Tor, el programa "protege-secretos" por el que Snowden profesa adoraci¨®n

Cuando la Marina de EE.UU. cre¨® "Tor", un software que garantiza el anonimato virtual y que naci¨® para apoyar el espionaje del Gobierno, seguramente no anticip¨® que alguien como Edward Snowden se convertir¨ªa en su m¨¢s ferviente admirador.

El exanalista de la CIA dej¨® claro la semana pasada en Austin (EE.UU.) durante su intervenci¨®n v¨ªa teleconferencia en el festival multidisciplinar South by Southwest (SXSW) que, cuando de proteger la privacidad se trata, "Tor" es una de sus herramientas favoritas.

"?Qu¨¦ pasos sugieres que adopte una persona com¨²n y corriente para una mayor seguridad digital?", pregunt¨® a trav¨¦s de Twitter uno de los seguidores de la teleconferencia, a lo que Snowden respondi¨®, sin pesta?ear, Tor, una red que, dijo, resulta muy dif¨ªcil atacar.

"Al usar Tor, haces que (las agencias de inteligencia) tengan que, o bien atacar el sistema de Tor, lo que resulta incre¨ªblemente dif¨ªcil, o vigilar las salidas y entradas de Tor, y despu¨¦s ver qu¨¦ factores encajan y es muy complicado", afirm¨® Snowden.

El programa, que puede descargarse en el sitio web del "Tor Project" (www.torproject.org), distribuye los datos del usuario a trav¨¦s de varios servidores, lo que hace muy complicado rastrear qui¨¦n eres o d¨®nde est¨¢s.

Tor elimina tambi¨¦n las conocidas como "huellas digitales", de forma que no se puede seguir la historia virtual de los usuarios.

Periodistas, v¨ªctimas de violencia dom¨¦stica y disidentes en pa¨ªses con reg¨ªmenes represivos figuran entre los usuarios de Tor, cuya importancia, dijo el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en una entrevista con la revista "Rolling Stone" en el a?o 2010, "no se puede infravalorar".

La propia Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EE.UU., asegur¨® en un documento confidencial publicado el a?o pasado por el peri¨®dico "The Guardian" que en el terreno de la seguridad virtual "Tor es el rey" y no tiene "contendientes por el trono".

No est¨¢ claro si Tor fue el servicio que utiliz¨® Snowden para filtrar miles de documentos confidenciales sobre el espionaje masivo de la NSA a "The Guardian" y el diario "The Washington Post", pero su caso demuestra que encriptar la informaci¨®n funciona.

"A los que cuestionan el poder de cifrar (la informaci¨®n) que piensen esto: el Gobierno de EE.UU. todav¨ªa no sabe qu¨¦ documentos se llev¨® Ed (Snowden), porque lo codific¨® todo", afirm¨® en un art¨ªculo reciente en "The Guardian" Christopher Soghoian, principal tecn¨®logo de la organizaci¨®n American Civil Liberties Union (ACLU).

Aun as¨ª, Soghoian reconoce que Tor es un sistema "demasiado complejo" para el ciudadano de a pie y cree necesario desarrollar herramientas que resulten f¨¢ciles de usar a gran escala.

Empresas como Golden Frog, una peque?a firma tecnol¨®gica con sede en Austin, trabajan en esa direcci¨®n, con el desarrollo de un servicio llamado Viper para proteger la privacidad en l¨ªnea, que "hasta una abuela podr¨ªa usar", seg¨²n la compa?¨ªa.

"Nuestra base de clientes creci¨® mucho tras las revelaciones de Snowden", dijo a Efe Trips Reddy-Sharma, exdirectora de mercadotecnia de Golden Frog.

La firma WhisperSystems persigue tambi¨¦n la simplicidad con el desarrollo de RedPhone y TextSecure, dos aplicaciones gratuitas para el sistema Android, que codifican los mensajes de texto y voz.

En pleno ojo del hurac¨¢n del debate sobre la privacidad est¨¢ el modelo de negocio de las grandes compa?¨ªas tecnol¨®gicas de Silicon Valley, como Google o Facebook, que recopilan, guardan y venden los datos de sus usuarios.

"Hay mucha gente insatisfecha. Cuando pregunto a chicos j¨®venes si son conscientes de que Facebook vende sus datos se indignan", dijo a Efe la profesora de la Universidad de Stanford y emprendedora Monica Lam.

"El problema es que esos j¨®venes no tienen alternativas y optan por seguir usando Facebook", asegur¨® Lam, quien lanz¨® recientemente junto con un grupo de sus estudiantes de doctorado Omlet, una aplicaci¨®n que busca competir con WhatsApp, al otorgar a los usuarios control sobre sus datos y los servidores en los que se almacenan.