Los jueces interrogaron a Lagarde sobre la actuaci¨®n del El¨ªseo

Hasta ahora, Christine Lagarde siempre hab¨ªa dicho que fue ella quien decidi¨® designar un arbitraje privado para resolver el largo litigio entre el empresario Bernard Tapie y el banco Cr¨¦dit Lyonnais. El jueves y el viernes, durante su declaraci¨®n de casi 24 horas, los tres jueces de la Corte de Justicia de la Rep¨²blica (CJR), que interrogaban a la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI) como sospechosa de complicidad en falsedad y malversaci¨®n de fondos p¨²blicos, preguntaron a Lagarde por la implicaci¨®n del El¨ªseo en el caso. Seg¨²n afirma hoy su abogado en el Journal du Dimanche (JDD), la exministra de Econom¨ªa asegur¨® que ¡°jam¨¢s¡± habl¨® del asunto con Nicolas Sarkozy ni con su mano derecha, Claude Gu¨¦ant. Pero el diario digital Mediapart, que cita una fuente ¡°muy solvente¡±, asegura que la patrona del FMI acept¨® haber recibido presiones del El¨ªseo, y a?ade que ese cambio de estrategia defensiva contribuy¨® a que no fuera imputada, como parec¨ªa previsible por las acusaciones de la fiscal¨ªa, y acabara siendo declarada testigo asistida.

La reconstrucci¨®n que hacen los dos medios franceses sobre el interrogatorio de 22 horas, que qued¨® por escrito en un verbal de 150 folios, coincide en todos los elementos salvo en ese punto concreto. Seg¨²n el semanario conservador JDD, Lagarde ¡°mostr¨® su sorpresa numerosas veces al ser preguntada por las intervenciones del El¨ªseo¡± en el proceso de arbitraje, y sostuvo que no tuvo conocimiento de ellas en su momento. Quiz¨¢ por eso, su abogado, Yves Repiquet, admiti¨® el viernes que ¡°a la vista de algunos elementos, (Lagarde) no habr¨ªa actuado igual si el caso se hubiera planteado hoy¡±.

La enigm¨¢tica frase sugiere que la maratoniana declaraci¨®n de Lagarde, y su calificaci¨®n como testigo asistida, ha dado nuevos elementos a los jueces para aclarar mejor el papel jugado por Sarkozy y Gu¨¦ant en el pol¨¦mico asunto, que se cerr¨® en 2008 con la inyecci¨®n de 403 millones de euros p¨²blicos en las cuentas de Tapie, un antiguo ministro socialista que en 2007 pidi¨® el voto para Sarkozy.

La versi¨®n de Mediapart deja en peor lugar a Lagarde. El exhaustivo an¨¢lisis del diario digital? afirma que la exministra de Econom¨ªa admiti¨® ante los jueces haber recibido presiones de Gu¨¦ant, que era el secretario general del El¨ªseo cuando se decidi¨® el arbitraje privado, pero no de Sarkozy. Hace unas semanas, Gu¨¦ant, cuyas oficinas fueron registradas por la polic¨ªa en la investigaci¨®n penal -no ministerial- del esc¨¢ndalo, neg¨® toda implicaci¨®n en el caso y adujo que todo hab¨ªa sido decidido por Lagarde.

Seg¨²n Mediapart, un segundo factor ayud¨® a la directora del FMI a evitar la imputaci¨®n en su primera cita con la CJR: la presi¨®n pol¨ªtica del presidente Fran?ois Hollande y de su ministro de Finanzas, Pierre Moscovici. La v¨ªspera de la comparecencia, ambos hicieron saber que Francia apoyar¨ªa a Lagarde ante el consejo del FMI ¡°pasara lo que pasara¡± tras el interrogatorio. El respaldo del Ejecutivo socialista, que pareci¨® ignorar las estrictas cl¨¢usulas ¨¦ticas suscritas por Lagarde a su llegada al FMI, funcion¨® un mensaje, una especie de llamada al orden, seg¨²n Mediapart, para el tribunal que juzga a los ministros de la Rep¨²blica, formado por tres jueces del Supremo, y que llegaba dividido a la cita: el presidente prefer¨ªa ganar tiempo, mientras sus dos colegas eran partidarios de la imputaci¨®n directa.

Tras dos horas de deliberaciones, los magistrados de la CJR rebajaron la presi¨®n sobre la patrona del FMI declar¨¢ndola testigo asistido, una sorpresa a la vista de las graves acusaciones de la fiscal¨ªa.

El estatuto penal de testigo asistido, que no excluye una futura imputaci¨®n si aparecen nuevos indicios, permite de momento a Lagarde -y a Francia- salvar la cara y evitar un nuevo desprestigio de la c¨²pula del organismo con sede en Washington, tras la ca¨ªda de Dominique Strauss-Kahn en mayo de 2011.

La soluci¨®n salom¨®nica abre una nueva v¨ªa para que avancen las dos investigaciones abiertas sobre un caso que sigue lleno de zonas de sombra. Pese al alivio del viernes, Lagarde sigue bajo sospecha y bajo investigaci¨®n del CJR, pero su suerte est¨¢ ahora m¨¢s ligada que antes a la de sus superiores de entonces, aunque Nicolas Sarkozy est¨¢ a salvo porque los actos cometidos por los presidentes de la Rep¨²blica en el ejercicio del cargo no pueden ser castigados por la justicia.

En su declaraci¨®n, la directora del FMI record¨® tambi¨¦n a los magistrados que la soluci¨®n del arbitraje hab¨ªa sido propuesta en primer lugar por su antecesor en Econom¨ªa, Jean-Louis Borloo, antiguo abogado de Bernard Tapie.