Bal¨®n de ox¨ªgeno
Los bancos europeos deben conseguir 700.000 millones de euros en el mercado solo en 2012
El pasado 9 de diciembre se reunieron los l¨ªderes de la Uni¨®n Europea para acometer las reformas necesarias de los tratados para la resoluci¨®n de la crisis del euro. Los confusos y conflictivos resultados de aquellas reuniones no hace falta recordarlos. Pero el paso fundamental para resolver la crisis se hab¨ªa dado en otro lugar, en otro momento: el d¨ªa anterior a la cumbre el Banco Central Europeo (BCE) hab¨ªa anunciado las subastas de liquidez a tres a?os y la expansi¨®n de los avales admisibles para las operaciones de descuento.
Estas subastas de liquidez tienen la peculiar caracter¨ªstica de que el BCE facilita todo lo que se demande, la famosa barra libre. Con estas subastas el BCE dota de una estabilidad enorme al sistema bancario europeo, que podr¨¢ utilizar dicha liquidez para satisfacer el vencimiento de la deuda emitida para los pr¨®ximos a?os. Esto elimina de una vez el mayor peligro al que se enfrentaba el sistema financiero europeo: la refinanciaci¨®n del enorme volumen de deuda bancaria que venc¨ªa en los pr¨®ximos meses, imposible con los mercados de deuda completamente atascados. Los bancos europeos deben conseguir 700.000 millones de euros en el mercado solo en 2012, de los que 360.000 millones son en los primeros tres meses. No es sorprendente por tanto el casi medio bill¨®n de euros que han solicitado del BCE en la subasta del 21 de diciembre.
Los bancos no solo pueden satisfacer los vencimientos de su deuda; tambi¨¦n pueden financiarse al 1% en la mencionada subasta e invertir en deuda soberana de los Estados perif¨¦ricos, capturando el diferencial y, reforzando as¨ª sus balances mediante este subsidio enorme que reciben del amable contribuyente europeo. Adem¨¢s, como apunt¨® el propio presidente Sarkozy, de esta manera los Estados pueden financiarse a trav¨¦s de los balances bancarios. Es decir, el BCE mata varios p¨¢jaros de un tiro: elimina el problema de liquidez del sistema financiero, contribuye a que los bancos se saneen con este diferencial que capturan, y reduce el coste de la financiaci¨®n de los Estados.
Y todo esto es particularmente beneficioso para nuestro pa¨ªs, para el que esta decisi¨®n del BCE constituye un bal¨®n de ox¨ªgeno que har¨ªamos bien en no desaprovechar.
Los pa¨ªses perif¨¦ricos deben sacar partido a la decisi¨®n del BCE y huir de las 'reformillas'
Efectivamente, lo que preocupa a los inversores extranjeros en lo que a nuestro pa¨ªs se refiere es precisamente las dudas que persisten sobre nuestro sistema financiero y la posibilidad de que el Estado, poco a poco, se tenga que hacer cargo de sus p¨¦rdidas: que Espa?a acabe como Irlanda. Es este miedo, junto con el d¨¦ficit p¨²blico, lo que est¨¢ detr¨¢s de nuestro alto diferencial. El BCE, con sus decisiones del 8 de diciembre, reduce el riesgo de este escenario. El Reino de Espa?a no tendr¨¢ que asumir en una situaci¨®n de urgencia la refinanciaci¨®n de los pasivos bancarios. Si nuestras entidades con problemas de liquidez consiguen financiaci¨®n por esta v¨ªa y solucionan sus problemas de vencimientos para los pr¨®ximos a?os y, adem¨¢s, se cargan de deuda soberana para capturar ese diferencial y generar beneficios, se elimina una fuente de inestabilidad para nuestra econom¨ªa.
En cuanto al d¨¦ficit p¨²blico, tambi¨¦n puede ser el programa del BCE particularmente beneficioso para Espa?a, dado el gran tama?o de los balances bancarios comparado con nuestras necesidades de refinanciaci¨®n de deuda p¨²blica; y menos para Italia, cuyas necesidades de financiaci¨®n son tales que puede que los bancos no puedan o quieran endeudarse lo bastante para resolver los problemas de financiaci¨®n del Estado italiano. Esto es lo que est¨¢ detr¨¢s de la mejora del diferencial espa?ol frente al italiano.
El nuevo Gobierno espa?ol llega con 'un pan debajo del brazo' y esto es lo que hay que aprovechar
Llega, por tanto, el nuevo Gobierno con un pan debajo del brazo y esto es lo que hay que aprovechar. Que de este regalo que nos env¨ªa el contribuyente europeo por obra y gracia del BCE no se beneficie solo al accionariado de los bancos sino tambi¨¦n a los espa?oles. Es importante que el Banco de Espa?a y el Gobierno hagan lo necesario para asegurar que el cr¨¦dito llega a donde tiene que llegar, y que las instituciones financieras no se limitan a invertir en el negocio f¨¢cil de la deuda p¨²blica (para el Estado apetitoso).
Pero a¨²n m¨¢s importante es asegurarse de que los pa¨ªses perif¨¦ricos, en especial Espa?a, utilizan este bal¨®n de ox¨ªgeno de tres a?os como una oportunidad para hacer las reformas que necesitamos para modernizar la econom¨ªa. Los pa¨ªses del Norte temen que cualquier bajada de la presi¨®n que sufrimos meta las reformas en v¨ªa muerta. Y tal preocupaci¨®n no es extra?a: durante el periodo de boom inducido por el euro, Espa?a no hizo pr¨¢cticamente nada para modernizar y flexibilizar los escler¨®ticos mercados de bienes y servicios que sufre nuestro pa¨ªs, o para incrementar la cualificaci¨®n de los j¨®venes o la capacidad de innovaci¨®n de nuestras burocratizadas universidades. El Gobierno debe ser capaz de superar la tentaci¨®n de las reformillas y la paz social a corto plazo, que solo augura m¨¢s estancamiento futuro, y hacer estas reformas de una vez aunque tengan un coste m¨¢s elevado en el corto plazo.
La oportunidad que ahora se abre es ¨²nica. ?Seremos capaces de hacerlo sin estar sometidos a una presi¨®n diaria de vida o muerte?
Luis Garicano es catedr¨¢tico de Econom¨ªa y Estrategia en la London School of Economics y dirige la c¨¢tedra McKinsey de FEDEA. Tano Santos es catedr¨¢tico de Finanzas y Econom¨ªa en Columbia y director de la c¨¢tedra Abertis de FEDEA.
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