Castell¨®n, una costa ¡®en venta¡¯
Uno de cada cuatro pisos est¨¢ pendiente de vender en la provincia, el porcentaje m¨¢s alto del pa¨ªs Hay chalets frente al mar por 60.000 euros
Primitivo es el conserje de una urbanizaci¨®n casi fantasmal. Vigila seis bloques de viviendas nuevas (apenas tres a?os de antig¨¹edad) levantada en una zona de expansi¨®n de Castell¨®n y que naci¨® pegada al ¨²nico centro comercial de la ciudad. En la actualidad no viven ni 30 personas. La obra comenz¨® casi al mismo tiempo en que la burbuja inmobiliaria se deshinchaba. El entonces alcalde y ahora presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, acudi¨® a poner la primera piedra en abril de 2007 en la zona conocida como Boera Park, donde se proyectaron 700 viviendas de alta gama. Hoy es una de las estampas que m¨¢s ejemplifica la fiebre urban¨ªstica de la provincia.
¡°De los seis bloques solo hay en venta dos y hay 26 vecinos para 264 pisos¡±, explica Primitivo. ?l lleva trabajando en la urbanizaci¨®n desde 2011. ¡°Al principio ten¨ªa que hablar solo o con las farolas¡±, bromea. El aburrimiento le llev¨® a limpiar uno a uno los 264 pisos. Ahora, dice, hay ¡°algo de movimiento¡±. En una libreta va apuntando los nombres de los nuevos inquilinos. Ni que decir tiene que el cuaderno tiene demasiadas hojas en blanco.
En Moncofa, hay un bloque de 12 plantas en el que vive una persona
Un gran cartel que ocupa toda la fachada de uno de estos bloques anuncia la venta de estos pisos que han pasado a ser propiedad de dos entidades bancarias. Enfrente, el resto de la urbanizaci¨®n, otros cuatro bloques con pisos de lujo, han pasado a manos de otro promotor. La bajada de precios mueve a algunos compradores como Jorge Mateos, un joven que espera a ver una de estas viviendas. ¡°Est¨¢ todo muy vac¨ªo¡±, comenta sorprendido. El precio, unos 90.000 euros para un inmueble nuevo, podr¨ªa hacerle relegar el hecho de vivir en una urbanizaci¨®n fantasma, comenta.
Castell¨®n es, con diferencia, la provincia con m¨¢s viviendas nuevas en stock, seg¨²n el informe sobre el sector inmobiliario en Espa?a publicado recientemente por CatalunyaCaixa, que arroja un parque excedentario del 25,84%. Un piso de cada cuatro de nueva construcci¨®n tiene el cartel de se vende. En total, 114.703 viviendas nuevas y vac¨ªas. Para dar cuenta del problema basta ver que la segunda provincia con m¨¢s excedente no llega al 9%.
Pero para la Asociaci¨®n Provincial de Empresarios de la Construcci¨®n de Castell¨®n (Apecc), estos datos son err¨®neos. ¡°Se est¨¢n contando visados cuando hay muchos proyectos, sobre todo a partir de 2007, que no se ha hecho ninguno porque se tiraron para atr¨¢s¡±, explica Ferm¨ªn Renau, expresidente de la patronal que ahora dirige una gestora. Seg¨²n Renau, el stock de la provincia no llegar¨ªa a las 30.000 viviendas. De la misma opini¨®n es el presidente del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos, Alfredo Sanz, que sit¨²a en Moncofa, Xilxes y Almenara las zonas con m¨¢s stock.
Marina d¡¯Or ha levantado decenas de edificios de apartamentos
Moncofa es un claro ejemplo de la construcci¨®n desmedida. En este municipio de unos 7.000 habitantes se proyectaron viviendas para 120.000 personas. En total, 31.500 pisos. Se han construido 8.000. La burbuja estall¨® en pleno desarrollo y ahora la costa ha quedado jalonada de bloques de hasta doce pisos donde pr¨¢cticamente no vive nadie. En algunos casos los edificios nuevos han empezado a desconcharse. Hay solares sin edificar frente a moles de ladrillo. Parques infantiles casi desiertos: en pleno d¨ªa festivo solo hay una familia en uno de ellos. ¡°Aqu¨ª en frente [un bloque de 12 plantas] vive una persona¡±, dice un vecino que se encoge de hombros cuando se les pregunta por la fiebre del ladrillo en este municipio. La mayor¨ªa de estos inmuebles son propiedad de bancos (y del banco malo) que han tirado precios. Los empresarios no ven factible que estas construcciones se derriben. ¡°Tarde o temprano se vender¨¢n, est¨¢n en la playa y ser¨ªa una barbaridad tirarlos¡±, dice Renau. Otra cosa son los esqueletos, las obras sin terminar. ¡°Dan mala imagen y son peligrosos, habr¨ªa que tirarlos¡±, comenta Sanz.
Tambi¨¦n el aeropuerto ha jugado su papel en la especulaci¨®n urban¨ªstica. Las expectativas de nuevos turistas llevaron a los Ayuntamientos a dar m¨¢s suelo al ladrillo. ¡°En Oropesa la construcci¨®n ha sido imparable¡±, recogi¨® un reciente informe de Greenpeace. All¨ª, Marina d¡¯Or ha levantado decenas de bloques de apartamentos. Muchos de ellos sin compradores, en propiedad de bancos o en alquiler.
La construcci¨®n en las zonas de costa ha dado lugar a verdaderos esperpentos. En Almassora, un municipio colindante con Castell¨®n, se decidi¨® urbanizar parcelas antes r¨²sticas en el distrito mar¨ªtimo. Donde antes hab¨ªa algunas viviendas unifamiliares se levantan decenas de hileras de chal¨¦s adosados. No import¨® que la playa tenga carencias como la inexistencia de un paseo mar¨ªtimo y, peor a¨²n, que a tan solo unos metros se ubique el pol¨ªgono industrial de El Serrallo donde se instalan empresas como Repsol, Iberdrola, UBE y BP.
Hay tanques de combustible a cien metros de las viviendas. El boom del ladrillo no se par¨® por eso. Pero la crisis y la quiebra de varias empresas han dejado filas enteras de adosados acabados en la ruina por el abandono. Los matorrales y la basura se acumulan frente a otras viviendas donde s¨ª vive gente. Los saqueadores han llegado a desvalijar decenas de chalets. En esta zona se venden chal¨¦s junto a la playa por menos de 60.000 euros.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Crisis econ¨®mica
- Castell¨®n
- Burbuja inmobiliaria
- Recesi¨®n econ¨®mica
- Mercado inmobiliario
- Edificios ruinosos
- Especulaci¨®n inmobiliaria
- Coyuntura econ¨®mica
- Conservaci¨®n vivienda
- Vivienda
- Crisis financiera
- Comunidad Valenciana
- Desarrollo urbano
- Espa?a
- Econom¨ªa
- Urbanismo
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica
- Finanzas