Mario cruza el Rubic¨®n
El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, acaba de conseguir lo que era impensable cuando tom¨® posesi¨®n en 2011. El pasado agosto en Jackson Hole dio un discurso clave en el que advert¨ªa del riesgo de deflaci¨®n y reconoc¨ªa que era provocado por la debilidad de la demanda. Ayer aprob¨® un programa masivo de compras de bonos por valor de m¨¢s de un bill¨®n de euros en total, que incluye sobre todo deuda p¨²blica.
Hay que resaltar la habilidad y la capacidad de liderazgo de Draghi para conseguir este gran logro. Pero sin el alejamiento sistem¨¢tico de la inflaci¨®n de la eurozona de su objetivo y de la tasa de paro del pleno empleo no habr¨ªa sido posible.
S¨®lo la anticipaci¨®n y el anuncio de la medida ya ha provocado cambios significativos en el tipo de cambio y en los tipos de inter¨¦s. El euro cotiza a 1,14 contra el d¨®lar y los bonos a 10 a?os espa?oles e italianos han bajado al 1,5% anticipando la compra de bonos que ayer aprob¨® el BCE. Esto favorece nuestras exportaciones, as¨ª como el turismo, lo cual tendr¨¢ impacto positivo sobre el empleo y los salarios. Tambi¨¦n reduce el aumento del pago de intereses de la deuda p¨²blica y aminora los recortes de gasto necesarios para alcanzar nuestros objetivos de d¨¦ficit. No obstante, Jap¨®n lleva haciendo compras masivas de bonos desde 2012 y su econom¨ªa ha tenido un mejor comportamiento que la eurozona desde entonces, pero sigue estancada. La rebaja de tipos de inter¨¦s tiene que llegar a las pymes, pero la restricci¨®n de cr¨¦dito sigue siendo muy intensa.
Adem¨¢s, la compra de bonos no resuelve la crisis griega. Este domingo hay elecciones y los griegos y los alemanes tocan partituras diferentes. El nuevo Gobierno griego tendr¨¢ que negociar un nuevo pr¨¦stamo con la troika. Habr¨¢ mejores condiciones que en los anteriores, ya que Grecia ha conseguido su compromiso de super¨¢vit primario. Pero Syriza tendr¨¢ que renunciar p¨²blicamente al 90% de las propuestas de su programa econ¨®mico. Si no est¨¢ dispuesto a ello, le abrir¨¢n la puerta para salir del euro, como le hicieron a Papandreu en 2010 y a Chipre en 2013.
Jap¨®n ha tomado medidas similares a las del BCE desde 2012, pero sigue estancado
El escenario m¨¢s probable es que el nuevo Gobierno griego acepte las condiciones y haya acuerdo. Pero si Grecia sale del euro, el impacto ser¨¢ mayor que la quiebra de Lehman Brothers y la Reserva Federal no pudo evitar la Gran Recesi¨®n. Draghi ha tenido que ceder ante la presi¨®n alemana para que cada pa¨ªs compre sus bonos y asuma el grueso de las p¨¦rdidas en caso de impago. Esto aleja a Europa de la mutualizaci¨®n de la deuda y de la uni¨®n fiscal que es condici¨®n necesaria para resolver la crisis del euro.
La compra de bonos ayudar¨¢ a mitigar la deflaci¨®n pero no sacar¨¢ a Europa del estancamiento secular en el que se encuentra. Adem¨¢s de una mutualizaci¨®n de las deudas es necesario un plan de est¨ªmulo fiscal. El plan Juncker es un buen inicio, pero debe ser financiado con eurobonos que ya pueden ser comprados por el BCE.
Hay que valorar positivamente los cambios producidos en el BCE y la llegada de Moscovici a la Comisi¨®n Europea. Ahora faltan indicios de vida inteligente en el Consejo Europeo. Espa?a es clave, con Francia e Italia, para contrarrestar a Alemania. Pero Rajoy vendi¨® su alma a Merkel el pasado verano en Santiago por una foto que ya nadie recuerda.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.