La internet del futuro ser¨¢ tan omnipresente como el aire que respiramos
Internet fluir¨¢ en el futuro en nuestras vidas como "la electricidad" y ser¨¢ menos visible pero omnipresente, seg¨²n un informe del centro Pew Research, que sale a la luz justo cuando la web sopla las velas de su 25 cumplea?os.
El estudio publicado este mes ha contado con la participaci¨®n de 2.558 expertos en tecnolog¨ªa que llegan a conclusiones "sorprendentemente" similares sobre los patrones que definir¨¢n internet en el a?o 2025.
Los expertos vislumbran un futuro en el que "la mayor¨ªa de la gente acceder¨¢ de forma tan sencilla (a internet), que fluir¨¢ en sus vidas como la electricidad".
Predicen que los aparatos m¨®viles y artefactos inform¨¢ticos que se usar¨¢n como prendas de vestir estar¨¢n conectados permanentemente a la web.
La mayor¨ªa coincide en que la proliferaci¨®n de sensores inteligentes, c¨¢maras, software, bases de datos y enormes centros de datos crear¨¢ un tejido de informaci¨®n global, conocido como el "internet de las cosas", en el que "todo" estar¨¢ conectado a la web.
Adem¨¢s, el uso de tecnolog¨ªa port¨¢til, implantable o lista para llevar puesta permitir¨¢ disfrutar de una "realidad aumentada", que a?adir¨¢ informaci¨®n adicional al mundo real.
"Ser¨¢n menos los que tengan que utilizar un teclado y un rat¨®n o el dedo para interactuar con internet. No tendr¨¢n que estar necesariamente sentados frente a una pantalla, tecleando palabras o haciendo clic en v¨ªnculos para que la Red sea parte de su vida", dijo a Efe Lee Rainie, director del Centro de Internet del Pew Research.
"Ahora mismo estoy hablando contigo por tel¨¦fono y sabemos que no estamos usando internet, pero cuando cuelgue y me siente frente al teclado estar¨¦ otra vez en l¨ªnea", a?adi¨® Rainie.
Pero en el futuro "internet ser¨¢ tan omnipresente, que estar¨¢ en las prendas que vestimos, en las habitaciones en las que estamos, en los autom¨®viles y autobuses en los que viajamos, en el paisaje".
Es decir, "estaremos permanentemente en internet pero sin pensar ni siquiera en ello", algo similar a lo que ocurre ahora con la electricidad, "que no pensamos que est¨¢ ah¨ª y el ¨²nico momento en el que nos acordamos es cuando deja de funcionar".
La red seguir¨¢ alterando tambi¨¦n los modelos de negocio del siglo XX, sobre todo las finanzas, el sector del entretenimiento, las firmas editoriales y la educaci¨®n, seg¨²n el informe.
La mayor¨ªa de los expertos considera que esa omnipresente conectividad ser¨¢ "fundamentalmente positiva".
"El mayor impacto ser¨¢ el acceso universal a todo el conocimiento humano", dice en el informe el economista jefe de Google, Hal Varian, quien cree que "la persona m¨¢s inteligente del mundo podr¨ªa estar atrapada tras un arado en India o China y el darles valor a ellos y millones como ellos tendr¨¢ un profundo efecto en el desarrollo de la humanidad".
Aron Roberts, desarrollador de la Universidad de California en Berkeley, subraya que los dispositivos inteligentes y los sensores en casa o en el trabajo permitir¨¢n "la detecci¨®n temprana de riesgos de salud".
"Podremos, literalmente, ajustar tanto la medicaci¨®n como nuestro estilo de vida a diario o incluso hora a hora", asegura Roberts.
Los expertos apuntan tambi¨¦n a ¨¢reas preocupantes como la brecha digital, el espionaje y el delito.
"Es una espada de doble filo", afirm¨® Rainie, quien destac¨® que el estudio refleja una clara preocupaci¨®n por la privacidad vinculada a las recientes revelaciones sobre el espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EEUU y la participaci¨®n de las grandes firmas de Silicon Valley en el proceso.
Pese a esas tendencias preocupantes, la comunidad tecnol¨®gica se inclina aplastantemente por una "internet abierta" en la que no haya control de los gobiernos o las empresas.
"Estos expertos definitivamente dicen que mantengamos internet abierta incluso si eso implica permitir que haya gente mala haciendo cosas malas, o que los piratas inform¨¢ticos se aprovechen en parte del sistema", explic¨®.
Las ventajas, dicen los expertos, superar¨¢n los problemas que esa apertura generar¨¢.
Teresa Bouza
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