?La CAM?, pregunten al director general
La c¨²pula pol¨ªtica de la caja que tuvo que ser intervenida por el FROB traslada la responsabilidad del naufragio al equipo que dirig¨ªa L¨®pez Abad
¡°Cuando llegamos, la CAM era un politraumatizado¡±. Jos¨¦ Antonio Iturriaga, administrador por encargo del Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB) de Caja Mediterr¨¢neo o, mejor dicho, del Banco CAM tal y como se denomina tras la segregaci¨®n de la obra social, no se fue por las ramas. En la comisi¨®n creada por las Cortes Valencianas para investigar qu¨¦ pas¨® con una de las joyas del devastado sistema financiero valenciano, explic¨® que con el cambio de direcci¨®n en 2001 ¡ªfecha en que lleg¨® a ella Roberto L¨®pez Abad¡ª la entidad emprendi¨® ¡°una huida hacia adelante¡±. Le llev¨® a un crecimiento del cr¨¦dito de m¨¢s del 300% y a una incidencia en el negocio del ladrillo tan agresiva que, de 53.000 millones de euros en pr¨¦stamos concedidos, s¨®lo 1.000 millones eran ajenos al sector inmobiliario.
El administrador desgran¨® los males: una morosidad demasiado alta, excesiva dependencia de los mercados mayoristas, ¡°deficiencias significativas¡± en el sistema de control... Los diputados se revolvieron en sus asientos. Hasta el punto de que consideraron innecesario citar a los otros dos administradores del FROB, Tom¨¢s Gonz¨¢lez Pe?a y Benicio Herranz. El 2 de mayo empez¨® un largo calendario de comparecencias al que se han negado a someterse el gobernador del Banco de Espa?a, Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, y otros responsables del organismo supervisor, pero por el que han pasado ya dos directores del Instituto Valenciano de Finanzas para decir que no ten¨ªan competencias sobre la entidad.
El expresidente de la entidad carece de conocimientos financieros
Salvar la CAM, tras la intervenci¨®n por el Banco de Espa?a en julio de 2011, ha exigido del Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos una inyecci¨®n de 5.249 millones. Y seg¨²n Iturriaga, que cit¨® el pliego de cargos del Banco de Espa?a contra sus gestores (que pueden ser inhabilitados por 10 a?os), hubo ¡°pr¨¢cticas reprobables y no autorizadas¡±. A la espera de que el Banco de Sabadell se haga cargo de la entidad, su actual administrador anunci¨® una demanda, cuyo ¨¢mbito no precis¨®, sobre los directivos de la CAM ¡°en fechas pr¨®ximas¡± por las improcedentes indemnizaciones que se aplicaron.
Tampoco se cort¨® Iturriaga al opinar que los consejos de administraci¨®n de las cajas, con el peso de la designaci¨®n pol¨ªtica de sus miembros, ¡°adolecen de falta de conocimiento, profesionalidad e independencia¡±. Para ratificarlo, s¨®lo hubo que seguir, en las sucesivas sesiones de la comisi¨®n, las intervenciones de quienes formaban la c¨²pula de la caja. ¡°Representar institucionalmente a la entidad¡± era toda la funci¨®n de su cargo, declar¨® el presidente de la CAM, Modesto Crespo, un hombre muy pr¨®ximo al exjefe del Gobierno valenciano Francisco Camps, ante unos parlamentarios que a duras penas conten¨ªan su estupefacci¨®n cuando a?adi¨® que carec¨ªa de conocimientos financieros.
Por m¨¢s que el socialista ?ngel Luna, la diputada de Comprom¨ªs Mireia Moll¨¤ o el diputado de Esquerra Unida Llu¨ªs Torr¨® se esforzaran por mostrar su incredulidad (el popular David Serra estaba m¨¢s preocupado por se?alar al Banco de Espa?a y eximir a la Generalitat Valenciana de cualquier interferencia), Crespo neg¨® conocer cu¨¢nto cobraban los directivos y dej¨® sin explicar por qu¨¦ se autoconcedi¨® retroactivamente dietas de 300.000 euros en una empresa participada por la caja. Quien presidi¨® la CAM en un periodo en el que pas¨® de declarar 244 millones de beneficios a finales de 2010 a 1.136 millones en p¨¦rdidas seis meses despu¨¦s, ech¨® balones fuera, pero dej¨® el m¨¢s importante en el tejado de la direcci¨®n general.
Los ex directores generales, L¨®pez Abad y Amor¨®s, comparecen ma?ana en las Cortes Valencianas
Su vicepresidente primero, ?ngel Mart¨ªnez, tuvo menos escr¨²pulos a la hora de se?alar con el dedo al director general. Aparte de atribuir su desgracia, como todos los responsables de la CAM que han pasado hasta ahora por la comisi¨®n, al fracaso del sistema institucional de protecci¨®n (SIP) con Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura (algo que ocurri¨® porque el consejo de administraci¨®n se neg¨® a evaluar a la baja los activos que la entidad alicantina aportaba al denominado Banco Base), Mart¨ªnez insisti¨® en que todo lo que llegaba al consejo de la CAM ven¨ªa informado favorablemente por el equipo directivo encabezado hasta 2010 por L¨®pez Abad y posteriormente por Mar¨ªa Dolores Amor¨®s. ¡°Nuestra labor era analizar, dirigir y gestionar la obra social¡±, aleg¨® este consejero de confianza del presidente murciano, Ram¨®n Luis Valc¨¢rcel. Tuvieron que recordarle (lo hizo el socialista Luna) que cobraba unos 100.000 euros anuales en dietas de empresas participadas por la CAM. Benito Jos¨¦ Nemesio, vicepresidente segundo, se escud¨® tambi¨¦n en que carec¨ªa de conocimientos para evaluar las operaciones que pasaban por el consejo y Armando Sala, que fue vicepresidente antes de que lo desplazaran por su adscripci¨®n zaplanista en las guerras internas del PP, lleg¨® a apuntar que las actas de los consejos no est¨¢n claras. ¡°No se ajustan a la realidad¡±, se?al¨®.
No es de extra?ar que la expectaci¨®n sea m¨¢xima para la sesi¨®n de la comisi¨®n parlamentaria que se celebrar¨¢ ma?ana, en la que est¨¢n citados L¨®pez Abad y Amor¨®s. En la sala todav¨ªa resuena la voz de Iturriaga, el administrador, cuando afirm¨® tajante que la CAM no habr¨ªa sobrevivido aunque no se hubiera desencadenado la crisis econ¨®mica global y que habr¨ªa arrastrado a sus socios si hubiera culminado la fusi¨®n fr¨ªa en el SIP.
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