Monge afirma que la literatura mexicana ha abusado del narcotr¨¢fico como personaje
El escritor mexicano Emiliano Monge, autor de "El cielo ¨¢rido", novela en la que exorciza la "terrible violencia" social que vive M¨¦xico, considera que la literatura mexicana ha abusado excesivamente del narcotr¨¢fico como personaje, en lugar de tratarlo como un escenario.
En una entrevista con Efe, Monge, que actualmente vive en Barcelona, ha dicho que "se ha hecho mucha novela polic¨ªaca, pero poca novela estrictamente literaria, algo parecido a lo que pas¨® en Colombia en los a?os 80 y 90, cuando se publicaron unos 2.000 libros sobre el narcotr¨¢fico".
A su juicio, el narcotr¨¢fico es "un espacio, un momento hist¨®rico en el que sucede cualquier historia", porque "el narcotr¨¢fico es escuela, iglesia, ej¨¦rcito, la polic¨ªa, los pol¨ªticos, la gente".
La gran diferencia que Monge ve entre el terrorismo y el narcotr¨¢fico es la relaci¨®n que establece con la gente corriente.
"En M¨¦xico no hay una idea mayoritariamente contraria al narcotr¨¢fico, pues solo es rechazado en las clases altas y en cierta parte de la clase media, mientras que las clases bajas crecen con el ideal de ser narcotraficantes", considera.
Ese apoyo de la inmensa mayor¨ªa de la poblaci¨®n a lo que representa el narcotr¨¢fico tiene su traducci¨®n en la m¨²sica -los narcocorridos-, que han tenido incluso que ser prohibidos en las estaciones de radio, recuerda.
"El cielo ¨¢rido" (Mondadori) es la historia de Germ¨¢n Alc¨¢ntara Carnero, pero tambi¨¦n la historia de un M¨¦xico rural a lo largo de los a?os que conforman la vida del protagonista y la de su familia, al tiempo que Monge ofrece un retrato sobre los sentimientos, miedos y desigualdades de una generaci¨®n.
La historia de Germ¨¢n Alc¨¢ntara es, a decir de su autor, "la historia de los hombres y mujeres que vivieron a su lado" y de una meseta en la que Monge destila las esencias de una Latinoam¨¦rica salvaje.
Se trata de un lugar ¨¢rido, donde las ¨²nicas constantes parecieran ser la soledad, la violencia, la lealtad y la lucha cotidiana por hacerse con una escala de valores que dote de sentido a la existencia.
En esa suerte de "biograf¨ªa novelada", Monge desgrana los instantes memorables de la vida de Germ¨¢n: la huida de un par de muchachos a otra patria, los avatares de una guerra interminable, la desaparici¨®n de una ni?a, la rebeli¨®n de unos creyentes, el enfrentamiento de un hijo con su padre, el nacimiento de un beb¨¦ enfermo o la contemplaci¨®n de un asesinato.
Desmarc¨¢ndose de sus contempor¨¢neos mexicanos, Emiliano Monge construye una literatura mucho m¨¢s pr¨®xima a autores latinoamericanos de principios del siglo XX que, en su caso, enmarca en un M¨¦xico rural imaginario.
Algunos ven en Monge la estela mexicana de lo que ha hecho Cormac McCarthy, autor de la trilog¨ªa de la frontera, con Estados Unidos. En el caso del mexicano, sus p¨¢ginas est¨¢n pobladas de hombres y mujeres que viven en un escenario hostil, dominado por hombres rudos y violentos.
"Esta novela no la habr¨ªa podido escribir en M¨¦xico, porque la distancia te permite cosas que all¨ª no habr¨ªan sido posibles: desde la m¨ªnima estupidez de pasear por la calle de madrugada sin tener miedo, hasta el tema del racismo, muy arraigado en M¨¦xico, incluso en los partidos de izquierda, que mantienen en sus casas a criados que viven en la frontera de la esclavitud", asegura el autor.
Monge confiesa que cuando sales fuera de tu pa¨ªs percibes mil cosas que all¨ª no detectas, y adem¨¢s escribes de otra manera y la violencia se ve de otra manera: "M¨¦xico no vive hoy la crisis en t¨¦rminos macroecon¨®micos, pero tiene el problema de la violencia y del racismo con una situaci¨®n cercana a una sociedad de castas".
La lejan¨ªa, admite, hace que pierdas el contacto con la realidad y por eso, cree que no escribir¨ªa nada sobre el presente mexicano.
"El coraje y la rabia que sientes fuera es, por otra parte, un motor literario fundamental", comenta.
Ve de momento imposible escribir sobre Barcelona, "porque no se me ha ocurrido ninguna circunstancia ni un personaje que se encuentre en esta ciudad, quiz¨¢ porque mi universo literario se encuentra todav¨ªa en M¨¦xico".
Jose Oliva
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.