Talento directivo
Los mecanismos de gobierno en las empresas, incluso entre las m¨¢s grandes, no siempre permiten la debida selecci¨®n de sus ejecutivos entre los mejores disponibles
A medida que la delegaci¨®n en directivos profesionales no propietarios se ha convertido en dominante en la moderna gesti¨®n de las empresas capitalistas, la calidad de esa funci¨®n de direcci¨®n ha pasado a desempe?ar un papel mucho m¨¢s relevante entre los factores competitivos de las empresas. De ello da cuenta el cada d¨ªa m¨¢s importante mercado de talento directivo en las econom¨ªas modernas. El valor de las grandes multinacionales puede variar dependiendo de la capacidad para hacerse con esa modalidad de capital humano, de liderazgo de las grandes compa?¨ªas. Las decisiones de captaci¨®n y asimilaci¨®n de talentos en la gesti¨®n de las empresas tienen una dimensi¨®n estrat¨¦gica que es tanto m¨¢s significativa cuanto mayor es la dimensi¨®n de la empresa. En los ¨²ltimos a?os, en diversos sectores productivos, no es raro encontrar nombres espa?oles en posiciones elevadas en la estructura organizativa de algunas grandes empresas de proyecci¨®n global. Es una se?al que invita a reconciliarse no solo con la funci¨®n directiva, sino incluso con las instituciones educativas por las que transitaron. Al menos permite descartar insalvables limitaciones idiosincr¨¢ticas a este pa¨ªs en la capacidad para la gesti¨®n empresarial.
Espa?a ofrece una paradoja: dispone de algunas de las escuelas de administraci¨®n de empresas de mayor proyecci¨®n internacional, aun cuando la calidad media de sus empresas no se encuentra entre las mejores del mundo. Algunos de esos directivos que hoy destacan en grandes empresas multinacionales estudiaron en centros de educaci¨®n secundaria, en universidades o en instituciones de posgrado espa?oles. Es probable que la capacidad para destacar tenga m¨¢s que ver con el entorno en el que llevan a cabo sus tareas que con otras explicaciones. En ese entorno tambi¨¦n desempe?a un papel importante el gobierno de las empresas, la existencia de consejos de administraci¨®n que cumplen su funci¨®n con seriedad y con pr¨¢cticas y c¨®digos de comportamiento respetables. Y, en todo caso, con un entorno con calidad de las instituciones y que prima los m¨¦ritos profesionales frente a otras consideraciones.
La posibilidad de producir buenos profesionales de la administraci¨®n de empresas no es lo mismo que disponer de buenas empresas, o de buenos empresarios. En Espa?a no son pocas las limitaciones que pesan sobre la calidad de las empresas. El tama?o es un factor limitativo en algunos casos: a diferencia de otras econom¨ªas, el censo de peque?as empresas, o directamente de microempresas, es mayoritario sobre los casi 3,2 millones de unidades censadas Espa?a. El car¨¢cter familiar puede en ocasiones limitar esa necesaria profesionalizaci¨®n de la gesti¨®n. La tradici¨®n espa?ola no ha favorecido completamente la existencia de verdaderos m¨¦ritos profesionales frente a otro tipo de v¨ªnculos con la propiedad de las empresas.
Claro que se ha avanzado en la direcci¨®n correcta, pero, como con cierta frecuencia ilustra la propia realidad, los mecanismos de gobierno en las empresas, incluso en aquellas m¨¢s grandes, no siempre permiten la debida selecci¨®n de sus directivos entre los mejores disponibles. Queda la esperanza de que buena parte del talento hoy en el extranjero acabe retornando y mejorando la calidad de la funci¨®n empresarial espa?ola, decisiva para la propia prosperidad del conjunto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.