Monti: "Espa?a est¨¢ dando a toda Europa motivos de gran preocupaci¨®n"
El Gobierno italiano matiza las palabras de su jefe tras el malestar de La Moncloa
![El primer ministro italiano, en el encuentro con empresarios en Cernobbio.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/X7KDI4MKITQ6T6PBFBVDY55DXA.jpg?auth=c6638acd1033becb23c5124d7fd02e97428ecac33a43c566b381229cc47a1680&width=414)
Mario Monti lanz¨® este s¨¢bado una sonora llamada de atenci¨®n al Gobierno de Mariano Rajoy: ¡°Espa?a est¨¢ dando a toda Europa motivos de gran preocupaci¨®n porque sus tasas de inter¨¦s suben. No hace falta mucho para recrear fen¨®menos que, a trav¨¦s del contagio, nos puedan afectar a nosotros¡±. Aunque hace un mes el primer ministro italiano recibi¨® a su hom¨®logo espa?ol en Roma y elogi¨® su pol¨ªtica econ¨®mica, ahora ya no lo parece tener tan claro: ¡°Ser¨ªa muy desagradable que nos dieran la espalda. Una nueva crisis en la eurozona nos podr¨ªa hacer perder meses¡¡±.
El jefe del Gobierno tecn¨®crata aprovech¨® un foro organizado en Cernobbio (norte de Italia) por la Confederaci¨®n General de la Empresa (Confcomercio) para dejar por una vez la diplomacia a un lado y lanzar un correctivo a su colega Rajoy. ¡°Estamos muy atentos¡±, dijo, ¡°ante algunos pa¨ªses que no han tomado las decisiones dr¨¢sticas que s¨ª hemos tomado nosotros. Espa?a ha hecho una reforma laboral muy incisiva, pero no ha prestado la misma atenci¨®n a las cuentas p¨²blicas¡±. Nada m¨¢s llegar al Gobierno, Monti aprob¨® un decreto que llam¨® Salva Italia y que supone un ajuste de 30.000 millones de euros entre 2012 y 2014 ¡ªse reducir¨¢n gastos por valor de 12.000 millones y se aumentar¨¢ la recaudaci¨®n en 18.000¡ª. La medida m¨¢s traum¨¢tica, que tom¨® sin pactar ni con partidos ni sindicatos, fue el recorte de los derechos adquiridos de los pensionistas.
Mario Monti, que justo el viernes aprob¨® en Consejo de Ministros una reforma laboral que amenaza con romper el apoyo mayoritario con el que hasta ahora contaba, tambi¨¦n se despach¨® a gusto contra Silvio Berlusconi, a quien hasta ahora ha tratado con guante de seda. El actual primer ministro reproch¨® a su antecesor la ¡°tardanza en reconocer el problema¡± de la crisis. ¡°Lo digo¡±, a?adi¨®, ¡°como ciudadano que se siente agraviado por esa omisi¨®n que nos ha llevado al hecho de que hoy en d¨ªa sea m¨¢s dif¨ªcil poner a Italia en la v¨ªa del crecimiento y nos ha obligado a subir los impuestos¡±.
La inusual, por dura, forma de expresarse de Monti sorprendi¨® a los empresarios reunidos en Cernobbio. ¡°No nos enga?emos: la crisis es el resultado de la falta de decisiones durante las ¨²ltimas d¨¦cadas. No saldremos ni en cinco meses ni en un a?o. El pa¨ªs no est¨¢ en una situaci¨®n de hacer promesas¡±, a?adi¨®. Cuando acab¨® su intervenci¨®n, el auditorio, en vez de aplaudir, guard¨® silencio. Solo entonces recobr¨® el ex comisario europeo su retranca para romper la tensi¨®n: ¡°Estoy seguro de que este silencio significa un gran aplauso¡±.
La intervenci¨®n de Monti sent¨® como un tiro en el Gobierno espa?ol (PP). La Moncloa traslad¨® su malestar al Ejecutivo italiano, aunque Monti y Rajoy no hablaron directamente. Las declaraciones se entendieron desde Madrid como ¡°muy inoportunas¡± y as¨ª se lo hicieron saber a Roma, informa Carlos E. Cu¨¦.
Despu¨¦s de unas horas de pol¨¦mica, el Ejecutivo espa?ol logr¨® que Italia emitiera una nota. La portavoz del primer ministro, Elisabetta Olivi, envi¨® un comunicado a los corresponsales espa?oles en Italia subrayando la ¡°plena confianza¡± de su jefe en el Gobierno espa?ol. M¨¢s que por lo que dice de su gesti¨®n ¡ªque Italia ha hecho un esfuerzo y que ¡°ya no es una fuente de infecci¨®n¡± para otros pa¨ªses de la eurozona¡ª, por tener que decirlo. Cuando un jefe de prensa o un portavoz tiene que saltar al ruedo para hacerle el quite a su jefe, malo. Desde el lado espa?ol, es evidente que el malestar no se va a diluir tan f¨¢cilmente y mucho menos la preocupaci¨®n sobre el efecto que las palabras del primer ministro italiano puedan tener en los mercados.
Mario Monti, que lleg¨® al Gobierno de Italia el 16 de noviembre de 2011 para intentar solucionar la desastrosa situaci¨®n en que hab¨ªa dejado al pa¨ªs Silvio Berlusconi, ha gozado hasta ahora de un salvoconducto expedido por pr¨¢cticamente todos los partidos parlamentarios. Esa licencia para hacer el trabajo sucio puede caducar en los pr¨®ximos d¨ªas, cuando someta a la confianza de diputados y senadores la reforma laboral aprobada el pasado viernes. Los sindicatos est¨¢n dispuestos a parar el pa¨ªs y la izquierda de Pier Luigi Bersani se ver¨¢ en la dif¨ªcil coyuntura de seguir apoyando a Monti o alinearse al lado de los trabajadores. Su ataque ¡ªmatizado o no¡ª a la actuaci¨®n de Rajoy y sus cr¨ªticas ¡ªpor primera vez a cielo abierto¡ª hacia Berlusconi reflejan sin lugar a dudas un alto estado de preocupaci¨®n.
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