El est¨ªmulo del iPhone
Algunos informes atribuyen al nuevo producto de Apple la capacidad para estimular la econom¨ªa
?Son ustedes, o alguien que conozcan, unos fan¨¢ticos de los aparatos? Si es as¨ª, saben sin duda que el mi¨¦rcoles fue el d¨ªa del iPhone 5, el d¨ªa que Apple dio a conocer su manera m¨¢s reciente de evitar que la gente hable realmente, o mire siquiera, a quienquiera que est¨¦ con ella.
Entonces, ?es el nuevo tel¨¦fono tan incre¨ªblemente maravilloso como dice Apple que es? Bueno, dejar¨¦ este tipo de cosas a David Pogue. A m¨ª, en cambio, lo que me interesa son las insinuaciones de que el lanzamiento del iPhone 5 podr¨ªa suponer un importante est¨ªmulo para la econom¨ªa estadounidense y contribuir notablemente al crecimiento econ¨®mico a lo largo del pr¨®ximo trimestre o de los dos siguientes.
?Les parece esto plausible? Si es as¨ª, tengo una noticia para ustedes: son, tanto si lo saben como si no, unos keynesianos, y han aceptado impl¨ªcitamente el argumento de que el Gobierno deber¨ªa gastar m¨¢s, no menos, en una econom¨ªa deprimida.
Antes de llegar a ese punto, vamos a hablar de d¨®nde viene el rumor.
Una reciente nota de investigaci¨®n de JPMorgan sosten¨ªa que el nuevo iPhone podr¨ªa a?adir entre un cuarto y medio punto porcentual al crecimiento del PIB en el ¨²ltimo trimestre de 2012. ?C¨®mo? En primer lugar, el informe manten¨ªa que era probable que Apple vendiera muchos tel¨¦fonos en un corto periodo de tiempo. En segundo lugar, se?alaba que, aunque los iphones se fabrican en el extranjero, la mayor parte del precio que ustedes pagan cuando compran uno tiene un valor a?adido nacional ¡ªla venta minorista y mayorista, la publicidad y los beneficios¡ª que se contabiliza como parte del PIB. Por ¨²ltimo, tomaba algunas suposiciones plausibles sobre el precio de cada tel¨¦fono y el n¨²mero de tel¨¦fonos vendidos y usaba esas estimaciones para calcular el impacto sobre el PIB.
Si usted cree que el nuevo tel¨¦fono puede promover el crecimiento, lo sepa o no usted es keynesiano
Todo es bastante sencillo. Pero las implicaciones son mayores de lo que la gente piensa. Lo que es fundamental entender aqu¨ª es que estos posibles beneficios a corto plazo del nuevo tel¨¦fono no tienen casi nada que ver con lo bueno que es, ni con lo mucho que mejora la calidad de las vidas de los compradores o su productividad. Esos efectos solo se notar¨¢n a largo plazo. En vez de ello, la raz¨®n por la que JPMorgan cree que el iPhone 5 estimular¨¢ la econom¨ªa de inmediato es sencillamente porque inducir¨¢ a la gente a gastar m¨¢s.
Y para creer que un mayor gasto dar¨¢ lugar a un est¨ªmulo econ¨®mico, tienen que creer ¡ªcomo deber¨ªan hacer¡ª que la demanda, no la oferta, es lo que est¨¢ lastrando la econom¨ªa. No tenemos un desempleo elevado porque los estadounidenses no quieran trabajar, y no tenemos un desempleo elevado porque los trabajadores carezcan de las aptitudes adecuadas. En lugar de ello, los trabajadores dispuestos y capaces no pueden encontrar empleo porque los empresarios no pueden vender lo bastante para justificar su contrataci¨®n. Y la soluci¨®n consiste en encontrar una forma de aumentar el gasto general para que el pa¨ªs pueda volver al trabajo.
Entonces, ?de d¨®nde puede venir un mayor gasto? Las empresas disponen de una enorme cantidad de dinero, pero, en su mayor parte, han visto pocas razones para realizar muchas inversiones. ?Por qu¨¦ va uno a incrementar su capacidad si no tiene suficientes ventas para usar plenamente la capacidad de la que ya dispone? Y como las empresas no est¨¢n gastando mucho, los ingresos son bajos y por eso la demanda es baja, lo que perpet¨²a ese bajo nivel de ventas.
En lugar de reforzar el gasto, nuestro sistema pol¨ªtico ha adoptado medidas que agravan la depresi¨®n
Sin embargo, las depresiones se acaban, con el tiempo, incluso sin pol¨ªticas gubernamentales para sacar a la econom¨ªa de este atolladero. ?Por qu¨¦? Hace tiempo, John Maynard Keynes sugiri¨® que la respuesta era ¡°uso, deterioro y obsolescencia¡±: hasta en una econom¨ªa deprimida, en alg¨²n momento las empresas empezar¨¢n a sustituir sus bienes de equipo, bien porque los que tienen se han deteriorado, o bien porque han aparecido otros mucho mejores; y una vez que empiezan a hacer eso, la econom¨ªa se anima. Sin duda alguna, es lo que Apple est¨¢ haciendo. Est¨¢ estimulando la obsolescencia. Bien.
Pero ?por qu¨¦ sufrir a?os de producci¨®n deprimida y desempleo elevado mientras esperamos a que se genere la suficiente obsolescencia? ?Por qu¨¦ no hacer que el Gobierno intervenga y gaste m¨¢s, pongamos que en educaci¨®n e infraestructuras, para ayudar a la econom¨ªa a salir de la mala racha? No digan que el Gobierno no puede aumentar el gasto total, o que el gasto p¨²blico no puede crear empleo. Si creen que el iPhone 5 puede impulsar la econom¨ªa, ya han admitido que la suma total del gasto en la econom¨ªa no es una cifra fija y que lo que necesitamos es un mayor gasto. Y no hay raz¨®n para que este gasto tenga que ser privado.
No obstante, lejos de usar el gasto p¨²blico para apoyar a la econom¨ªa en esta ¨¦poca de problemas, nuestro sistema pol¨ªtico ¡ªempujado por una combinaci¨®n de ideolog¨ªa, miedo exagerado al d¨¦ficit y obstruccionismo republicano¡ª ha tomado medidas para hacer que la depresi¨®n sea peor. S¨ª, los subsidios de desempleo y los vales de alimentos aumentan, porque mucha gente se encuentra necesitada; pero el empleo p¨²blico se ha desplomado, al igual que la inversi¨®n p¨²blica.
Ahora bien, a pesar de todo esto, acabaremos recuper¨¢ndonos. Con el paso del tiempo, habr¨¢ m¨¢s bienes de equipo que tengan que sustituirse, m¨¢s innovaciones como la del iPhone que estimulen el gasto, y, a la larga, saldremos de este atolladero econ¨®mico. Pero, como se?al¨® Keynes c¨¦lebremente en otro contexto, a la larga estaremos todos muertos. Y empleando una frase m¨ªa, ?por qu¨¦ no acabar con esta depresi¨®n ahora?
Paul Krugman es profesor de Econom¨ªa de Princeton y premio Nobel de 2008.
? New York Times Service 2012.
Traducci¨®n de News Clips.
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