Argentina extiende las restricciones cambiarias a pensionistas espa?oles
El Gobierno de Fern¨¢ndez limita a los jubilados la compra de d¨®lares y euros Hay 24.000 personas residentes en Argentina que reciben pensiones de Espa?a La medida afecta tambi¨¦n a 80.000 personas con pensiones italianas
Argentina ha emprendido desde hace varios meses una batalla contra la salida de d¨®lares del pa¨ªs. Necesita mantener un super¨¢vit de 10.000 millones de d¨®lares al a?o para no verse obligada a pedir dinero en el extranjero, ya que pagar¨ªa unos intereses elevad¨ªsimos. Y para mantener el super¨¢vit el Gobierno intenta convencer a los ciudadanos de que deben dejar de ahorrar en d¨®lares. Desde principios de julio, las restricciones se extienden a jubilados que reciben pensiones de pa¨ªses extranjeros, como Italia y Espa?a, a los que antes se dejaba cambiar pesos sin limitaciones.
La propia presidenta, Cristina Fern¨¢ndez, quiso dar ejemplo el 6 de junio y anunci¨® que convertir¨ªa en pesos sus ahorros en divisas, valorados en tres millones de d¨®lares. Semana a semana el Gobierno ha ido estrechando el cerco contra la salida de divisas en lo que la oposici¨®n y la prensa m¨¢s cr¨ªtica han bautizado como cepo o corralito cambiario. En octubre los argentinos se vieron obligados a rellenar un formulario cada vez que deseaban comprar d¨®lares. La Administraci¨®n Federal de Ingresos P¨²blicos (AFIP), el equivalente a la Hacienda espa?ola, determinaba si autorizaba la compra o no.
Sin embargo, a los pensionistas que percib¨ªan su dinero desde pa¨ªses extranjeros no les afectaba la medida. Los bancos en donde cobraban en Argentina les convert¨ªan los pesos a la moneda que deseasen. Pero desde el pasado 5 de julio, esos jubilados no podr¨¢n ya comprar d¨®lares ni euros, como ven¨ªan haciendo hasta ahora. Debido a la disparidad que existe entre el cambio oficial y el paralelo, disponible en cientos de locales repartidos por todo el pa¨ªs, la medida significa perder hasta un 40% de ingresos.
Las restricciones pueden suponer la p¨¦rdida del 40% de ingresos por la aplicaci¨®n del tipo oficial
En la actualidad unas 80.000 personas reciben pensiones desde Italia y unas 24.000 desde Espa?a. De estas ¨²ltimas, 7.000 son contributivas que perciben el equivalente a unos 500 euros anuales como promedio. En su mayor¨ªa se trata de personas que contribuyeron con su trabajo a las arcas p¨²blicas de los dos pa¨ªses y ahora Espa?a y Argentina les pagan de forma prorrateada un salario mensual.
En cuanto a las 17.000 pensionistas restantes, reciben desde Espa?a el dinero necesario hasta completar la renta m¨ªnima de subsistencia argentina, cifrada en 4.500 euros anuales. Solo pueden acceder a ellas quienes hayan nacido en Espa?a o al menos hayan residido diez a?os en el pa¨ªs. En total son 50 millones de euros los que llegan desde Espa?a a Argentina: 25 para las pensiones contributivas y 25 para llegar a la renta m¨ªnima de subsistencia.
La ruptura del acuerdo de doble imposici¨®n tambi¨¦n amenaza con reducir las pensiones
El caso ha provocado ya varias denuncias ante la Defensor¨ªa de la Tercera Edad, dependiente de la Defensor¨ªa del Pueblo de la ciudad de Buenos Aires, seg¨²n public¨® el diario La Naci¨®n el pasado 14 de julio. En las dos ¨²ltimas semanas se han producido numerosas consultas de jubilados en las embajadas de Italia y Espa?a.
A quienes perciben pensiones desde Espa?a se les puede sumar ahora un problema sobrevenido con la decisi¨®n de Argentina de romper el acuerdo fiscal con Espa?a para evitar la doble imposici¨®n. Este convenio, que se hab¨ªa firmado en 1992 y llevaba en vigor desde 1994, fue denunciado por el Gobierno argentino el pasado 29 de junio y dejar¨¢ de estar vigente a partir del 1 de enero de 2013. La ruptura del acuerdo fiscal, que afectar¨¢ sobre todo a las empresas espa?olas radicadas en Argentina, tambi¨¦n podr¨ªa acarrear consecuencias sobre los pensionistas. Algunos expertos fiscales creen que desde enero esos 24.000 jubilados podr¨ªan ver mermadas sus pensiones con un 8% de recarga fiscal en Espa?a.
La pesificaci¨®n afecta a todos los argentinos, no solo a los pensionistas que perciben su dinero desde el extranjero. El mes pasado, el anciano Julio C¨¦sar Dur¨¢n denunci¨® al Estado tras ver frustrada su intenci¨®n de comprarles diez d¨®lares como regalo a sus nietos. Cristina Fern¨¢ndez lo tach¨® de "amarrete", agarrado, durante un discurso retransmitido por todos los canales de televisi¨®n del pa¨ªs: "Le¨ª ayer, por ejemplo, en el diario El Popular, un abuelo, un abuelito, abogado, me acuerdo el nombre porque Julio C¨¦sar me impresion¨® y Dur¨¢n era un amigo m¨ªo de La Plata, el juez que falleci¨®, Julio C¨¦sar Dur¨¢n, un abuelito que hab¨ªa decidido presentar un amparo porque quer¨ªa regalarle a los nietitos 10 d¨®lares porque eran abanderados. Primero, un abuelito medio amarrete porque, la verdad, que si es abogado, 45 pesos o 49 pesos, regalarles a dos nietitos¡ La verdad que yo hubiera hecho un esfuercito m¨¢s, ya en orden...Me son¨® m¨¢s, siendo abogado y siendo abogada yo tambi¨¦n y conociendo el pa?o y a los colegas, me son¨® m¨¢s a preparar la chapita para luego comenzar con la industria del juicio, a la que son tan afectos". Julio C¨¦sar Dur¨¢n respondi¨® en la prensa diciendo que no era agradable el mote de amarrete.
De momento, ning¨²n jubilado ha vuelto a reclamar en p¨²blico el fin de las restricciones cambiarias.
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