InTempo, una incompetencia de altura
El edificio residencial de Benidorm, el m¨¢s alto de la UE, acaba en el ¡®banco malo¡¯ mientras sus arquitectos dimiten
Cuando en mayo de 2012 el equipo de gobierno de Benidorm (Alicante) se subi¨® al edificio residencial en construcci¨®n m¨¢s alto de la Uni¨®n Europea (UE) para hacerse una foto, ten¨ªa una idea en mente. Las dos torres de InTempo ser¨ªan el s¨ªmbolo de la salida de la ciudad de la crisis. Los cielos de Espa?a hab¨ªan pasado de estar poblados por gr¨²as al m¨¢s absoluto azul, incluso en la ciudad espa?ola de los rascacielos, y solo una gr¨²a trajinaba por el cielo benidorm¨ª: la que coronaba el InTempo. Pero a finales de diciembre de ese mismo a?o, la Sareb (Sociedad de Gesti¨®n de Activos de la Reestructuraci¨®n Bancaria), tambi¨¦n conocida como el banco malo, se qued¨® el cr¨¦dito financiero del edificio que estaba llamado a marcar un antes y un despu¨¦s de la arquitectura en Benidorm. EL PA?S ha tenido acceso a documentaci¨®n que muestra que m¨¢s que establecer un punto y aparte en la historia de la ciudad tur¨ªstica, es la historia de un c¨²mulo de incompetencias.
Su inicio representa la alegr¨ªa de una ¨¦poca de cr¨¦ditos desmedidos y construcci¨®n desmelenada. Con un capital inicial de 3.100 euros se constituy¨® Olga Urbana para construir, seg¨²n reza su promoci¨®n, ¡°un incuestionable estandarte de futuro¡± que escalar¨ªa 200 metros hasta las nubes. La extinta Caixa Galicia le prest¨® 92 millones de euros en 2005, una hipoteca que acab¨® en Nova Caixa Galicia tras la fusi¨®n de cajas gallegas y posteriormente en la Sareb. El banco malo se qued¨® InTempo con una quita del 50% por 46 millones y le meti¨® un suplemento arbitrario de 11.
La situaci¨®n del proyecto no trascendi¨® hasta la semana pasada y es compleja: su cr¨¦dito pertenece a la Sareb; el edificio, no obstante, es propiedad de Olga Urbana y ¨²nicamente la inmobiliaria Maxxima puede venderla, seg¨²n el contrato firmado.
La historia todav¨ªa inacabada de este mastodonte urbano de m¨¢s de 47 plantas y 269 viviendas es un compendio de situaciones at¨ªpicas. Seg¨²n narraron fuentes cercanas al coraz¨®n del proyecto, en 2009 la obra sufri¨® el primer percance cuando la empresa constructora entr¨® en liquidaci¨®n. La crisis rug¨ªa y la caja de ahorros gallega par¨® la obra y estudi¨® su viabilidad, que le debi¨® parecer posible. Encarg¨® a una empresa de Madrid, Suasor, el control de gastos del proyecto. Su ahorro ser¨ªan sus comisiones.
Los trabajadores de la antigua constructora constituyeron una nueva, Kono, que present¨® una propuesta para continuar con el edificio. Suasor, muy interesado por el proyecto de la empresa alicantina durante su elaboraci¨®n, sorprendi¨® al negarse finalmente a la propuesta en favor de otra empresa de Madrid, Eyte.
Esta situaci¨®n resulta un tanto peculiar al observar ambas propuestas sobre papel. El proyecto madrile?o coincide con las medidas que propon¨ªa el alicantino hasta en el segundo decimal. Coincidir a 460 kil¨®metros de distancia en todas las medidas de semejante proyecto es toda una carambola.
La diferencia estriba en que el madrile?o arrastraba errores de bulto. Por ejemplo: yerran la posici¨®n de la estructura de acero del edificio por siete pisos. Los precios ofrecidos por las 2.500 toneladas de acero y los 29.000 metros c¨²bicos estaban fuera de mercado, ¡°una bajada temeraria¡± en palabras de la inmobiliaria Maxxima, que tambi¨¦n vio los informes. Olga Urbana impuso su criterio: los antiguos trabajadores continuar¨ªan la obra. La relaci¨®n entre Kono y Suasor a partir de aqu¨ª fue de todo menos fluida.
Y as¨ª volvi¨® en 2010 a arrancar InTempo, a trompicones: el primer mes de cobro Caixa Galicia paraliz¨® el pago porque quer¨ªa que todos los trabajadores domiciliaran su n¨®mina en la entidad. La constructora se neg¨®. Meses m¨¢s tarde se tiraron cuatro meses sin cobrar. Llama la atenci¨®n tambi¨¦n que hasta que no construyeron los primeros 23 pisos no se pens¨® en poner un montacargas para los 41 operarios que sub¨ªan y bajaban escaleras.
