C¨®mo reducir el estr¨¦s en la universidad
Centros espa?oles siguen la estela de universidades como Harvard e imparten cursos para aprender a meditar
Uno de los indicadores m¨¢s utilizados en el ¨¢mbito educativo para medir el estr¨¦s de los estudiantes es el conocido como burnout (quemado, en espa?ol). Este m¨¦todo sirve para evaluar c¨®mo afectan al rendimiento acad¨¦mico los planes de estudio, la acumulaci¨®n excesiva de cr¨¦ditos, la competitividad entre compa?eros o la ansiedad ante los ex¨¢menes.
Los estudiantes de Ciencias Jur¨ªdicas y Econ¨®micas son los que m¨¢s estr¨¦s sufren frente a los de Ciencias Humanas y Sociales que son los que muestran mejores niveles de bienestar, seg¨²n un estudio elaborado en 2005 por el ¨¢rea de Psicolog¨ªa Social de la Universitat Jaume I de Castell¨®n (UJI).
Algunos centros universitarios se han propuesto acabar con el estr¨¦s usando antiguas t¨¦cnicas de meditaci¨®n. Lo llaman Mindfulness (atenci¨®n plena) y ahora mismo es la ¨²ltima tendencia en Harvard, Stanford o Georgetown donde se ofrecen cursos de esta disciplina a estudiantes, docentes o personal administrativo. En Espa?a, la Complutense, la Universidad Comillas ICAI-ICADE o la UJI tambi¨¦n imparten cursos de Mindfulness.
¡°La meditaci¨®n est¨¢ presente en diferentes culturas, pero el Mindfulness ha conseguido el respaldo de la comunidad cient¨ªfica¡±, se?ala Agust¨ªn Mo?ivas, profesor de Psicolog¨ªa de la Universidad Complutense. El origen se remonta a 1979, cuando el profesor de la escuela de medicina de la Universidad de Massachusetts Jon Kabat-Zinn ide¨® un programa de ocho semanas basado en la meditaci¨®n para pacientes con dolor cr¨®nico. M¨¢s tarde, en 1999, Kabat-Zinn y Richard Davidson, profesor de Psicolog¨ªa y Psiquiatr¨ªa de la Universidad de Wisconsin-Madison, realizaron un estudio con un grupo de voluntarios. Tras medir los niveles de estr¨¦s y ansiedad de cada uno de ellos, comprobaron que despu¨¦s de participar en un curso de Mindfulness la corteza cerebral encargada de las emociones y de la resistencia a la adversidad hab¨ªa triplicado su activaci¨®n. Por primera vez, la meditaci¨®n empezaba a ser considerada por los cient¨ªficos.
¡°Universidades de Estados Unidos y Reino Unido se interesaron por el m¨¦todo y proliferaron institutos de investigaci¨®n en Mindfulness en diferentes lugares del mundo. Traspas¨® el campo m¨¦dico y salt¨® al educativo y laboral¡±, apunta Mo?ivas. Una de las primeras empresas en formar a sus empleados en Mindfulness fue Google.
Seg¨²n su inventor, el profesor Kabat-Zinn, el Mindfulness no es una t¨¦cnica. Se trata m¨¢s bien de ¡°estar abierto a jugar con la posibilidad de darte cuenta de que est¨¢s sintiendo en cada momento y no intentar sentirse diferente¡±, explica en el libro Mindfulness en la vida cotidiana (Paid¨®s).
Es el aqu¨ª y el ahora. ¡°Eso implica evitar la dispersi¨®n y focalizar al m¨¢ximo en lo que estamos haciendo¡±, a?ade Mo?ivas. ¡°No solo sirve para reducir el estr¨¦s, tambi¨¦n para mejorar el rendimiento¡±.
La atenci¨®n juega un papel fundamental en el aprendizaje, y, si se dirige a una sola tarea, aumenta la capacidad de rendimiento, indica el estudio Modulation of competing memory system by distraction, publicado en 2006 en la revista cient¨ªfica PNAS. ¡°Vivimos en la era de las distracciones y hasta cuesta leer un email de m¨¢s de tres p¨¢rrafos. El m¨²sculo de la atenci¨®n requiere entrenamiento y no se le da la suficiente importancia¡±, destaca Fernando Tob¨ªas, profesor de la Universidad Comillas ICAI-ICADE. Este centro imparte una asignatura semestral y obligatoria de habilidades personales a los alumnos de primero de Ingenier¨ªa, que incluye varias sesiones de Mindfulness. ¡°Al principio, los estudiantes son bastante reacios a todo lo relacionado con la meditaci¨®n, pero una vez finalizado el curso aseguran controlar mejor el estr¨¦s y los nervios de cara a los ex¨¢menes¡±.
Una de las t¨¦cnicas para conseguir focalizar la atenci¨®n es la respiraci¨®n. ¡°Hay que observar c¨®mo se produce y tratar de no pensar en nada m¨¢s. La mente comenzar¨¢ a divagar sobre alg¨²n pensamiento y en ese momento hay que darse cuenta de que la atenci¨®n se est¨¢ desviando y volver a centrarse en la respiraci¨®n¡±, explica Agust¨ªn Mo?ivas, docente del Programa de reducci¨®n del estr¨¦s que imparte el Centro Superior de Estudios de Gesti¨®n de la Universidad Complutense desde el a?o 2012 y por el que ya han pasado 500 personas entre estudiantes y personal laboral del centro.
¡°Lo que se consigue con este curso optativo de ocho semanas es entrenar a la mente para que se centre en una actividad concreta. Al ser m¨¢s consciente de s¨ª mismo, el estudiante se da cuenta de cu¨¢ndo est¨¢ rindiendo y cu¨¢ndo no; de cu¨¢ndo est¨¢ leyendo de forma autom¨¢tica sin procesar la informaci¨®n o cu¨¢ndo est¨¢ agotado y necesita hacer un descanso¡±.
Mo?ivas recomienda practicar Mindfulness antes de sentarse a estudiar durante al menos cinco minutos. ¡°Relajar la mente aporta claridad para comprender mejor y rendir m¨¢s. Est¨¢ comprobado cient¨ªficamente que en ocho semanas se empiezan a notar los efectos, pero si deja de practicar, se pierde. Es como un deportista; siempre tiene que estar en forma¡±. El curso cuesta 295 euros y los estudiantes pueden obtener tres cr¨¦ditos (ECTS).
Los cient¨ªficos han demostrado que solemos distraernos con cualquier cosa. Matt Killingsworth, de la Universidad de Harvard, se vali¨® de los smartphones para encuestar a los participantes de su experimento, 15.000 personas de m¨¢s de 80 pa¨ªses. Durante un tiempo, el investigador les envi¨® alertas a trav¨¦s del m¨®vil para que los participantes contestaran r¨¢pidamente qu¨¦ estaban haciendo y en qu¨¦ estaban pensando. Killingsworth concluy¨® que pasamos un 47% de nuestro tiempo pensando en cosas distintas a las que estamos haciendo. Quiz¨¢ sepa usted de lo que le estamos hablando. ?En qu¨¦ ha estado pensando mientras le¨ªa este art¨ªculo??
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