Puddle, el banco entre amigos

La colecci¨®n de nombres es interminable. Cuchubal en Guatemala, tanda en M¨¦xico o tontina ¡ªeste ¨²ltimo, quiz¨¢s, el t¨¦rmino m¨¢s extendido¡ª. As¨ª es como se suele llamar a una bolsa com¨²n de dinero creada entre varios amigos y conocidos en los que conf¨ªan. Un sistema informal para tomar dinero y despu¨¦s devolverlo, con un peque?o inter¨¦s. Jean Claude Rodr¨ªguez-Ferrera (Barcelona, 1971) descubri¨® este sistema despu¨¦s de vivir un tiempo en Am¨¦rica Latina. Decidi¨® estudiarlo y termin¨® publicando una tesis doctoral: Modelos de microfinanciaci¨®n comunitaria. "Lo usan personas de toda clase de manera habitual, como forma de hacer peque?as compras imprevistas o inversiones inesperadas", matiza.

Este fue el germen de Puddle, una web que permite el pr¨¦stamo entre amigos tomando la relaci¨®n en Facebook como punto de partida para despu¨¦s definir qu¨¦ cantidad y bajo qu¨¦ condiciones puede tomar cada miembro. El camino recorrido ha sido largo. Empez¨® creando comunidades de cr¨¦dito a trav¨¦s de cuentas bancarias, primero en Espa?a, con un grupo de amigos, y luego en varios pa¨ªses europeos. "Con la crisis muchas personas vieron c¨®mo se quedaban fuera del sistema", explica.

Luego, decidi¨® que, con la popularizaci¨®n de Internet y la escasa escalabilidad de su negocio, hab¨ªa llegado el momento de trasladarlo a la web. "Estaba convencido de que lo que funciona offline, lo hace online", explica. Tras un viaje a San Francisco para proponerle colaborar a Matt Flannery, fundador de Kiva ¡ªun sistema de microcr¨¦ditos sin ¨¢nimo de lucro¡ª, sali¨® con una servilleta dibujada y una llamada pendiente. A la ma?ana siguiente llam¨® a su mujer pidi¨¦ndole que viniera a Silicon Valley. "Yo le ped¨ª ayuda para buscar inversores y ¨¦l me propuso montarlo juntos. En un fin de semana ya ten¨ªamos un primer prototipo. No pod¨ªa decirle que no, o que ten¨ªa que pens¨¢rmelo despu¨¦s de llamar a su puerta", se justifica. Pocos d¨ªas despu¨¦s se sum¨® Skylar Woodward, cofundador de Kiva y exempleado de Yahoo! De ¨¦l depende la parte t¨¦cnica. La empresa acaba de estrenar su versi¨®n definitiva; por ahora, solo en EE UU.

Puddle permite tomar hasta cinco veces la cantidad depositada. Para entrar, basta con recibir la invitaci¨®n de un conocido y conectarse a trav¨¦s de la cuenta de Facebook. Despu¨¦s llega el proceso de creaci¨®n de confianza: hay que pedir a los amigos que confirmen que el nuevo miembro es digno de formar parte del grupo. "Lo habitual es decir que s¨ª, pero tambi¨¦n la tasa de devoluci¨®n es mucho m¨¢s alta", subraya. Cada mensualidad suele a?adir entre seis y ocho euros de cuota adicional. Casi todos los pagos se espacian en solo seis meses.

Las cantidades que normalmente se piden oscilan entre los 500 y 600 d¨®lares. Un matiz: hay que rellenar un campo diciendo en que se emplear¨¢ el dinero.

"Bueno, somos un poco como la mafia", bromea. "Una vez que entras es dif¨ªcil que salgas. Puedes llevarte tu dinero, por supuesto, pero si vuelves, tienes que volver a construir la red de confianza. La segunda vez no es tan sencillo". E insiste en que no quiere acabar con los bancos: "Solo que, si necesitas dinero, se lo pidas a tus amigos".?