El SVA evita que entren en el mercado 80 toneladas de hach¨ªs y ocho de coca¨ªna

Esc¨¢neres de contenedores en ocho puertos, 37 embarcaciones, siete helic¨®pteros, seis aviones y casi 2.000 funcionarios. Son los medios materiales del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA), que en lo que va de a?o han evitado poner en el mercado m¨¢s de 80 toneladas de hach¨ªs y 8 de coca¨ªna.

Pese a la crisis, la directora de Aduanas e Impuestos Especiales, Pilar Jurado, considera, en una entrevista con Efe, que el SVA dispone de medios suficientes, ya que los aeronavales no han descendido y los ¨²ltimos barcos comprados lo fueron en 2008.

Con ellos, este servicio, que en ocasiones lleva a cabo operaciones conjuntas con las fuerzas de seguridad, incaut¨® el pasado a?o casi 110 toneladas de hach¨ªs y levant¨® 1.766 atestados por este motivo.

En el primer semestre del a?o, la cantidad de hach¨ªs intervenido ya es de 80 toneladas y el n¨²mero de atestados 656.

Respecto a la coca¨ªna, el pasado a?o el SVA aprehendi¨® casi 7 toneladas, mientras que en el primer semestre de este ejercicio esa cifra ya ha sido superada, con algo m¨¢s de 8 toneladas. Los atestados levantados por este tr¨¢fico il¨ªcito fueron 739 y 318, respectivamente.

Pero la labor del SVA no se queda ah¨ª y, tal y como explica Jurado, los funcionarios de este servicio siguen el rastro de todas las actividades de las organizaciones criminales, incluido el blanqueo de capitales.

Seg¨²n los datos facilitados a Efe, este servicio descubri¨® el a?o pasado delitos por blanqueo por un valor estad¨ªstico -sin incluir previsi¨®n de sanciones- de 158,4 millones de euros, mientras que el importe de los bienes intervenidos por esa actividad delictiva ascendi¨® a 92,1 millones. Adem¨¢s, se levantaron 102 atestados.

Mientras, de enero a junio de este a?o el valor de los delitos de blanqueo perseguidos es de 258,1 millones de euros -cien millones m¨¢s que en todo 2012- y el de los bienes intervenidos asciende a 25,8 millones, con 98 atestados levantados.

De los casi 2.000 funcionarios del SVA, algo m¨¢s de mil se dedican a labores de investigaci¨®n y el resto a operaciones mar¨ªtimas.

Su flota mar¨ªtima est¨¢ compuesta por 37 embarcaciones (dos buques de operaciones especiales, 26 patrulleros y 19 lanchas r¨¢pidas), distribuidas en las diez comunidades con costa.

Siete helic¨®pteros con bases operativas en Algeciras, Almer¨ªa, Vigo y San Javier (Murcia), y seis aviones distribuidos en distintos puntos del pa¨ªs conforman la flota ¨¢rea del SVA.

Pero la joya de la corona son los ocho esc¨¢neres de contenedores instalados en los puertos de Bilbao, Vigo, Tenerife, Las Palmas, Algeciras, Valencia, Tarragona y Barcelona.

Tal y como resalta Pilar Jurado, este instrumento de detecci¨®n de droga oculta en los contenedores est¨¢ dando muy buenos resultados, ya que se evita abrir uno por uno cada contenedor y permite identificar las diferentes intensidades en el interior del mismo, lo que da la pista de d¨®nde centrar el reconocimiento.

Cuando Espa?a decidi¨® instalar el primero de ellos, su coste alcanzaba los quince millones de euros para un desarrollo tecnol¨®gico que tarda tres minutos en tomar las im¨¢genes de la mercanc¨ªa, interpretadas despu¨¦s en un m¨¢ximo de quince minutos por agentes aduaneros especializados.

El puerto holand¨¦s de Rotterdam, el de mayor tr¨¢fico de la Uni¨®n Europea, fue pionero en este tipo de tecnolog¨ªa, con la que se puede radiografiar un promedio de 25.000 contenedores anuales.

Tambi¨¦n cuenta el SVA con arcos de detecci¨®n de radioactividad, los Megaport, instalados en los puertos de Vigo, Bilbao, Algeciras, Valencia y Barcelona, aunque los esc¨¢neres de contenedores de Tenerife y Tarragona tambi¨¦n incluyen estos dispositivos.

Cada vez que se detecta el m¨¢s m¨ªnimo ¨ªndice de radioactividad en una mercanc¨ªa, Espa?a, "muy sensible" en estas cuestiones, como dice Jurado, la devuelve. Donde m¨¢s se detecta es en productos elaborados en pa¨ªses menos desarrollados porque sus controles son menores.

Se trata de medios de detecci¨®n no intrusivos que permiten hacer frente a las exigencias de la Uni¨®n Europea de controlar las entradas y salidas por sus fronteras.

Jurado resalta el trabajo del SVA, que se est¨¢ adaptando a los "malos" en sus cambios a la hora de actuar y de ocultar la mercanc¨ªa ilegal.

Los agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera se han enfrentado as¨ª a droga escondida en cilindros de aluminio, en tablas de surf o disuelta en agua salada y transportada en veleros, pesqueros, lanchas r¨¢pidas o camiones.