En abril de 2011, con el hormig¨®n puesto hasta la planta 46 todav¨ªa no estaban listos los planos de la 47. En julio, el montacargas se cay¨® con 13 operarios dentro y las ambulancias no pudieron acceder al lugar al no estar acondicionada la entrada de veh¨ªculos por ahorrar costes. Varios trabajadores tuvieron heridas muy graves.
El agosto siguiente, los obreros amenazaron con una sentada por cobrar con retraso. La contestaci¨®n a sus peticiones de Javier Fr¨ªas, un cargo de la promotora, fue por correo electr¨®nico: ¡°Puede que a alguno no le interesen las condiciones de trabajo por lo que decida marcharse. As¨ª nos van haciendo un favor¡±, escribi¨®.
En enero de 2012, una nueva sorpresa: no se hab¨ªa tenido en cuenta el hueco del ascensor, como bien se ve en los dise?os promocionales donde no constan los t¨ªpicos espacios dedicados en las azoteas a los motores elevadores. ¡°El espacio estaba calculado para un bloque de 20 plantas¡±, narran las mismas fuentes. Y el pasado mayo, como colof¨®n, los arquitectos directores del proyecto (el despacho de P¨¦rez Guerra y Olcina y Rad¨²an Arquitectos) dimitieron. Han preferido callar.
InTempo tiene un 94% de su estructura completada y el 35% de las casas vendidas. La fecha de finalizaci¨®n actualmente est¨¢ fijada en diciembre de 2013. El proyecto est¨¢ lastrado por denuncias de estafa, embargos y reclamaciones de clientes y proveedores. A Kono, sin actividad ahora mismo, se le debe un mill¨®n de euros por obra ya construida. El total de deuda a proveedores es de 2,5 millones de euros. El edificio ideado para ¡°marcar una ¨¦poca¡±, seg¨²n reza su promoci¨®n, ha acabado siendo la met¨¢fora perfecta de un tiempo de excesos.
La obsesi¨®n de ¡®Beniyork¡¯
Benidorm no tiene l¨ªmite de altura ni lo quiere. Su modelo urban¨ªstico tiene detractores, pero tambi¨¦n defensores del prestigio del soci¨®logo del urbanismo Henri Lefebvre, quien la defini¨® como la ciudad m¨¢s habitable construida despu¨¦s de la Segunda Guerra Mundial. Apodada cari?osamente como la peque?a Manhattan o Beniyork, ha albergado varias historias como la del InTempo. Sus otros dos edificios m¨¢s altos ¡ªel Hotel Bali y Torre Lugano¡ª se han cimentado sobre pol¨¦mica.
¡°Muchos promotores no se han bajado a¨²n del burro¡±, confiesan fuentes del Ayuntamiento a modo de cr¨ªtica hacia lo ocurrido con este edificio. ¡°No pueden mantener los precios de 2005 como si aqu¨ª no hubiera pasado nada¡±, aseveran en un Consistorio en el que se parten el pecho por sus constructores. Con todo, de momento, asegura Olga Urbana, no prev¨¦n variarlos. Un piso con un dormitorio en InTempo arranca con un precio de 358.000 euros y va ascendiendo cada diez plantas.
El empresario que controla el 60% de Olga Urbana, Jos¨¦ Ignacio de la Serna, lleg¨® a Benidorm de su Vizcaya natal y se hizo hueco a golpe de rascacielos. En su haber cuenta tambi¨¦n con la quinta torre m¨¢s alta del municipio, Negurigane, de 145 metros. En la ciudad se lo define como ¡°un empresario de rompe y rasga¡±, muy al uso en el Mediterr¨¢neo, sin formaci¨®n universitaria, hecho a s¨ª mismo.
El perfil de De la Serna encaja con el personaje que creado por Bigas Luna e interpretado por Javier Bardem en Huevos de Oro. Aquella pel¨ªcula, que narra la obsesi¨®n de un joven empresario empe?ado en construir un rascacielos, fue filmada en El Bali, el edificio m¨¢s alto hasta que lleg¨® InTempo. El Bali en s¨ª fue una obsesi¨®n de 186 metros de altura que tard¨® 15 a?os en realizase.
Cuesti¨®n de longitud
¡°En Benidorm, a veces, con lo de los rascacielos hay mucho de qui¨¦n la tiene m¨¢s larga¡±, confiesan en un Ayuntamiento, apodado el rascasuelos por ser una construcci¨®n horizontal, rar¨ªsima desde los a?os sesenta del siglo XX. La historia del InTempo se acerca a la de la Torre Lugano, la tercera m¨¢s alta, que en septiembre ver¨¢ como comienza un juicio en el que sus inquilinos-compradores reclaman 28,2 millones de euros.
?Son necesarios edificios como InTempo? Sirva la respuesta municipal: ¡°Aqu¨ª nadie construye una torre por debajo de las 20 alturas. Te puede gustar o no, pero es nuestra personalidad¡±. Benidorm es una de las cinco ciudades europeas que m¨¢s rascacielos concentra. En verano pasa de tener unos 75.000 habitantes a casi medio mill¨®n. Su consumo de luz y agua es m¨¢s que sostenible.
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