Alemania recibe la mayor oleada de inmigrantes espa?oles desde los a?os 60

Los miles de j¨®venes emigrados a Alemania por la crisis conforman ya el segundo mayor grupo de espa?oles en ese pa¨ªs, por detr¨¢s tan s¨®lo de los llegados en la d¨¦cada de los a?os 60 del siglo pasado, dos grupos con un perfil muy distinto pero igualmente acuciados por la falta de trabajo.

Las ¨²ltimas estad¨ªsticas revelan la entidad de esta segunda oleada -la llegada desde 2009- y destacan que sus integrantes suponen ya m¨¢s del 22 % de los espa?oles que residen en Alemania, unas 26.000 personas, frente al 32 % que suman los que llevan m¨¢s de cuarenta a?o en el pa¨ªs, casi 39.000.

Este ¨²ltimo grupo est¨¢ compuesto principalmente por los espa?oles que emigraron durante los a?os 60 para participar del milagro econ¨®mico alem¨¢n como "Gastarbeiter" (trabajador invitado) y optaron por permanecer en el pa¨ªs luego de jubilarse, pero tambi¨¦n por sus hijos.

"La verdad es que nos quedamos bastantes", asegura a Efe Adolfo Fern¨¢ndez, un perito industrial de Zamora que lleg¨® a Hamburgo en 1969, trabaj¨® en los astilleros -junto a hasta "otros 250 espa?oles"- y, tras jubilarse, opt¨® por permanecer en esa ciudad.

"Fue una muy buena experiencia para nosotros y para Alemania", se?ala Fern¨¢ndez, que recuerda las ventajas del "pleno empleo" de entonces y la "seguridad jur¨ªdica y de sueldo": "no intuimos la suerte que ten¨ªamos".

La Oficina Federal de Estad¨ªstica (Destatis) indica que entre enero de 2010 y octubre de 2013 -¨²ltimo mes con datos detallados- la poblaci¨®n espa?ola en Alemania repunt¨® en 16.229 personas, un 16 %, hasta los 120.231 residentes.

Como en la primera oleada, la raz¨®n que lleva ahora a los j¨®venes a emigrar a Alemania es la posibilidad de encontrar un trabajo, ya sea un puesto que cotice a la seguridad social o uno de los denominados "mini-jobs", un empleo de hasta 40 horas mensuales y un salario m¨¢ximo de 450 euros.

"Era imposible encontrar algo con buenas condiciones en Espa?a", reconoce a Efe Natalia Forero, una espa?ola de 23 a?os que trabaja como "au pair" desde hace cuatro meses en Alemania, primero en un peque?o pueblo de Baviera y desde hace unas semanas en Berl¨ªn.

Con una doble licenciatura en Periodismo y Comunicaci¨®n Audiovisual, conocimientos avanzados de ingl¨¦s y b¨¢sicos de alem¨¢n, considera su actual situaci¨®n "mucho mejor que unas pr¨¢cticas en Espa?a", que nunca ser¨ªan remuneradas, aunque a medio plazo aspira a encontrar un empleo relacionado con su formaci¨®n.

Ella es una m¨¢s de los m¨¢s de 10.000 espa?oles, en su mayor¨ªa j¨®venes, que en los ¨²ltimos tres a?os han encontrado un empleo estable en Alemania, algo que, seg¨²n explic¨® a Efe ?ngel de Goya, Consejero de Trabajo y Asuntos Sociales de la Embajada de Espa?a en Berl¨ªn, ha disparado m¨¢s de un 50 % la poblaci¨®n activa nacional en la mayor econom¨ªa europea.

Seg¨²n Destatis, de los espa?oles que resid¨ªan en Alemania en octubre del a?o pasado, casi la mitad ten¨ªa un puesto de trabajo: el 43 % cotizaba a la seguridad social, un 6 % ten¨ªa un "mini-job" y un 5 % percib¨ªa una prestaci¨®n de desempleo.

Pese a que los integrantes de ambas oleadas de emigrantes espa?oles comparten un dif¨ªcil contexto econ¨®mico y laboral, las diferencias entre sus perfiles superan a las semejanzas.

Vicente Riesgo, presidente de la Academia Espa?ola de Formaci¨®n (AEF) en Colonia y miembro del Consejo de Integraci¨®n del Gobierno alem¨¢n, explica a Efe que los emigrantes de los a?os 60 proven¨ªan en muchas ocasiones del mundo rural y alrededor de dos de cada tres llegaron a Alemania con un contrato.

Casi todos se emplearon en el sector manufacturero y en trabajos duros -incluso en la miner¨ªa-, donde no eran precisos ni cualificaci¨®n ni conocimiento del alem¨¢n, detalla Riesgo.

Los nuevos emigrantes espa?oles, por el contrario, proceden de n¨²cleos urbanos y aspiran a residir en grandes ciudades como Berl¨ªn, M¨²nich, Fr¨¢ncfort o Hamburgo.

Adem¨¢s, cuentan en muchos casos con t¨ªtulos universitarios -en una proporci¨®n mayor incluso que los alemanes- y con idiomas -aunque el ingl¨¦s prevalezca a¨²n sobre el alem¨¢n, pero llegan sin una oferta concreta de trabajo.

Para facilitar su inserci¨®n en el mercado laboral alem¨¢n, en los ¨²ltimos a?os han surgido m¨¢s de 180 iniciativas de movilidad bilateral, muchas de ellas integradas en la potente iniciativa alemana "The job of my life", explica De Goya.

En 2013, el primer a?o con este programa estatal en marcha, 1.073 espa?oles consiguieron trabajo en Alemania y otros 1.628 lograron un puesto en un ciclo de formaci¨®n profesional.