La huelga de pilotos de Air France pone en peligro su viabilidad
Los trabajadores exigen el mismo estatus en la marca de bajo coste Transavia France
Las reivindicaciones de los pilotos han cortado las alas a Air France. En huelga desde el pasado 15 de septiembre, la protesta ha logrado cancelar entre el 50% y el 60% de los vuelos, dejando en tierra ya a m¨¢s de 65.000 pasajeros. Ello le ha supuesto a la compa?¨ªa, que con un programa de ajuste est¨¢ intentando superar sus dificultades financieras, importantes p¨¦rdidas que ya se eval¨²an en m¨¢s de 200 millones de euros. Preocupa tambi¨¦n el deterioro de su imagen.
¡°Se est¨¢ poniendo en riesgo a la empresa¡±, ha alertado el presidente ejecutivo de Air France-KLM Alexandre de Juniac. ¡°Ninguna compa?¨ªa a¨¦rea es inmortal. Tampoco Air France¡±. Ayer, tras la en¨¦sima ronda negociadora, la empresa insisti¨®: ¡°Se est¨¢ poniendo a la compa?¨ªa en una situaci¨®n extremadamente delicada¡±. Desde el Gobierno franc¨¦s, la inquietud es palpable. El primer ministro Manuel Valls ha llamado la atenci¨®n sobre los riesgos y el viernes acus¨® a los pilotos franceses de corporativistas. ¡°Esta huelga es insoportable para los usuarios, insoportable para Air France e insoportable para la actividad econ¨®mica del pa¨ªs¡±, ha dicho Valls.
Para el Gobierno franc¨¦s, que controla el 16% del capital del grupo Air France-KLM, esta huelga es un motivo m¨¢s de preocupaci¨®n sobre la situaci¨®n general del pa¨ªs. El conflicto de la aerol¨ªnea gala puede ser un buen bot¨®n de muestra de las resistencias francesas a las reformas y a la adaptaci¨®n a mercados m¨¢s competitivos.
La direcci¨®n de la aerol¨ªnea hizo el mi¨¦rcoles una primera e importante concesi¨®n tras varios d¨ªas de negociaciones infructuosas: renunciar a su proyecto de desarrollar la marca de bajo coste Transavia Europe, que es el origen de la huelga. No ha sido suficiente para que los pilotos depongan su actitud. La raz¨®n es que el plan contin¨²a, bajo el nombre de Transavia France, sin deslocalizaciones, empresa 100% francesa, pero con sueldos de bajo coste, ¡°en condiciones competitivas¡± con el sector, como dice la direcci¨®n. Los huelguistas insisten en un contrato ¨²nico para todos los pilotos.
El desarrollo de Transavia Europe se planteaba casi como la tabla de salvaci¨®n de Air France. El que es hoy todav¨ªa segundo operador de Europa (tras Lufthansa) sufre un cierto declive. Los resultados financieros del grupo Air France-KLM han sido negativos en los ¨²ltimos cinco a?os, pero los ajustes para aumentar la productividad ya dieron resultado, aunque discreto (130 millones), en 2013. Para este a?o se prev¨ªa una importante mejora, pero en el primer trimestre, el conglomerado declar¨® unas p¨¦rdidas de 614 millones de euros, si bien en el segundo se registr¨® un beneficio de 238 millones. La deuda se sit¨²a en los 5.400 millones.
Esta huelga de septiembre, que supone un coste diario de entre 15 y 20 millones de euros, obligar¨¢ a revisar a la baja los datos de este a?o. Mientras tanto, el n¨²mero de pasajeros transportados (77 millones el a?o pasado) est¨¢ pr¨¢cticamente estancado frente a las firmas de bajo coste, hasta el punto de que ya el pasado a?o Ryanair sobrepas¨®, con 79,3 millones de pasajeros, al gigante franco-holand¨¦s.
Air France-KLM considera que el nicho de negocio est¨¢ en el sistema de bajo coste o low cost, donde reinan Ryanair, EasyJet y la espa?ola Vueling. De ah¨ª la apuesta de impulsar la ahora peque?a filial Transavia, intentando competir en un mercado que en Francia est¨¢ menos desarrollado que en el resto de Europa.
