?Nos atracan? Bien, pero h¨¢ganlo en condiciones

Las nuevas ayudas p¨²blicas a BFA-Bankia son un atraco al Tesoro. Un atraco al bolsillo del contribuyente. Lo son por su cuant¨ªa. Si culminan los planes del Gobierno, el total de apoyo p¨²blico al grupo, europeo y espa?ol, ascender¨¢ a 82.965 millones de euros.

Referencia comparativa: una cifra superior al d¨¦ficit de la Administraci¨®n central y de las comunidades aut¨®nomas, que ascendi¨® en 2011 a 82.107 millones. No se acaloren. De los apoyos a BFA-Bankia, no todo son inyecciones en vena de capital.

Hay avales del Tesoro, dispensandos desde 2008 a las cajas hoy fusionadas, por 28.500 millones. Hay cr¨¦ditos blandos del BCE, al 1%, por 40.000 millones (15.000 en diciembre y 25.000 en febrero). Hay una suscripci¨®n de 4.465 millones en preferentes, remuneradas al 8%, por el FROB-I: ahora, como pide Jos¨¦ Ignacio Goirigolzarri y se concedi¨® de antemano, se trocar¨¢n en acciones, sujetas al riesgo de una dif¨ªcil recuperaci¨®n. Y si se a?adiesen los 10.000 millones extra que preve¨ªa el Gobierno, sumar¨ªan esos 82.965 millones.

?Que implica esa cifra? En lo econ¨®mico, es obvio que no hubiese enjugado el d¨¦ficit y que por tanto no se necesitasen recortes, aunque algunos s¨ª podr¨ªan evitarse. Pero s¨ª que conlleva un coste de oportunidad: esos recursos podr¨ªan haberse dedicado a otros fines, tan o m¨¢s urgentes en era de crisis.

En lo pol¨ªtico, se trata de una herencia legada por dos Administraciones populares: Miguel Blesa/Comunidad de Madrid/Esperanza Aguirre y Jos¨¦ Luis Olivas/Comunidad Valenciana/Paco Camps & antecesores. Una herencia catastr¨®fica, con consejeros de partido, fricciones de facciones del partido y utilizaci¨®n de las cajas como cajas B de las autonom¨ªas para proyectos grandilocuentes, del control de Iberia a la financiaci¨®n del agujero negro de Terra M¨ªtica... incluido el pago por el filial Banco de Valencia de la fianza de tres millones de Jaume Matas, el presidente balear condenado por corrupci¨®n. (Una s¨ªntesis, en Donde digo liberalismo..., en estas p¨¢ginas, 12 de mayo de 2011).

Una herencia del PP al PP recibida por Rodrigo Rato, quien pugn¨® por desinfectarla ¡ªcon sacrificios, 3.857 despidos, cierre de 853 sucursales¡ª, pero era tarde. Y que incub¨® errores: juntar siete cajas malas, que no dieron una buena; mantener a demasiados correligionarios en los consejos y rechazar la fusi¨®n con La Caixa, por no dar primac¨ªa a la entidad catalana.

Las ayudas irritan. Es de ley que la oposici¨®n proteste. Pero ?cu¨¢l es la alternativa? ?Dejar quebrar a BFA/Bankia?

Algunos lo postulan para los bancos sist¨¦micos, too big to fail, demasiado grandes para caer. Otros, como Simon Johnson, matizan: ¡°La soluci¨®n correcta es obvia: no dejar que las instituciones financieras se conviertan en demasiado grandes; recortar las que lo son¡± (¡°13 bankers¡±, Random House, 2010).

Ya es tarde para eso. Y se entiende que al Gobierno le aterrorice un caso Lehman, o repetir la quiebra de los bancos islandeses: el perjuicio fue peor, y a¨²n m¨¢s injusto, que la injusta ayuda a los bancos en crisis.

Pero las ayudas son muy relevantes y la entidad muy grande. Y la auditor¨ªa de Deloitte apunta a una situaci¨®n de pr¨¢ctica quiebra t¨¦cnica en BFA ¡ªpor consunci¨®n del capital¡ª, y la presi¨®n de la morosidad y de los vencimientos de los 106.350 millones de deuda es asfixiante. Parece pues que deber¨ªa tratarse el caso con m¨¢s contundencia que los de las cajas peque?as/medianas hasta ahora sometidas al t¨²rmix del FROB. O sea, dispensar las nuevas ayudas en condiciones. Con m¨¢s duras condiciones:

• Reducci¨®n del capital a cero. La ayuda p¨²blica solo se justifica tras agotar todo el capital privado del grupo. O sea, reducir el valor de las acciones a un euro, como en las crisis bancarias de los ochenta. Bankia ya no es una caja ben¨¦fica, sino un negocio a riesgo, como lo eran Urquijo, Catalana o Banesto.
• Una explicaci¨®n detallada del Gobierno, el Banco de Espa?a y los dos Ejecutivos auton¨®micos sobre el origen, causas y desarrollo de la crisis y sobre la soluci¨®n elegida y, en su caso, asunci¨®n de responsabilidades.
• Venta o troceamiento. La nacionalizaci¨®n transitoria debe servir para sanear el activo (no solo los 31.400 millones de ladrillo hoy dudoso) y desinsectarlo de politiquer¨ªa: Olivas, uno de los grandes culpables, sigue atrincherado en Bancaja. Y para evaluar no solo su futura venta, sino tambi¨¦n su troceamiento, quiz¨¢ la mejor v¨ªa de sajar sus males y permitirle generar negocio recurrente, que hoy no puede. Hay precedentes en varios pa¨ªses de la UE: Fortis, Dexia...
• Responsabilidades. Encargar al Banco de Espa?a, y en su caso a la jurisdicci¨®n, el deslinde de responsabilidades administrativas y de todo tipo de quienes crearon el problema. No de quienes lo afrontaron sin ¨¦xito.

Al menos.