ayudas p¨²blicas para no quebrar. Los Gobiernos de B¨¦lgica, Francia y Luxemburgo acordaron una inyecci¨®n de capital de 6.400 millones de euros, unas garant¨ªas de 150.000 millones y una l¨ªnea de liquidez de 13.000 millones para adquirir activos da?ados. A ra¨ªz de la intervenci¨®n, el Estado belga es propietario del 5,7% del capital, las tres regiones belgas controlan otro 5,7% y un paquete igual est¨¢ en manos de Francia.
En 2008, las autoridades francesas se opusieron a la creaci¨®n de un banco malo, en contra de la opini¨®n de varios expertos. En el fondo, la crisis de Dexia se basa en que era un banco sin clientes, sin depositantes. Viv¨ªa del mercado interbancario y cuando este se sec¨®, el banco se qued¨® sin fondos. A esto hay que a?adir la devaluaci¨®n de la deuda soberana de Grecia.
Lo m¨¢s fascinante del pelicul¨®n de Dexia es que la entidad sac¨® muy buena nota en las pruebas de solvencia del pasado julio. Entre los bancos con m¨¢s de 100.000 millones de euros en activos ponderados por riesgo, solo dos (Rabobank y Danske Bank) obtuvieron una nota mejor: una solvencia del 10,38% para el escenario m¨¢s adverso.
Dexia public¨® en agosto unas p¨¦rdidas trimestrales de m¨¢s de 4.000 millones de euros, las mayores de su historia, como consecuencia del deterioro de su cartera de deuda griega. Esos resultados ya pusieron de manifiesto que algo no cuadraba con las pruebas europeas. Y lo que no cuadraba era, precisamente, que no contemplaban la hip¨®tesis de un impago de la deuda por parte de ning¨²n pa¨ªs.
Solo una semana despu¨¦s de la publicaci¨®n de los ex¨¢menes, la UE y los principales bancos y aseguradoras perge?aron una reestructuraci¨®n "voluntaria" de la deuda griega que implica una quita del 21%. Tras el agravamiento de la crisis, es probable que la participaci¨®n privada en el rescate sea a¨²n mayor.
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