El proyecto origen del conflicto actual era invertir 1.000 millones de euros en Transavia Europe hasta situarla en 2018, con un centenar de aeronaves (ahora dispone de 47) y mil empleos a?adidos, entre las tres primeras de Europa. La presi¨®n de los pilotos ha forzado el cambio de planes. Se enterrar¨ªa el proyecto paneuropeo y se impulsar¨ªa ¨²nicamente Transavia France, que hoy solo explota 14 aviones. Las exigencias del contrato ¨²nico y de nombrar un mediador dificultaban todav¨ªa ayer el acuerdo.
Las condiciones laborales de los pilotos de la compa?¨ªa de bandera francesa Air France son mejores que las de Transavia. Los primeros cubren cada a?o 522 horas de vuelo frente a 625 en Transavia. Los sueldos de los primeros pueden llegar, con a?os de antig¨¹edad, hasta rozar los 200.000 euros brutos anuales. Los de Transavia se quedan en 175.000, seg¨²n el an¨¢lisis de Les Echos.
Los costes de la plantilla de la firma low cost representan hoy d¨ªa el 7% del total frente al 21,2% de Air France, pero los pilotos argumentan que es el modelo de explotaci¨®n el que determina los costes de la compa?¨ªa y no el sistema de remuneraci¨®n.
La empresa, por su parte, reconoce que si los pilotos de Transavia disfrutaran de las mismas condiciones salariales que la empresa madre los costes solo aumentar¨ªan en un 2% o 3%, pero el presidente ejecutivo de Air France, Fr¨¦d¨¦ric Gagey, a?ade: Es un peque?o margen suficiente en el sector para ¡°separar las p¨¦rdidas de las ganancias¡±.
El presidente del sindicato mayoritario de pilotos de Air France (SNPL), Jean-Louis Barber, denuncia el intento de dumping social, ya que la aerol¨ªnea pretend¨ªa convertir Transavia en ¡°una sociedad de derecho portugu¨¦s¡±, pues posiblemente una de las bases de Transavia Europe se asentara en ese pa¨ªs. En efecto, era muy probable, aunque la direcci¨®n nunca lo ha confirmado, que las bases europeas contrataran a personal local con las condiciones laborales que establece cada pa¨ªs.
Despejado ese peligro que rechazaban los pilotos, y aun poniendo fin a la huelga, llevar¨¢ tiempo reparar el da?o causado por un conflicto que otras compa?¨ªas, como EasyJet, ya est¨¢n aprovechando.
Negociaci¨®n impopular
El Estado franc¨¦s posee todav¨ªa el 16% de Air France-KLM. Esa circunstancia es la que ha hecho posible una intervenci¨®n p¨²blica que ha complicado las negociaciones y ha desacreditado a la direcci¨®n de la empresa. El Gobierno franc¨¦s, que mantiene una posici¨®n dura contra la huelga, seg¨²n se desprende de las declaraciones del primer ministro Manuel Valls, se adelant¨®, sin embargo, el mi¨¦rcoles a dar por hecha la gran concesi¨®n: la paralizaci¨®n del proyecto Transavia Europe. Lo hizo a primera hora el secretario de Estado de Transportes Alain Vidalies, cogiendo aparentemente por sorpresa a la direcci¨®n de la aerol¨ªnea, que neg¨® tal decisi¨®n hasta que la admiti¨® por la noche. En contra de lo previsto, los pilotos mantuvieron la protesta.
La retirada de Transavia Europe es, adem¨¢s, una medida parad¨®jica. Durante los primeros d¨ªas de huelga, el presidente ejecutivo Alexandre de Juniac lleg¨® a amenazar con abandonar el plan de expansionar Transavia France y centrar las inversiones solo en la red transeuropea. El cambio de rumbo permanece inexplicado.
Despu¨¦s de casi dos semanas de huelga, esta es altamente impopular. El 69% de los franceses, seg¨²n un sondeo publicado el jueves, ven injustificado el paro. En el resto de los empleados de la compa?¨ªa cunde el descontento contra lo que consideran caprichos de los arrogantes pilotos. Air France, en reestructuraci¨®n desde 2010, ha recortado la plantilla en un 10% y los trabajadores creen que los comandantes de vuelo han sido los mejor tratados. El enfrentamiento fue patente el martes, cuando un pu?ado de pilotos, en manifestaci¨®n, uniformados, frente a la Asamblea Nacional, fueron increpados p¨²blicamente por sus propios compa?eros.
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