El sindicato de pilotos paraliza 10 d¨ªas las l¨ªneas a¨¦reas de Portugal

El sindicato de pilotos de las l¨ªneas a¨¦reas portuguesas, TAP y Portug¨¢lia, inicia este 1 de mayo diez d¨ªas de huelga para reivindicar el 20% de la compa?¨ªa, que est¨¢ en tr¨¢mites de privatizaci¨®n. TAP es la ¨²nica compa?¨ªa a¨¦rea europea con el 100% de su capital en manos p¨²blicas.

De los m¨¢s de 2.000 vuelos que ten¨ªa programados la compa?¨ªa para estos d¨ªas, apenas se realizar¨¢ el 10%. Solo el archipi¨¦lago de las Azores mantendr¨¢ todos sus vuelos, mientras que los servicios m¨ªnimos decretados no contemplan ning¨²n vuelo para Espa?a. TAP y Portug¨¢lia dejar¨¢n de transportar a 320.000 personas.

Las p¨¦rdidas econ¨®micas directas se cifran en un mill¨®n de euros diarios, a las que habr¨ªa que a?adir las indirectas, que llegar¨ªan hasta los 70 millones en total, seg¨²n c¨¢lculos de la empresa, 30, seg¨²n el sindicato. La patronal tur¨ªstica, sin embargo, eleva sus efectos negativos en el sector hasta los 300 millones de euros.

A la huelga se llega despu¨¦s de que la empresa rechazara la pretensi¨®n de los pilotos de hacerse con la propiedad del 20% de TAP, desterrando un acuerdo-promesa de 1999 a cambio de una congelaci¨®n salarial. En ese acuerdo, los 800 pilotos de la compa?¨ªa se convert¨ªan en propietarios de TAP en un porcentaje que llegaba hasta el 20%, mientras que los 13.000 restantes empleados de las l¨ªneas ¨¢reas obten¨ªan un 12%. El fiscal general del Estado consider¨® aquel acuerdo jur¨ªdicamente ilegal y nunca se aprob¨® en Consejo de Ministros.

"Durante a?os, el sindicato de pilotos ha tenido prisionera a la direcci¨®n de TAP.? Un d¨ªa ten¨ªa que acabar esa situaci¨®n", ha dicho el primer ministro Passos Coelho.

Seg¨²n el presidente de TAP, Fernando Pinto, aquel acuerdo solo afectar¨ªa en la actualidad a 190 pilotos que contin¨²an en activo de una plantilla de 800; aunque el presidente del SPAC dice que el acuerdo se extiende tambi¨¦n a los actuales.

El pasado diciembre, el mismo sindicato de los pilotos SPAC, junto a otros ocho de la empresa hab¨ªan amenazado con una huelga, pero un acuerdo entre trabajadores, Gobierno y empresa acab¨® con el conflicto. El acuerdo, aprobado en Consejo de Ministros, garantizaba a los trabajadores que el futuro due?o de la empresa -en junio el 66% de la sociedad ser¨¢ privada- no podr¨ªa realizar ning¨²n ERE en sus primeros tres a?os de gesti¨®n. Ahora, con esta huelga, el resto de sindicatos teme que el nuevo propietario tenga manos libres para realizar reestructuraciones.

En esta ocasi¨®n, la actitud del sindicato de pilotos no ha encontrado ning¨²n apoyo en el resto de trabajadores. El mi¨¦rcoles varios centenares de personas se manifestaron contra la huelga -en un gesto muy inusual cuando se trata de respetar derechos laborales-; el gremio de los pilotos tambi¨¦n se ha mostrado dividido, sin embargo la direcci¨®n de SPAC ha mantenido la convocatoria.

Manuel Santos Cardoso, presidente del sindicato, ha manifestado que llevar¨¢n al Gobierno a los Tribunales por incumplimiento del acuerdo de 1999. Esa declaraci¨®n ha abierto las discrepancias, pues el resto de sindicatos cree que la v¨ªa l¨®gica de la reclamaci¨®n ser¨ªa la judicial y no una huelga que va a poner en peligro el futuro de la compa?¨ªa, ya de por s¨ª maltrecha.

"La huelga pone a la compa?¨ªa en una situaci¨®n extremadamente dif¨ªcil", declar¨® en la tarde del jueves el presidente de la Rep¨²blica, An¨ªbal Cavaco Silva. A las cr¨ªticas se ha sumado el secretario general del PS, Ant¨®nio Costa. El primer ministro, Pedro Passos Coelho, a¨²n fue m¨¢s lejos: "Durante a?os, el sindicato de pilotos ha tenido prisionera a la direcci¨®n de TAP. Alg¨²n d¨ªa ten¨ªa que acabar esa situaci¨®n".

El pasado a?o, la deuda l¨ªquida de TAP es 10 veces superior a su Ebitda, cuando en 2013 solo era 4,9 veces m¨¢s. La falta de dinero p¨²blico, limitado por las leyes europeas, ha impedido la renovaci¨®n de aparatos, con el consiguiente aumento de aver¨ªas en el pasado verano, a lo que hay que a?adir 22 d¨ªas de diferentes huelgas y avisos de huelga.

Desde 1999, la privatizaci¨®n de TAP ha sido un objetivo de los diferentes Gobiernos de Portugal, del signo que fueran. Lo hab¨ªan intentado los socialistas de Ant¨®nio Guterres y Jos¨¦ S¨®crates, y hace tres a?os el actual primer ministro socialdem¨®crata, Pedro Passos Coelho. Despu¨¦s de fracasos por diferentes razones, parece que este junio el 61% de la compa?¨ªa tendr¨¢ nuevo due?o (m¨¢s un 5% a la venta para trabajadores). Con esta privatizaci¨®n, el Estado portugu¨¦s no espera recaudar nada. El nuevo propietario, previsiblemente sudamericano (la espa?ola Air Europa acab¨® por renunciar), se quedar¨ªa con la deuda de la compa?¨ªa y se comprometer¨ªa a inyectar capital en TAP, adem¨¢s de mantener su sede en Portugal.