Un f¨¦rreo defensor de los trabajadores

Nacho Montejo siempre record¨® aquella agresi¨®n policial, en una manifestaci¨®n estudiantil de los a?os 60, como el momento en el que tom¨® conciencia pr¨¢ctica y concreta de d¨®nde deb¨ªa situarse y por qu¨¦ causa hab¨ªa de luchar. Nunca la abandon¨®. Particip¨® activamente, vincul¨¢ndose al PCE, en los movimientos universitarios antifranquistas. Fue procesado por el TOP y pas¨®, como preso pol¨ªtico, por la c¨¢rcel de Carabanchel, de la que sali¨® ¨C le gustaba recordarlo - gracias a la presi¨®n internacional con ocasi¨®n del famoso festival de Eurovisi¨®n en el que triunf¨® Massiel con su La, la, la (¨¦l mismo abandon¨® la prisi¨®n, entre guardias, cant¨¢ndola).

Tras licenciarse en Derecho, ejerci¨® en Madrid como abogado laboralista, siempre en defensa de los intereses de los trabajadores, primero junto a Cristina Almeida, en el despacho de la calle Espa?oleto, y poco despu¨¦s en el casi m¨ªtico de la calle Atocha, donde encontr¨® y reconoci¨® como maestra y amiga entra?able a Manuela Carmena (esto lo afirmamos como imprescindible los otros dos coautores de estas l¨ªneas).

Sobrevivi¨® al asesinato de los abogados de Atocha porque su esposa, Gloria Bomb¨ªn, le fue a buscar ¨C embarazada de su hija Lola, hoy abogada laboralista ¨C para ir al teatro (el d¨ªa anterior tambi¨¦n lo hab¨ªa intentando infructuosamente, porque Nacho ten¨ªa que participar en una asamblea sindical; esta vez Gloria le dijo que no val¨ªan excusas). Al salir de la representaci¨®n y enterado de que algo grave hab¨ªa sucedido en su despacho, llam¨® al peri¨®dico El Pa¨ªs, donde le informaron de la tragedia y de que ¡°Nacho Montejo ha sido herido de gravedad, y est¨¢ en la UVI¡±. Tuvo, entonces, que rectificar al que, por otra parte, siempre consider¨® su peri¨®dico.

Fue abogado de los servicios jur¨ªdicos de CC.OO. y m¨¢s adelante fund¨® y lider¨® importantes despachos laboralistas (en la Glorieta de Bilbao y en las calles Sagasta y G¨¦nova). Defendi¨® a incontables trabajadores (tanto al que ten¨ªa recursos para ello, como al que no) y fue siempre un claro l¨ªder del foro. Cofund¨® y fue inspiraci¨®n de la Asociaci¨®n de Abogados Laboralistas de Trabajadores de la Comunidad de Madrid, que sin duda hoy se sentir¨¢ hu¨¦rfana. Siempre fue un valiente e incondicional defensor de todo abogado que viese limitado su derecho en pro de la defensa, con independencia de que coincidiese o no con sus ideas.

Era vitalista, divertido, energ¨¦tico, solidario, generoso, r¨¢pido, ingenioso, optimista, comprometido, amante sin l¨ªmites de su esposa e hijos, amigo de sus amigos, una fuerza de la naturaleza. Tambi¨¦n controvertido y pol¨¦mico, como apenas pod¨ªa dejar de serlo alguien tan excepcional.

Nos dec¨ªa hoy Nicol¨¢s Sartorius que siempre estuvo donde hab¨ªa que estar, y nunca dej¨® de acudir cuando se le llam¨® para algo que mereciese la pena.

El pasado s¨¢bado celebr¨® la que habr¨ªa de ser su ¨²ltima fiesta en el cumplea?os de su hijo Miguel, en su querido pueblo de Cubas, con sus hijos, los amigos de sus hijos, y los hijos de los hijos: una fiesta llena de ni?os ¨C entre ellos sus nietos ¨C y de alegr¨ªa.

Nunca le olvidaremos.

Este obituario est¨¢ elaborado por Manuela Carmena, Juan Puig de la Bellacasa, Rom¨¢n Gil.