El "cubrepene" de lana, el regalo de moda en Croacia por San Valent¨ªn
Una prenda tradicional masculina ca¨ªda en desuso, el "cubrepene" de lana, ha rejuvenecido en Croacia como un extravagante regalo de San Valent¨ªn.
El "nakurnjak", que significa literalmente "cubrepene", era una prenda obligatoria hasta hace un siglo en el ajuar de una novia en zonas monta?osas de Croacia, donde se utilizaba para protegerse del fr¨ªo y de dolorosos rozamientos durante las largas jornadas a caballo.
A Radmila Kus, de Mrkopalj, un poblado de la regi¨®n monta?osa de Gorski Kotar, situado a unos 100 kil¨®metros al sur de Zagreb, su negocio de confecci¨®n de objetos de lana no le iba muy bien hasta que empez¨® a hacer los "cubrepenes".
Las piezas no se tejen sino que se modelan con fieltro de lana pura, sometida a diferentes procedimientos de peinado, cardado y apelmazado hasta lograr un tacto suave y firme.
"Se venden todos los que producimos, el precio es simb¨®lico, 50 kunas (7 euros). Env¨ªo muchos al extranjero, sobre todo a Italia", cuenta Radmila, que en el centro de Mrkopalj tiene una tienda de artesan¨ªas de lana, junto con otras compa?eras.
"Si es para el D¨ªa de los Enamorados, me los suelen encargar con el motivo de un coraz¨®n encima, muchos encargan cubrepenes con los colores de su bandera nacional, o a veces quieren tener alg¨²n escudo o una insignia de su equipo de f¨²tbol favorito", explica.
"Cu¨¢ntas veces me han contado que el regalo fue tema de much¨ªsimas bromas y risas y que cre¨® una atm¨®sfera relajada en alguna fiesta", cuenta Radmila, al explicar que la prenda tiene hoy un uso muy diferente al del pasado.
Radmila los crea para sus clientes a medida, pero advierte que cuando se compra uno de regalo, hay que comprar siempre el XXXL.
"De otra forma los hombres se enfadan, no importa de qu¨¦ pa¨ªs sean", asegura con humor.
La mayor¨ªa de las veces ellos mismos se compran la mayor talla, "aunque probablemente no todos lo necesiten", agrega.
La idea de empezar a hacer esas prendas tradicionales ca¨ªdas en desuso le vino hace m¨¢s de 10 a?os cuando el grupo de rock croata "Let 3", conocido por su est¨¦tica provocadora, le pidi¨® que les preparara el vestuario esc¨¦nico para un pr¨®ximo concierto.
"Pens¨¦ durante mucho tiempo qu¨¦ podr¨ªa hacer para ese grupo, que siempre quiere impactar al p¨²blico. De repente vi un sobrepene colgado en una cuerda de tender ropa en un patio de Mrkopalj. Un se?or anciano estaba acostumbrado a usarlo todav¨ªa", relata.
Eso le dio la idea para crear unos cubrepenes gigantescos para los miembros del "Let-3", con los que el grupo atrajo mucha publicidad y en un festival de Eslovenia fue incluso premiado por su "estilo".
Desde entonces Radmila empez¨® a hacer los cubrepenes como unos regalos y recuerdos extravagantes de su regi¨®n monta?osa.
Antes hac¨ªa artesan¨ªas de fieltro de lana te?ida con colores naturales como pantuflas, mu?ecas, sombreros, bolsos y otros objetos, que se venden bien sobre todo desde que se "hizo famosa" por los cubrepenes.
Estas prendas tradicionales todav¨ªa pueden comprarse en algunas tiendas con recuerdos tradicionales croatas, en los famosos lagos de Plitvice y en otros lugares tur¨ªsticos.
Como miembro de una organizaci¨®n por la paz durante y despu¨¦s de la guerra serbio-croata (1991-1995), Radmila organiz¨® muchos talleres multi¨¦tnicos de artesan¨ªa, seg¨²n recuerda.
Tambi¨¦n tuvo que recurrir a su mano izquierda para convencer al cura local de que no la excomulgara, por crear y difundir unos objetos obscenos, y de que en realidad son prendas tradicionales que sirven de promoci¨®n tur¨ªstica de la comarca.Vesna Bernardic
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