Viento espa?ol para la energ¨ªa brit¨¢nica

La inmensidad del mar lo empeque?ece todo. Incluso estos 108 gigantes, tan altos como las torres Kio de Madrid, que emergen erguidos y dibujan c¨ªrculos de 120 metros de di¨¢metro con sus aspas. La perspectiva los junta, pero la realidad es que siete campos de f¨²tbol separan uno de otro y que este parque e¨®lico marino en el noroeste de Inglaterra, el primero que ha construido y ahora opera la espa?ola Iberdrola, ocupa algo menos del doble de la superficie de una ciudad como Bilbao.

El silencio es total cuando se para el motor del Windcat, una embarcaci¨®n con capacidad para 12 personas, que navega entre los aerogeneradores del parque e¨®lico West of Duddon Sands. Por debajo, 200 kil¨®metros de cables enterrados inyectan hasta 280 megavatios de energ¨ªa limpia a la red brit¨¢nica. Una cantidad suficiente para abastecer a 280.000 hogares.

?lvaro Mart¨ªnez Palacio, de 41 a?os, director de operaciones marinas de Iberdrola, habla con orgullo de un proyecto que logr¨® terminarse en presupuesto (unos 2.000 millones de euros) y dos meses por debajo del plazo previsto. El 27 de septiembre de 2013 se erig¨ªa la primera turbina y en enero de este a?o el parque ya produc¨ªa energ¨ªa. "Construir en el mar multiplica la complejidad", explica. Las torres, por ejemplo, se colocaron desde barcos de 15.000 toneladas con enormes patas que se apoyan en el fondo del mar y elevan el buque por encima del nivel del oleaje. Eso ha permitido trabajar incluso durante los temporales de invierno. Fue tal la magnitud de la obra que hubo que construir un centro log¨ªstico de 200.000 metros cuadrados en el puerto de Belfast, con un muelle de 500 metros. La mayor inversi¨®n individual en la bah¨ªa de Belfast en sus 400 a?os de historia. Ignacio S¨¢nchez Gal¨¢n, presidente de Iberdrola, reconoc¨ªa despu¨¦s de la inauguraci¨®n, el pasado jueves, que contemplar una obra de esta envergadura le hace sentirse "orgulloso de ser ingeniero". "Se ha hecho en tiempo y en presupuesto", asegur¨®. "Eso demuestra que lo que aprendemos en las escuelas de ingenier¨ªa sirve para algo, nos ense?an a domar la naturaleza".

El parque genera electricidad para abastecer a unos 280.000 hogares

"El gran reto de la energ¨ªa e¨®lica marina es reducir los costes de instalaci¨®n", explica Mart¨ªnez Palacio. "En el mar el viento es m¨¢s fuerte y m¨¢s constante. Aqu¨ª hay 4.000 horas de viento al a?o, el doble que en un parque e¨®lico terrestre. Pero requiere tambi¨¦n el doble de inversi¨®n, por el coste de instalaci¨®n. Para reducir los costes hay dos v¨ªas. Una, innovar tecnol¨®gicamente: fabricar turbinas de mayor tama?o para lograr m¨¢s eficiencia. Y dos, trabajar en la industrializaci¨®n y estandarizaci¨®n. Por eso son tan importantes proyectos grandes como este, porque te permiten innovar y avanzar en la industrializaci¨®n de los procesos".

La energ¨ªa e¨®lica marina surgi¨® en el norte de Europa a finales de los a?os 90. En Reino Unido, el pa¨ªs donde m¨¢s se ha desarrollado, hay cinco gigavatios instalados, m¨¢s de los que dispone todo el resto del mundo sumado. Y para finales de esta d¨¦cada contar¨¢n con el doble.

El mes pasado la energ¨ªa e¨®lica en Reino Unido alcanz¨® por primera vez a la nuclear. Fue solo durante unos minutos del 6 de octubre. Pero es algo que va a empezar a suceder m¨¢s, en un pa¨ªs con una red de centrales nucleares envejecida. "En la ¨²ltima cumbre europea no solo dijimos que no quer¨ªamos pagar una factura tan alta", brome¨® el ministro brit¨¢nico de Energ¨ªa y Cambio Clim¨¢tico, Ed Davey, en la inauguraci¨®n del parque. "Tambi¨¦n hubo un compromiso de reducir para 2030 un 40% nuestras emisiones de CO2. Vamos en serio en esta dram¨¢tica transici¨®n que estamos haciendo en nuestros sistemas de energ¨ªa".

En el mundo hay medio centenar de parques e¨®licos marinos. Producen un total de siete gigavatios, que equivale al consumo de seis millones de habitantes. Estos parques solo son viables en aguas con profundidades de entre 30 o 60 metros. Por eso en Espa?a, donde los mares enseguida alcanzan profundidades m¨¢s altas, no se han instalado. Pero Iberdrola est¨¢ desarrollando tambi¨¦n un modelo de aerogenerador flotante para utilizar en lugares donde las profundidades oscilan entre los 60 y los 100 metros.

La naturaleza decidi¨® regalar un d¨ªa propio del verano en la v¨ªspera de la inauguraci¨®n oficial del parque, el tercero m¨¢s grande del mundo, construido por Iberdrola (a trav¨¦s de su filial Scottish Power), en asociaci¨®n con Dong Energy. La ausencia de nubes permite ver los aerogeneradores desde los viejos astilleros, a 20 kil¨®metros del parque, de la bah¨ªa de Barrow. Un lugar que, explic¨® el ministro, "estuvo en el coraz¨®n de la revoluci¨®n industrial y ahora est¨¢ en el coraz¨®n de la revoluci¨®n verde que est¨¢ sucediendo en Reino Unido". Desde aqu¨ª se opera y se controla el parque e¨®lico. Aunque tambi¨¦n se puede hacer desde los centros que tiene Iberdrola, l¨ªder mundial en energ¨ªas renovables, en Glasgow y en Toledo.

Cada nuevo parque aprende de la experiencia de los anteriores. Despu¨¦s de este, Iberdrola va a construir otro en el mar B¨¢ltico, en Wikinger (Alemania), que se espera que para 2017 este produciendo 350 megavatios. Y despu¨¦s, uno en East Anglia, al oeste de Londres, que con 7.000 megavatios ser¨¢ el parque e¨®lico marino m¨¢s grande del mundo.