Facebook marca un hito en Bolsa a pesar de un estreno burs¨¢til poco brillante

Facebook protagoniz¨® este viernes el estreno burs¨¢til m¨¢s esperado en la historia reciente de Wall Street, pero tambi¨¦n el m¨¢s tenso por los problemas t¨¦cnicos del Nasdaq. Esa circunstancia agu¨® el ¨¦xito de la colocaci¨®n de la segunda firma m¨¢s poderosa en Internet. Comienza as¨ª, aunque con un discreto alza de solo el 0,6%, una nueva etapa para la joven sociedad de Menlo Park, en la que deber¨¢ demostrar a los inversores que su visi¨®n social es compatible con la rentabilidad de su negocio. La Bolsa puso este viernes por primera vez precio a la empresa: m¨¢s de 104.000 millones de d¨®lares (82.000 millones de euros).

La red social empez¨® a cotizar a 42,05 d¨®lares el t¨ªtulo, frente a los 38 d¨®lares en los que se fij¨® la oferta. De inmediato subi¨® hasta superar los 43 d¨®lares. Pero a partir de ah¨ª, perdi¨® fuelle. La situaci¨®n oblig¨® dos veces a los bancos participantes en la colocaci¨®n a hacer lo posible para evitar que los n¨²meros se tornaran rojos. El valor de la acci¨®n se estabiliz¨® las primeras horas en 41 d¨®lares, pero termin¨® el d¨ªa solo 20 centavos por encima de su salida, en 38,2 d¨®lares (29,8 euros).

Prueba de la decepci¨®n vivida este viernes fue que los t¨ªtulos de Zynga (la secci¨®n de juegos), cayeron casi un 12% en la jornada. Pero m¨¢s all¨¢ de los problemas t¨¦cnicos, el mercado estaba mandando una se?al a los gestores de Facebook: ahora deben probar que su capitalizaci¨®n burs¨¢til se justifica.

Nunca antes una empresa se estrenaba en Wall Street con una valoraci¨®n tan alta. El precio que se pag¨® este viernes por sus acciones estuvo en todo momento por debajo de los 44,1 d¨®lares de la ¨²ltima transacci¨®n en el mercado secundario. El que quiera comprar sus acciones, es porque cree que el fundador, Mark Zuckerberg, tiene la p¨®cima para seguir creciendo. Insiste en que no va a gestionar la compa?¨ªa para ganar dinero, sino para hacer dinero con el que crear servicios. Hasta ahora, Facebook ha demostrado que puede seguir creciendo. Pero su valoraci¨®n de partida es casi 100 veces superior al ingreso de primer trimestre, que rond¨® los 1.060 millones de d¨®lares. Eso equivale a 1,2 d¨®lares por usuario (tiene m¨¢s de 900 millones). General Motors decidi¨® esta semana dejar de poner publicidad en la red social, porque considera que no tiene ning¨²n efecto. Ford Motor, sin embargo, considera lo contrario.

Ideas enfrentadas que tuvieron reflejo en el primer d¨ªa de cotizaci¨®n. Facebook, en todo caso, parece indestructible en el futuro cercano. Pero como AOL, Yahoo! y Google, su futuro depende cada vez m¨¢s de la publicidad, que en el primer trimestre gener¨® el 82% de los ingresos. Con los mil millones de usuarios que alcanzar¨¢ en verano, el alcance ser¨¢ como el de la televisi¨®n en su momento m¨¢s incipiente. Entonces se trat¨® tambi¨¦n de ver como el nuevo medio de comunicaci¨®n podr¨ªa generar negocio. Y las mismas preguntas se trazaron con Google, cuando debut¨® en el verano de 2004 con una colocaci¨®n diez veces inferior. Los analistas coinciden al se?alar que Facebook representa a una nueva generaci¨®n, como sucedi¨® tambi¨¦n en marzo de 1986 cuando se estren¨® la inform¨¢tica Microsoft. Pero choca que en su estreno valiera tanto como Merk, casi un cuatro m¨¢s que Disney y el doble que Caterpillar.

Facebook salta al Nasdaq cuando se cumple primer el aniversario desde que LinkedIn debutara en el NYSE. La plataforma de contactos profesionales fue la primera puntocom estadounidense en la arena de las redes sociales que se estren¨® en Wall Street y lo hizo duplicando su capitalizaci¨®n. En el caso de Groupon fue diferente y est¨¢ teniendo gran dificultad para demostrar a los inversores que su negocio es rentable y duradero.

Lo que est¨¢ por ver, por tanto, es si Facebook es capaz de mantener el ritmo actual de crecimiento (46,8% entre 2010 y 2011). Incluso si lo hace por encima del 30% ser¨¢ convincente. De momento, el estreno pasar¨¢ a la historia como discreto, porque no se produjo el repunte que muchos anticipaban.