Francia aprueba un decretazo para vetar las fusiones en sectores estrat¨¦gicos
Montebourg lo presenta como un arma de patriotismo econ¨®mico El ministro de Econom¨ªa asegura que ¡°es el final del laisser-faire¡±
A solo diez d¨ªas de las elecciones europeas, y en plena negociaci¨®n para la venta de Alstom a General Electric, el Gobierno socialista franc¨¦s ha aprobado este mi¨¦rcoles un decreto ¡°de patriotismo econ¨®mico¡± que permitir¨¢ al Estado oponerse a las tomas de control extranjeras de un gran n¨²mero de empresas nacionales. Arnaud Montebourg, el ministro de Econom¨ªa, impulsor del decretazo, que ampl¨ªa uno similar aprobado en 2005 por Dominique de Villepin, asegura que la medida supondr¨¢ ¡°el final del laisser-faire¡± (el principio de dejar hacer) y permitir¨¢ a Francia reconquistar su potencia p¨²blica.
El primer ministro, Manuel Valls, firm¨® el decreto gubernamental a petici¨®n del proteccionista Montebourg, conocido como El Desglobalizador y que en estos ¨²ltimos dos a?os se ha erigido en un s¨ªmbolo del intervencionismo y las ayudas p¨²blicas, as¨ª como en el azote de la Comisi¨®n Europea en asuntos de competencia.
El texto del Gobierno ampliar¨¢ a cinco sectores nuevos el decreto aprobado por la derecha gala en diciembre de 2005, que somet¨ªa a la autorizaci¨®n del Gobierno las inversiones extranjeras en once actividades ligadas a las industrias de Defensa y Seguridad. Desde ahora, pasan a estar protegidos tambi¨¦n por el veto pol¨ªtico el aprovisionamiento de electricidad, gas, hidrocarburos y otras fuentes energ¨¦ticas, la explotaci¨®n de las redes de transportes, el agua, las comunicaciones electr¨®nicas y la sanidad p¨²blica.
En declaraciones a Le Monde, el titular de Econom¨ªa, Industria y Tecnolog¨ªa Digital ha explicado que la medida permitir¨¢ a Francia ¡°reconquistar su potencia p¨²blica¡± y ¡°proteger mejor sus intereses estrat¨¦gicos¡±. ¡°Desde ahora podremos bloquear las ventas multinacionales y exigir contrapartidas. Es un rearme fundamental. Francia no puede contentarse con hacer discursos mientras los otros Estados act¨²an¡±, se?ala Montebourg.
En preparaci¨®n desde hace varios meses, el texto se conocer¨¢ como decreto Alstom porque ha sido acelerado a ra¨ªz del inicio de las negociaciones lanzadas por el gigante estadounidense General Electric para comprar la rama de energ¨ªa del constructor franc¨¦s de ferrocarriles. Francia prefiere vender esa parte de Alstom a Siemens, su competidor alem¨¢n, a cambio de su rama de trenes para formar dos grandes campeones europeos de la energ¨ªa y los ferrocarriles.
Montebourg recuerda que ¡°Alstom es esencial para la independencia energ¨¦tica de Francia¡± y ¡°entrar¨¢ en el campo de acci¨®n del decreto como otras empresas estrat¨¦gicas¡±. En el plano pol¨ªtico, la medida parece un intento desesperado de los socialistas, cada vez m¨¢s hundidos en las encuestas e incapaz de mejorar los datos de paro y crecimiento, para recuperar pulso e imagen antes de unas elecciones europeas que se anuncian catastr¨®ficas. Los sondeos estiman que el Partido Socialista ser¨¢ tercero, por detr¨¢s del Frente Nacional y de la Uni¨®n por un Movimiento Popular (UMP).
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