El fraude de las divisas da?a las cuentas de los grande bancos

La investigaci¨®n en curso a escala global por la manipulaci¨®n del tipo de cambio va tomando forma, con n¨²meros. Bank of America se ha visto forzada a revisar sus cuentas por las cargas legales asociadas al expediente, que promete ser masivo. Los 400 millones de d¨®lares (322,7 millones de euros) que reserv¨® el banco anticipando una sanci¨®n provocaron que las ganancias de 170 millones que public¨® inicialmente del tercer trimestre se transformen en p¨¦rdidas de 230 millones.

Lo sorpresa fue doble. Cuando el segundo banco por activos de EE UU present¨® resultados a mediados de octubre, pocos esperaban que hubiera sido capaz de cerrar el trimestre con una ganancia por la masa que tuvo que pagar para zanjar los casos por las hipotecas basura. Ahora retoca las cuentas, algo que suele suceder en muy contadas ocasiones en Wall Street.

Citigroup hizo algo similar la semana pasada, al anunciar unas cargas adicionales de 600 millones en el tercer trimestre tambi¨¦n por la misma investigaci¨®n del fraude en las divisas. Estas dos cifras, sin embargo, no son una indicaci¨®n de la multa que finalmente pueden llegar a pagar las dos entidades y tampoco est¨¢ claro en este momento si la reprimenda ir¨¢ acompa?ada por acciones penales.

Al explicar el borr¨®n, sugiere que est¨¢ negociando una soluci¨®n con los reguladores en EE UU por los fallos en su sistema de negociaci¨®n del cambio de divisas y en los controles internos que aplica en esta unidad de negocio. El mercado de divisas est¨¢ valorado en 5,3 billones de d¨®lares y es uno de los frentes en los que se concentran ahora los reguladores para exigir cuentas.

Esta semana, JPMorgan Chase admit¨ªa en una nota a los inversores que estaba siendo objeto de la investigaci¨®n que lleva adelante el Departamento de Justicia. Las agencias reguladoras en Reino Unido y otros pa¨ªses tambi¨¦n examinan las pr¨¢cticas de una docena de grandes bancos. El mayor grupo por activos de EE UU anticip¨® que el coste legal se acerca a los 5.900 millones.

El temor es que los agentes de tipo de cambio hayan tomado ventaja en las operaciones que realizaban con divisas, aprovechando las debilidades del sistema para ir por delante de sus clientes. Por eso los controles internos que aplican los bancos son claves para evitar abusos. Los dos grupos financieros dicen estar cooperando con los investigadores y esperan ya ser sancionados.