Lecciones de Extremadura
Es justo compensar a aquellas comunidades rigurosas que cumplen con sus compromisos
No lo llamar¨ªa ni ¡°el milagro extreme?o¡± ni una ¡°revoluci¨®n silenciosa¡±, como ya se hace en foros en Madrid. Lo que s¨ª dir¨ªa es que lo que parec¨ªa imposible ayer y es una realidad hoy es gracias al esfuerzo, el sacrificio y el trabajo del pueblo extreme?o. Y, por tanto, no se puede minimizar y es importante que se cuente.
El 0,97% de d¨¦ficit es m¨¢s que una cifra, es el s¨ªmbolo de la uni¨®n de todos los extreme?os, de izquierdas y de derechas, por un objetivo com¨²n: el crecimiento econ¨®mico y la creaci¨®n de empleo. Conseguir un 0,97% de d¨¦ficit partiendo de un 6,8% en julio de 2011 o un 4,59% a cierre de 2011, el segundo m¨¢s alto de Espa?a, es heroico.
Todas las comunidades aut¨®nomas est¨¢bamos obligadas a alcanzar unos compromisos que en muchos casos no firmamos aquellos que actualmente ejercemos la responsabilidad de Gobiernos central y auton¨®mico, pero que tuvimos que asumir como un reto personal e irrenunciable. Porque nunca en la historia de la econom¨ªa de Extremadura y de Espa?a hemos conseguido crecer y crear empleo sin estabilizar antes nuestras cuentas. Cualquier analista econ¨®mico que no juegue al partidismo pol¨ªtico sabe que esa tesis es cierta.
En Espa?a, desde 1997 no se ha creado empleo mientras el d¨¦ficit ha superado el 4,5% o el 5% del PIB. Cuando crecen el d¨¦ficit y la deuda en Extremadura y en Espa?a, aumenta el paro. Cuando el d¨¦ficit se controla y la deuda se reduce de manera estable, hay crecimiento econ¨®mico y se crea empleo.
Lo que hay que exigir, por su parte, a las comunidades que incumplen es que hagan reformas de verdad dentro de la Administraci¨®n, eliminando su tejido adiposo y no cargando contra sus ciudadanos.
No es ortodoxia. A partir de la estabilidad, con super¨¢vit o poco d¨¦ficit, se pueden aplicar pol¨ªticas keynesianas o m¨¢s liberales, como hicieron los expresidentes del Gobierno de Espa?a Felipe Gonz¨¢lez o Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. Con los dos hubo, en diferentes etapas, crecimiento econ¨®mico en Espa?a con estos par¨¢metros. En a?os de bonanza, tanto la derecha como la izquierda en nuestro pa¨ªs han actuado bajo estas premisas: reducci¨®n del d¨¦ficit y deuda controlada, aunque ahora parte de la izquierda no lo quiera reconocer.
Esta f¨®rmula no puede tener color pol¨ªtico. Siempre que as¨ª ha sido, la econom¨ªa espa?ola prospera. Ni un Gobierno de izquierdas puede excluir a la derecha en este tiempo de dificultades, ni puede suceder a la inversa. Porque la econom¨ªa no es cuesti¨®n de ideolog¨ªas, sino de seriedad, rigor, cumplimientos y responsabilidad.
Hoy, quienes estamos alcanzando la estabilidad presupuestaria estamos en condiciones de poner en marcha pol¨ªticas de crecimiento y de exigir a Madrid y a Bruselas que se premie a las regiones que cumplen frente a las que incumplen, v¨ªa Presupuestos Generales del Estado o v¨ªa fondos comunitarios. No solo porque es justo compensar a aquellas comunidades rigurosas con los compromisos, sino porque los incumplimientos de algunas regiones, como Andaluc¨ªa o Catalu?a, ralentizan la recuperaci¨®n econ¨®mica a nivel nacional y pueden tirar al traste los grandes sacrificios de las comunidades que cumplen, como Extremadura o Madrid.
Pero eso, perm¨ªtanme que hoy no me refiera al nacionalismo gobernante en Catalu?a, que es incumplidor y no hace las reformas que necesita Catalu?a; que pide, adem¨¢s, la independencia cuando muestran dependencia econ¨®mica del Estado, sino que les relate lo que est¨¢ ocurriendo en el sur de Espa?a, donde hoy hay un modelo que cumple, que es Extremadura, y otro que incumple, Andaluc¨ªa.
Pero ?por qu¨¦ quiero poner hoy de ejemplo de gesti¨®n econ¨®mica poco rigurosa a Andaluc¨ªa? Primero, porque es el modelo que el PSOE propone para toda Espa?a, y segundo, porque es una comunidad vecina de Extremadura.
No entiendo que Andaluc¨ªa no cumpla el objetivo del d¨¦ficit partiendo del 3,22% en diciembre de 2011 ¡ªcuando Extremadura part¨ªa del 4,59%¡ª y ahora anuncie que va a situarse alrededor del 2%. No lo entiendo. A¨²n menos cuando Andaluc¨ªa est¨¢ realizando recortes que merman el Estado de bienestar. En el ¨¢rea de dependencia, Andaluc¨ªa ha recortado su presupuesto en un 6,6%, ha bajado tambi¨¦n un 8,6% en educaci¨®n, y en Empleo ¡ªlos datos m¨¢s llamativos, dada la situaci¨®n actual¡ª recorta un 44,6% mientras el presupuesto destinado a promoci¨®n social cae en un 30,3%.
Recorta, no cumple el d¨¦ficit y la prensa recoge que desde Andaluc¨ªa copian los ¡°planes de est¨ªmulo econ¨®mico de Extremadura¡±. Lo que realmente deber¨ªan imitar de Extremadura son los ajustes realizados en el Gobierno extreme?o, centrados especialmente en la eliminaci¨®n de gasto superfluo de la Administraci¨®n. ?nicamente el Plan de Optimizaci¨®n de Recursos y el dec¨¢logo de austeridad que pusimos en marcha desde el Gobierno de Extremadura ha supuesto un ahorro de 96 millones de euros en 2012 o, lo que es lo mismo, 16.000 millones de las antiguas pesetas. Y mientras, se incrementa el presupuesto para empleo en 22 millones de euros y para este a?o hemos elaborado los ¨²nicos presupuestos expansivos de Espa?a.
Este es tan solo un ejemplo de c¨®mo no debe actuar un Ejecutivo responsable. Es el motivo por el que el Gobierno de Espa?a debe premiar a quienes s¨ª hacemos los deberes. Lo que hay que exigir, por su parte, a las comunidades que incumplen es que hagan reformas de verdad dentro de la Administraci¨®n, eliminando su tejido adiposo y no cargando contra sus ciudadanos.
Jos¨¦ Antonio Monago es presidente de la Junta de Extremadura.
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