Duro desencuentro pol¨ªtico-financiero

Mayo de 2012 fue un mes vital para los gestores de Bankia. Lejos de aquella tensi¨®n, que supuso reflotar el banco, febrero de 2015 tambi¨¦n ser¨¢ recordado por el equipo de Jos¨¦ Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, por la incertidumbre vivida y por haber sufrido la primera injerencia de la pol¨ªtica en la gesti¨®n del banco.

Goirigolzarri esperaba que 2015 fuera el ejercicio de la ¡°estabilidad¡± y de la ¡°normalizaci¨®n¡± de la situaci¨®n, como ¨¦l mismo lo defini¨®, apoyado por el reparto de dividendos. Sin embargo, los informes de los peritos del Banco de Espa?a que concluyeron que las cuentas de la entidad estaban maquilladas en su salida a Bolsa, han recordado al terremoto de otros d¨ªas pasados.

La tensi¨®n entre el Ministerio de Hacienda, apoyada por la Oficina Econ¨®mica de Moncloa, contra las tesis del Ministerio de Econom¨ªa, impact¨® en Bankia.

La entidad cuenta con el apoyo del ministro Luis de Guindos (y del FROB), para minimizar el posible coste de las demandas judiciales que pueden llegar por la salida a Bolsa. Su argumento es que si Bankia provisiona mucho dinero y hunde el beneficio, ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil recuperar los 22.424 millones inyectados.

Sin embargo, en este a?o electoral, el responsable de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, as¨ª como los abogados del Estado (que quieren evitar problemas con la justicia si llegan demandas), no quer¨ªan dar la imagen de que el Estado volv¨ªa a ayudar a Bankia ya que tiene suficiente dinero para pagar las demandas.

Para Hacienda, Bankia deber¨ªa pagar todas las demandas, lo que se consideraba traspasar una l¨ªnea roja en Bankia. El equipo directivo de la entidad, y algunos consejeros, trasladaron su malestar al Gobierno.

Para el Ejecutivo, Goirigolzarri se excedi¨® al forzar que se llegara a una soluci¨®n en febrero con la amenaza de que presentar¨ªa resultados incluso sin acuerdo pol¨ªtico. Ha sido necesario negociar durante todo febrero para alcanzar un acuerdo que aparentemente salve los argumentos de ambos pol¨ªticos.

Guindos asegur¨® que Bankia solo asumir¨ªa los primeros 250 millones de las demandas: han acabado siendo 312, pero es cierto que representan el 40% del total. El acuerdo no cubre a las demandas de los inversores institucionales, algunas ya anunciadas, que pagar¨¢ Bankia. Una batalla que ha dejado huella entre la entidad p¨²blica y el Gobierno.