Juguetes circenses llenan Par¨ªs de color
Armado de narices rojas y zapatones, el mundo del circo se hace con el Museo de Artes Decorativas de Par¨ªs, en cuyas galer¨ªas se podr¨¢n encontrar hasta mayo juguetes que reproducen ese colorido mundo, reunidos bajo el t¨ªtulo de "Parade".
En la Galer¨ªa de Juguetes de este c¨¦ntrico museo de la capital francesa se han congregado un buen pu?ado de mu?ecos desde mediados del XIX hasta nuestros d¨ªas y a los que poco les falta para ponerse a hacer cabriolas y poner en escena sus espect¨¢culos de teatro, cine y sobre todo, circo.
Esta exhibici¨®n de ambiente tan infantil tambi¨¦n es apta para adultos, pues adem¨¢s de mostrar vistosos compa?eros de juegos indaga sobre el personaje del payaso, seg¨²n destac¨® a Efe Doroth¨¦e Charles, conservadora a cargo del departamento de juguetes del Museo de Artes Decorativas de Par¨ªs y comisaria de la exposici¨®n.
"La exposici¨®n se interroga sobre este personaje tan caricaturesco y arquet¨ªpico del mundo del circo que los fabricantes de juguetes han reproducido con una gran variedad de materiales a lo largo del tiempo", subray¨® Charles, pues la muestra recorre la evoluci¨®n de la figura del payaso.
La comisaria se?al¨® que la reproducci¨®n de este personaje no ha cambiado demasiado desde mediados del siglo XIX salvo en relaci¨®n a los materiales, que se han modificado desde la madera pintada, el metal y los mecanismos animados hasta el caucho y el pl¨¢stico que dominan la industria actual.
Charles subray¨® que "es m¨¢s en esta l¨®gica de la t¨¦cnica en la que va la evoluci¨®n, pero la imagen del payaso sigue siendo muy arquet¨ªpica, con la nariz roja y zapatones".
Aunque algunas de las piezas mostradas tienen m¨¢s de 150 a?os, se ha querido dotar a la exposici¨®n de una mirada contempor¨¢nea de la mano del artista Jean-Fran?ois Guillon, que ha creado una escenograf¨ªa muy actual con animaciones en v¨ªdeo e instalaciones en blanco y negro que son el contrapunto a los coloridos juguetes.
Algunos de los objetos m¨¢s antiguos son un teatro de papel que los ni?os de 1860 recortaban y montaban ellos mismos o el "Humpty Dumpty Circus" (1903) cuyo ¨¦xito en Francia fue tal que a¨²n se vend¨ªa en 1930 y que a¨²n fascina a los ni?os de hoy que lo disfrutan con las narices aplastadas contra las vitrinas.
Para abordar el segundo eje esencial de la muestra, el mundo del teatro, la exposici¨®n propone una reproducci¨®n muy cl¨¢sica con personajes de la "Commedia dell'Arte" como Pierrot y Polichinela, bien camuflados entre cuentos infantiles populares, como Caperucita o Barba Azul cuyas escenas se reproducen en decorados de teatros de papel.
Entre gui?oles y marionetas tambi¨¦n hay lugar para el cine pues se reproducen fragmentos de pel¨ªculas de algunas de las figuras que m¨¢s carcajadas han arrancado al p¨²blico, como Laurel y Hardy, Charlie Chaplin, Buster Keaton o Jacques Tati, cuya pel¨ªcula "Parade" es raz¨®n parcial del t¨ªtulo de la muestra.
Seg¨²n subray¨® Charles, el t¨ªtulo "Parade" es a la vez "un eco al tel¨®n de fondo del ballet compuesto por Erik Satie y realizado por Picasso" y un homenaje a Jacques Tati, "un payaso contempor¨¢neo" al que se puede ver imitando a un portero en ese largomentraje que dedic¨® en 1974 al mundo del circo.
En este viaje en el tiempo a trav¨¦s de objetos l¨²dicos, el teatro de sombras tiene una parada muy particular de la mano del corto de la alemana Lotte Reiniger y su visi¨®n de "Papageno" (1935) y de dos instalaciones con figuras recortadas que iluminan las luces led de un peque?o tren que al circular entre ellas, proyecta sus siluetas.
Por Elvira Mart¨ªnez
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