Eroski plantea una quita del 30%

Los m¨¢s de 30.000 inversores que creyeron a pies juntillas en la solidez de la empresa Eroski, del Grupo Cooperativo Mondrag¨®n, y compraron 660 millones de aportaciones financieras subordinadas, lo que se conoce popularmente como deuda perpetua, tienen ante s¨ª un dilema.

Defraudados por un producto devaluado que, seg¨²n critican, no fue explicado suficientemente, y embarcados en aventuras judiciales contra la propia Eroski y los bancos que las comercializaron ¡ªBBVA 44%, Caixabank 8%, Kutxabank, 12% y Caja Laboral el 31%¡ª, van a tener que decidir si se casan otra vez con la marca para otros 12 a?os, despu¨¦s de renunciar al 30% de su inversi¨®n, se quedan igual, o se van en masa al juzgado, con los riesgos que implica cada una de las opciones.

La Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores (CNMV) suspendi¨® este jueves cautelarmente, y con efectos inmediatos, la negociaci¨®n en el mercado de renta fija de dos de esas emisiones, al hacerse p¨²blico que la cooperativa y los bancos est¨¢n dise?ando una oferta y sondeando a sus clientes si estar¨ªan dispuestos a canjear sus productos perpetuos por otros a plazo.

La oferta se basa en un canje voluntario por unos bonos de vencimiento a 12 a?os ¡ªeur¨ªbor m¨¢s 3%¡ª, con una quita del 30%, y el 15% de liquidez en el momento de la firma. Las dos emisiones paralizadas cautelarmente, de las cuatro que hizo la cooperativa, son las de 2002 y 2004 agrupadas al tener las mismas condiciones, ¡ªeur¨ªbor m¨¢s 3%¡ª y la de 2007 ¡ªeur¨ªbor m¨¢s 2,5%¡ª. Eroski sostiene que solo en intereses los inversores de la de 2002 han recuperado en torno al 65% de la inversi¨®n.

De aceptar todos sus acreedores el canje voluntario, Eroski enjugar¨ªa 198 millones de deuda de un plumazo, pasando 363 de los 660 de deuda perpetua a otra a largo plazo, y aliviando su situaci¨®n financiera.

El cierre de Fagor, inmersa en concurso de acreedores, y la imagen de inestabilidad y vulnerabilidad del grupo cooperativo que le ha proporcionado todo el proceso, no es el mejor precedente para que los ahorradores den el paso y se embarquen en un compromiso de 12 a?os con esa quita.

Quiz¨¢s por eso la mayor cooperativa de Espa?a se ha impuesto como condici¨®n, antes de comenzar el canje voluntario, cerrar el proceso de refinanciaci¨®n de la deuda de 2.500 millones de euros que afrontan estos d¨ªas con 22 entidades de cr¨¦dito y que, seg¨²n fuentes del sector financiero, va por buen camino.

Varias asociaciones de consumidores dieron este jueves el primer aviso en contra del canje. Kaltetuak, que compareci¨® en la comisi¨®n de Desarrollo Econ¨®mico del Parlamento vasco se neg¨® a renunciar al 30% de sus ahorros y su portavoz critic¨® con dureza la participaci¨®n del servicio vasco de consumo, Kontsumobide, en el dise?o, junto a Eroski, de la oferta de canje. Este servicio puso, el mismo jueves, en valor en una nota que el canje ¡°no exige la devoluci¨®n de los intereses cobrados¡±.

La cooperativa de distribuci¨®n, que ha reducido en 1.200 millones su deuda en este lustro, tiene que hacer frente este pr¨®ximo 31 de enero a un pago de algo menos de 30 millones de euros en intereses a sus preferentistas, cuando su situaci¨®n financiera es complicada.

Eroski anunci¨® este jueves que har¨¢ frente a ese pago en cualquiera de las opciones que tomen los inversores. ¡°Est¨¢ dotado y se pagar¨¢ como se han pagado todos los intereses comprometidos¡±, indic¨® un portavoz. Pero con las elevadas facturas econ¨®micas que Eroski est¨¢ pagando por decisiones estrat¨¦gicas pasadas, unidas a una coyuntura desfavorable, el futuro m¨¢s inmediato no es m¨¢s alentador.

El BBVA, el banco que dirige Francisco Gonz¨¢lez, y la cooperativa que lidera Agust¨ªn Markaide quieren anticiparse y llegar a acuerdos antes de la vista oral convocada para los d¨ªas 21 y 22 pr¨®ximos, en el Juzgado de lo Mercantil n¨²mero 1 de Bilbao.

Los 71 acreedores de m¨¢s de 60 a?os exigen a ambos la nulidad de los contratos y la devoluci¨®n de sus ahorros, deducidos los intereses, por comercializaci¨®n indebida y les acusan de publicidad enga?osa.